El Señor Pez y la hada de azucar - Kanojo Okarishimasu

Capítulo 2

Los anfitriones prepararon una fila de buffet, y reunimos nuestros platos para comer. Ahora, tal vez era el lado de negocios en mí, pero pensé que su disposición era un poco ineficiente. Con platos alineados alrededor de la mesa desde brochetas de pollo hasta gyoza y rollos primaverales, todos tenían que dar la vuelta a toda la mesa para probar todo. Si fuera por mí, habría tenido la mitad de la cantidad de platos diferentes y duplicado las porciones, permitiendo que la gente obtuviera lo mismo de cualquier manera, y habríamos terminado de recoger la comida el doble de rápido. Pero tal vez estaba pensando demasiado, o tal vez simplemente tenía hambre. En cualquier caso, los anfitriones alentaron a la gente a volver por segundos más tarde, una vez que la congestión inicial se calmó, y las cosas empezaron a mejorar después de eso.

Terminé cerca del final de la fila porque había estado ayudando a Mizuhara con la comida, pero eso no me importó mucho. Solo necesitaba encontrar a mis amigos para sentarme con ellos. Resulta que Sasapai y Kuri se habían acercado a Shinbo y Kawanaka; mientras tanto, Kibe estaba comiendo en el jardín con una chica vestida como Batwoman. Supongo que tenía mala memoria.

"No seas tímido, Sr. Fish", dijo Mizuhara, arrastrando una silla hacia su mesa. "Descansa tus pies y come algo".

Ella estaba siendo muy amigable si pensaba que era un desconocido, y hasta sus amigos se dieron cuenta. "Señorita Ciruela Azucarada, no tenía idea de que te gustaran tanto las criaturas marinas", dijo Shinbo la vaquera. "Quizás por eso nunca podemos convencerte de que salgas voluntariamente con chicos. ¡Estábamos intentando con la especie equivocada!"

A Mizuhara no le hizo gracia, lanzándole a Shinbo una mirada fresca. "No sé de qué estás hablando, Señorita Catástrofe. No tengo miedo de los hombres si eso es lo que estás insinuando. Simplemente tengo cosas más importantes en las que concentrarme. Hoy estamos organizando esta fiesta, y haré todo lo posible para ser una buena y acogedora anfitriona". Fresca como una lechuga. Se necesitaría más que un poco de burla para desconcertarla.

"Así es, déjala en paz, Catástrofe", dijo Kawanaka el cuervo, que tenía un plato lleno de comida que Kuri le ofreció compartir. "Es suficiente con que se haya arreglado para este evento". Aplaudió admirada y sonrió a Mizuhara. "¡Nuestra propia Hada Ciruela Azucarada! Realmente la has clavado hoy".

Con eso, Mizuhara sonrió y pareció relajarse. "Gracias, fue divertido. ¡Me encanta tu atuendo también, Cuervo! Las plumas negras realmente le añaden algo".

Kawanaka hizo una pose como un ave hiperconsciente, y las chicas estallaron en risas. Realmente me ayudó a relajarme también. Las probabilidades de que alguien descubriera que Mizuhara era Mizuhara eran bajas, y era tan agradable verlos a todos divirtiéndose, especialmente Mizuhara, por supuesto, dada toda la situación por la que había pasado en los últimos meses. Estaba feliz de simplemente sentarme y disfrutar del ambiente de la fiesta: las conversaciones indistintas que tenían lugar en el resto de la casa mientras comíamos, el tintineo de los utensilios mientras la gente se servía segundos, y el sordo golpeteo de la música desde la sala principal donde algunas personas ya estaban poniendo algunos videos de karaoke. Devoré algunas alitas de pollo y dejé que la vibra me envolviera... solo para que mi silla se balanceara hacia atrás y chocara contra una calabaza ornamental.

"¡Whoa, compañero!" dijo Shinbo, que se levantó de su asiento para enderezar la calabaza. "No te vuelvas demasiado libre y fácil ahora, ¿oyes?"

Me sonrojé de vergüenza y me disculpé, pero Mizuhara no lo aceptó. "Vamos a llevarte por este lado para que no sigas chocando con eso". Movió su silla, y yo también me moví, más cerca de ella y de las otras chicas. Pensé que eso sería todo, pero Mizuhara tenía otras ideas. "Tienes un disfraz bastante interesante, ¿verdad, Sr. Fish? ¿Cómo se te ocurrió esa idea?"