La Nota

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Después de un breve almuerzo con su novio, Martina volvió a su casa. Al llegar no encontró a nadie, entonces fue directo a su cuarto. Tendida en la cama que estaba totalmente desarreglada pensó en que pudo impulsar a Camila a quitarse la vida.

Camila siempre había sido sobre saliente en las actividades que desempeñaba, aunque callada y algo tímida. En la universidad tenia buenos amigos y no tenía problemas con nadie, además de tener a un novio atractivo e inteligente, y que además la cuidaba y la quería, o, por lo menos, Así recordaba Martina la vida de su hermana..

Cansada de plantearse un montón de hipótesis sobre los hecho ocurridos en los días anteriores, se dirigió a la habitación de Camila, allí aún estaban las pertenencias de esta justo como ella las había dejado la última vez, antes de tomarse un cóctel de pastillas demasiado fuerte que su cuerpo no pudo resistir.

Al entrar a la habitación, sintió que su hermana estaba con ella. Una sonrisa melancólica llego a su rostro, pensó que así fueran solo ideas de su cabeza esto le brindaba algo de consuelo. Se dirigió rápidamente a la mesa de noche de su hermana y tomo el celular. No supo porque o como, pero sintió que algo en ese móvil podría ayudarla a encontrar algún indicio sobre la muerte de Camila.

Algunas personas creen que los gemelos comparten un vínculo especial que es insustituible y que les hace poder sentir y comprender mejor a sus pares. Esto explicaría porque Martina tomo el celular antes que cualquier otra pertenencia de Camila.

Después de examinar cada carpeta, se detuvo en el bloc de notas. La última tenia fecha de 03 de abril de 2012 a las 4:30 a. m. Justo 14 horas antes de que su hermana hubiera muerto, según la autopsia realizada a su cuerpo que fue encontrado dentro de automovil ya sin vida. La nota era bastante extensa así que Martina se sentó en la cama de su hermana que todavía estaba revuelta pues así la había dejado ese jueves, la última mañana que abrió los ojos. Tomando un gran respiro comenzó a leer:

-Ya no tolero más esta situación. Ya no quiero seguir aparentando que todo está bien cuando está lejos de ser así. Ya me canse de ser la mascota de mi casa, porque así es como me siento, a mis papás no les importa que me pasa, para ellos no soy más que una inversión que a futuro les tendrá que dar ganancias cuando empiece a trabajar y de una vez puedan deshacerse de mí, la verdad no entiendo porque han esperado tanto si bien podrían haberme mandado a una universidad fuera del país. Supongo que no lo hicieron solo por guardar las apariencias, seria todo un escándalo que la hija perfecta decidiera alejarse de su familia.

Para mi hermana no soy más que un estorbo en la casa. Una jovencita inmadura e ingenua que está lejos de parecerse a ella y que no es digna de llevar el apellido restrepo, que solo es débil y consentida. Me gustaría poder parecerme un poco a ella, es muy segura y no tiene miedo de decir lo que piensa y decidir por sí misma, yo no puedo hacer eso, no me sentiría capaz de tomar esas decisiones, el miedo es mayor que yo. - En ese momento Martina recordó como discutía con su hermana diciéndole que no era más que un llorona y una mojigata, porque su actitud era siempre tan sumisa, y por eso le molestaba tanto, pues algo que ella había aprendido era que de estas personas había que cuidarse, pero a pesar de su convicción respecto a ese tipo de comportamientos, realmente nunca llego a pensar que su hermana fuera una mala persona, solo muy inocente para ver lo que le rodeaba y eso la hacía enojar, quería con tantas ganas que su hermana abriera los ojos y que se diera cuenta que la vida no es color de rosa, que olvido que ella también tenía muchas cosas que aprender todavía. Tomando un gran respiro consiguió volver a leer:

-...Por otro lado esta Julián yo sé que él me quiere, pero no de la forma en que Freddy quiere a Martina, yo los he visto y Julián está lejos de quererme así. Creo que el solo está conmigo porque soy bonita o eso dicen. Que ironía que piense eso, porque yo solo puedo ser bonita por fuera, que tendría de atractivo una cascara Vacía? Pobre Julián el solo necesita compañía, de no ser así hace mucho me habría dejado sola como lo hacen todos a menudo.

Y eso "Amigos" que tengo en la universidad son toda una farsa, solo están conmigo porque soy lo que llaman "Popular" pero solo dentro en esta etiqueta por la posición social privilegiada en la que me encuentro, porque de estar quebrada como lo están la gran mayoría de los estudiantes universitarios estaría más sola de lo que estoy ahora, aunque no sé si eso sea posible, hasta Johana que es mi supuesta mejor amiga me dejaría sola. Ya no quiero pensar más en eso, ya no quiero tener que fingir, odio tener que verles las caras y tener que estar conforme con todo, Voy solucionar esto de una vez, no hay valor en vivir una vida vacía, es casi como estar muerto en vida, ya es hora de hacerle un favor al resto del mundo y librarlos de mí. Ya no quiero volver a despertar.

Con estas últimas palabras de su hermana, Martina se tiro a llorar en el suelo. Cuan solo se sentía su hermana, cuan vulnerable era ¡Que inmensa tristeza la carcomía por dentro! Ni ella que había compartido su vida desde el útero se había percatado del estado anímico de Camila. ¡Si tan solo pudiera retroceder el tiempo y pudiera darle un abrazo sincero para luego decirle que la quería en verdad y que podía contar con ella! Pero ya era tarde, ya no podía hacer nada. La percepción que tenía su hermana del entorno que la rodeaba la impacto mucho, jamás la creyó capaz de tener semejante juicio sobre los demás, a fin de cuentas no eran tan diferentes.

En ese momento se percató de la presencia de sus padres en la casa y decidió contarles lo que había descubierto en el celular de Camila. Su madre lloro mares en cuanto escucho lo que su hija había pasado y no pudo más que culparse de lo sucedido. Doña Olga y don simón tendrían que cargar con esa cruz el resto de su vida, sabiendo que les importo más el trabajo que darles un abrazo a sus hijas, no porque así lo quisieran sino porque creían que lo material era más que suficiente para mostrar cariño verdadero y ese fue su mayor error. Esa necesidad de alabar en todo momento al dios dinero los cegó al punto de que la vida de sus hijas se les hacía ajena.

Adiós Camila...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora