Capítulo IV

148 18 19
                                    

Poco a poco abrí los ojos. Me encontré en el suelo de la sala de música, con mis pantalones bajados y sin camiseta, sudado y con lágrimas cristalizadas en mis mejillas. Pronto escuché una voz familiar.

-Ya despertaste mi ángel -dice Yeonjun mientras se acerca a mi y me regala un suave beso en mi pómulo izquierdo- te ves precioso, tan mío.

-Suéltame Yeonjun -le respondí para sentarme y abrazarme a mi mismo en un intento de separarme de él.
Sentí como sus brazos me envolvieron en un abrazo, que más que sentirse como un abrazo con cariño, se sentía como uno con posesión, con ganas de que me quede a su lado haga lo que él haga.

-Angel, no me tengas miedo, lo que te hice solo fue un acto de amor.

-Yeonjun... me violaste, te dije que pares y tú no, no lo hiciste —forcejee para tratar de soltarme de su agarre pero sus brazos eran el triple de fuertes que los míos y claramente logró mantenerme en mismo lugar de antes.

-Cariño, sabes que yo nunca haría tal cosa como esa, solo te toqué un poco estás -lo interrumpí dándole un manotazo logrando hacer que me suelte y levantándome apenas tengo la oportunidad.

-¡¿QUÉ NO HARÍAS TAL COSA COMO ESA?! TE DIJE QUE PARES Y NO LO HICISTE, BASTA YA YEONJUN, ME VOY -le grité histéricamente para empezar a abrocharme el pantalón y con rápidos movimientos coger mi camisa y mi saco.

-BEOMGYU -me agarró de la muñeca- DE AQUÍ NO TE VAS.

-SUÉLTAME, NO TE QUIERO VER, ME TRAICIO- mis palabras fueron interrumpidas a la mitad por una bofetada que me llegó a mi cara, no me lo esperaba por más que él ya lo había hecho anteriormente. Mis ojos amenazaron con volver a lagrimear.

-NO SE TE OCURRA VOLVER A LLORAR CHOI, TÚ NO ME CONTRADIGAS NUNCA -el miedo se había empezado a apoderar de mi de verdad, cuando lo miré otra vez a los ojos ya no lo veía más como la figura amable y atractiva que había conocido de él, solo vi a una réplica exacta de mi padre.

-Me voy -forcejee un poco más y salí de la habitación casi corriendo tratando de llegar a mi aula y agarrar mi mochila he irme de ese edificio.
¿Acaso yo no merecía ser feliz? Mi familia me odia por ser gay, dañé los sentimientos de mis amigos y por si fuera poco, el único amor que he tenido me viola. Quizás yo no estaba hecho para ser amado.

Seguía caminando casi corriendo, no quería ir a mi casa pero tampoco tenía otra opción, mi padre me mataría si llegaba tarde otra vez, pero ¿por qué me preocupo porque me mate? Si ya estoy muerto en vida.
Mi corazón dolía fuertemente y me costaba respirar, solo quería llorar hasta que el cielo se apague y no pueda ver la luz del día.
Todo era mi culpa ¿quién te manda a meterte con un hombre mucho mayor que tú Beomgyu? Dios, estaba tan arrepentido de todo.

Al poco tiempo noté que ya estaba en la puerta de mi casa, con mi mano en la perilla de la puerta, apunto de abrirla, pero había algo que me decía que no lo hiciera, que volviera con mi profesor y me fundiera en sus brazos como ya lo había hecho esta tarde. Ignoré mis impulsos y al abrir la puerta y me encontré con que no había nadie en casa, todo estaba solitario, mejor para llorar a gusto.

Subí a mi habitación, dejé mi mochila en el suelo y me tiré a mi cama, traté de llorar, quería llorar pero no podía, mi mente no me dejaba. Deseaba tanto llamar a Kai y a Tae y contarles todo.
Agarré mi teléfono y les marqué, esperé hasta que llegó el tono -Kai no se encuentra en este momento, si necesitas algo deja un- colgué, estaba desesperado, quería hablar con alguien, llamé a Tae pero fue la misma historia -Taehyun no se encuentra en este momento, si- volví a colgar, aún tenía la esperanza de que respondieran si llamaba por el chat grupal.

-Hey Beom, ¿en dónde estabas hoy eh? Hiciste sentir mal a Kai, nos ignoraste -dice Taehyun de forma tranquila

-Oye, en serio, no hagas eso de ignorarnos, de verdad que se me salieron tres lágrimas, ya no estamos en infantil para jugar a las escondidas -incluso después de haberlo hecho llorar, Kai seguía tomando todo con diversión.

Why am I secret? || Yeongyu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora