Capítulo 3 Florencia

26 4 0
                                    

Capítulo 3 Florencia.

Seguí leyendo,  y las siguientes páginas,  decían que Había conocido a una chica llamada Florencia,  tenía sobre peso pero no se avergonzaba de eso .

Al contrario estaba orgullosa de si misma .

Cada vez que me sentía triste ella me arrastraba a comer  hamburguesas o helado .

Ella siempre sabía como animarme .

- Si la vida te da limones , has limonada rosa  con mucha azúcar - eso era lo que siempre decía.

Yo la admiraba por lo alegre y confiada que era .

Por suerte en el diario había anotado su dirección,  un lugar que estaba cerca de un parque de atracciones.

Habíamos salido juntas a comer toda clase de comida deliciosa , mientras nos divertíamos.

Un día estábamos comiendo pizza en el restaurante de 3 peperonis , cuando algunos de nuestros compañeros de clases entraron.

Nos vieron y comenzaron a Reírse de Florencia y de mi .

Incluso uno de ellos me tiro su gaseosa encima .

Yo casi me puse a llorar como un bebé,  pero entonces Florencia me defendió y se vengo de ese chico lanzándole una rebanada de pizza a la cara .

Las dos nos reímos como locas .

Pero luego el diario decía que había discutido con Florencia y que ya no nos hablábamos.

Todo eso ne pareció muy extraño,  pues no recordaba nada de lo que estaba escrito en ese cuaderno .

Quien era Florencia? Y donde podía encontrarla ? .

Esos pensamientos comenzaron a atormentarme .

Al día siguiente le pregunte a mi mamá,  si recordaba a una amiga mía llamada Florencia.

Ella se puso nerviosa , pero fingió no saber de lo que estaba hablando .

Eso me hizo enfurecer , salí de casa y decidí resolver el misterio por mi cuenta .

Fue a la dirección que decía el papel pero allí no había ninguna casa .

Lo único que había allí,  era una camioneta vendiendo algodón de azúcar.

Me comencé a sentir inquieta , y mi cabeza se llenaba cada vez de más y más preguntas .

Por lo que luego fui a ese restaurante llamado 3 peperonis , para ver si allí averiguaba algo nuevo .

Cuando entré sentí una leve sensación familiar .

Pero no recordaba haber estado allí antes.

Incluso uno de los empleados me saludo como si ya me conociera .

Yo no entendí nada , pero decidí irme al sentir un fuerte dolor en mi cabeza,  que me hizo volver a casa .

Mis demonios y yo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora