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❛ Mimos y Citas. ❜
Desde que Alex se declaró de Arin en la fiesta estuvieron un poco mucho empalagosos, aunque aún no eran nada. Cada vez que salían al parque juntos o ir a otro lado se les veían muy cariñosos y juntos. Arin estaba como un chicle pegado en Alex, que siempre le daba mimos y besitos a su amado. En la escuela no fué diferente, seguían de empalagosos y amorosos entre ellos, tanto que hasta Alexis trato de separarlos porque quería pasar tiempo con su gran amigo Arin. Cosa que por suerte si logró.
Era un día más de todos los días, y los empalagosos del salón estaban empalagosos y cariñosos. Ya era rutina que mientras esperaban del profe ellos estén de mimosos.
Alex estaba llenando de besos la cara del castaño, que reía en voz baja porque los besos le daban cosquillas.
"- ¡Ya Alex!, déjame tranquilooo.-" Dijo haciendo un puchero el menor mientras recibía más besos en la cara. El contrario dejó de dar besitos en la cara del ojos celestes. Haciendole pensar que por fin tiene libertad de los besos de su amado.
"- Si estás así de tierno, ¿Como crees que te voy a dejar tranquilo?-" Dijo el pelinegro sonriéndole dulcemente, mientras agarraba la cara del contrario y beso suavemente los labios del menor con la misma dulzura que siempre los besaba.
En poco tiempo el beso fué correspondido, haciendo que sus labios se muevan en el beso. Durante el beso Arin puso sus brazos alrededor del cuello de Alex mientras que el hibirido de pato abrazaba la cintura del que besaba, atrallendolo hacía el.
Durante el beso no se dieron cuenta que había llegado el profesor. El señor iba a iniciar con la clase pero notó como dos de sus alumnos se estaban comiendo la boca y suspiro, siempre lo mismo con ellos dos. El de tercera edad caminó hacia donde estaban el castaño y pelinegro besándose.
"- A mí no me importa si ustedes son novios y estén besándose, pero durante la clase ya saben que besos no.-" Dijo el adulto haciendo asustar a los adolescentes quienes lo miraron apenados. Todos en la clase se rieron de ésto y Alexis ya tenía motivo para molestar a su hermano.
[..]
Durante el recreo Arin se encargó de darle mimos a Alex que estaba arecostado en las piernas del menor. El castaño acariciaba suavemente el cabello color negro de su amado mientras comía galletas. Miró como estaba el mayor y vió que tenía los ojos cerrados disfrutando de las caricias que le daba el contrario.
"- ¿Me das una galleta?-" Lo escuchó decir. Entonces el ojos celestes agarro una galleta del paquete y se la dió en la boca al pelinegra, como si fuera un bebé.
Arin mientras seguía acariciándole suavemente el pelo a Alex veía como los del primer grado hacín un mini partido con los del tercero. Estába tranquilo acariciando con suavidad el cabello de su amado, cuando escucho que lo llamaban. Entonces se Dio la vuelta su cabeza dónde provenía el llamado y vió a Roier y a Jeiden mirándolo. Parecía que estaban discutiendo.
