Sólo Consuelo (Kai /Jong In)

Quiero jugar contigo

Cuando salió del vestidor ya no estaba él, sonrió ante la idea de que se hubiera ido ya, cruzó la puerta de la cafetería y reposado en un carro estaba él esperándola, la sonrisa que tenía se desvaneció, Kai se dio cuenta, frunció el ceño acercándose a ella.

-No pareces muy feliz de verme - le susurró tocando su mejilla, ella también frunció el ceño

-Puedes decirme de una vez ¿qué quieres? - preguntó exasperada, él le regaló una sonrisa ladina

-Ya te dije, a ti - su voz era tan embriagadora que ella se mareó por un instante, no creía lo que escuchaba

-¿Por qué yo? - la voz de ella tembló

-¿Quieres saber? - preguntó tomando su mano, ella asintió - entonces ven conmigo, te lo explicaré - le jaló de la mano y se dejó llevar por él, la maldita lista de errores parecía haber sido borrada de su mente.

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Cuando entraron al departamento supo que había sido una mala idea, a solas con Kai sabía que todo era posible, la invitó a sentarse en el sofá, aceptó aunque al sentir el brazo de él rodeando sus hombros creyó que había cometido otro error.

-No te pongas nerviosa - le dijo acercando su rostro al de ella - No te comeré - se mordió el labio observándola completa - no por ahora - eso le erizó la piel, trató de alejarse pero su agarre era fuerte - cuando me di cuenta que eras como yo supe que había encontrado a la persona correcta - comenzó a decirle, ella iba a decir algo pero cerró sus labios con su dedo indice - déjame terminar - tragó saliva al sentir su piel contra la de ella, sólo era su dedo indice y ya estaba así - Tengo ciertas necesidades como hombre querida Natalie, lamentablemente no estoy en posición de meterme con quien sea, te he estado observando y creo que eres perfecta para satisfacerme - los ojos de ella se pusieron como platos, quería preguntarle algo pero mejor se quedó callada - No quiero una relación amorosa y creo que tú tampoco, así que es perfecto ¿no crees? - al parecer ahora podía hablar, él le miraba expectante a escuchar su respuesta, en sus ojos había tanto deseo

-¿Por qué soy cómo tú? y ¿Por qué yo? - preguntó finalmente, él sonrió de esa manera sexy que le derretía

-Digamos que ambos tenemos el corazón roto y necesitamos consuelo - murmuró tratando de sonar seductor pero ella sintió cierto pesar en sus palabras - Porque eres diferente, tú entiendes lo que siento pequeña

Esas palabras le habían llegado, sentir que tu corazón ha sido destrozado, que te dejen sin vida por días y sin poder creer lo que sucedía, que el mundo avanzara sin ti, no quería sentirse de nuevo de esa forma, ¿despecho? quizá pero algo tenía en común con Kai, necesitaba satisfacer sus necesidades ¿Y qué mejor que él? Sin pensarlo se lanzó a su labios, él la recibió satisfecho por su acción, al parecer había tenido una respuesta positiva de parte de ella.

-Te haré olvidar - le murmuró al oído, mordía su oreja luego trazó un camino de besos por su cuello, ella acariciaba el cabello de Kai, era tan suave y del largo justo para jalarlo mientras la llevaba al extasis

Le sacó la playera deseando tocar sus perfectos pechos, se encontró con su molesto sujetador rosado, lo arrancó de ella dispuesto a terminar lo que había empezado en la cafetería, ella por su lado comenzó a quitarle la playera que andaba puesta él, al ver que no podía Kai se la quitó para ella dejando al descubierto su bien formado abdomen, ella suspiró al verlo por fin expuesto para ella. El sillón se sentía pequeño para ella, deseaba ir a la cama.

-Vamos a la cama - murmuró ella mientras sus bocas se complacían con besos

-No - contestó - quiero cogerte duro aquí - tomó su cintura y la presionó al bulto que se estaba haciéndose notar a causa de la excitación, presionó sus labios a los de ella y gimió de placer, le agarró la mano derecha y la dirigió a su bulto, quería que lo tocara