LIKE A TATTOO | TAEKOOK [+18]

X: FOR US

Y ódiame, mátame y tírame al olvido

O ámame, sálvame y llévame contigo

Créeme si digo: que en la guerra y el amor eres el mejor error que he cometido .

Sus oídos duelen por el pitido del autobús que se detiene de golpe, los alfas detrás de él mirándole y no pudo ocultar su expresión de odio cuando enfocó a unos de ellos. Se bajó de un salto e inhaló profundo, sonriendo ante lo bonito que se veía esa mañana.

Aprieta la mochila en su hombro soltando un suspiro entre cansado y anhelante, es su primer día siendo jefe de piso y el brillo de sus ojos opacan los fotones que se reducen en rayos solares, camina a pasos calmos y sus labios se secan por la ansiedad que siente pero, sin embargo, sigue caminando sin mirar atrás.

El joven omega agradeciendo estar vivo, amando ser él mismo, aún antes las miradas sociales que demeritan su existir; él se abraza, él se siente, él se tiene, no necesita que nadie le diga cómo debe vivir, porque nadie le hizo suceder, él sucedió.

Su atención está puesta al frente mientras caminaba, tarareando y moviendo la cabeza de lado a lado mientras lo hace. Escucha pasos detrás de él y eleva una ceja pero no se detiene. Cuando los pasos aumentan a su compás es cuando se gira de golpe, elevando ambos brazos por seguridad y es ahí cuando baja un poco la mirada al notar al chico de lentes que parece más asustado que él, con la mano arriba y tragando saliva cuando Jungkook levanta una ceja.

"¿Qué estás haciendo?" las manos del chico se juntan y lleva su mirada al piso, apretando los labios, sus ojos un poco escondidos por sus cabellos desordenados. "¿Por qué me sigues?"

"Oh- hm... yo- lo siento, vi su mochila abierta y quise avisarle, se te cayó esto"

Él levanta la identificación de Jungkook que le da acceso a su edificio y al omega casi le da un infarto, girando de golpe su mochila viendo que está abierta, lo cierra y suelta un suspiro aliviado al notar que no le falta nada.

"¡Gracias, niño!" Jungkook agarra la identificación y lleva la mano a darle palmadas a sus cabellos, de paso arreglándolos un poco.

"¿Cómo te llamas?" Jungkook nota el sonrojo en las mejillas del chico por lo que suelta una pequeña risa, retrocediendo un par de pasos.

"Lo siento, niño, ¡no esta vez! ¡Nos vemos! " El omega le regala una última sonrisa y se gira, empezando a correr con aquel chico mirándole hasta que desapareció en la esquina.

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El nerviosismo ha sido su compañía desde que tiene memoria. Sus manos se remueven en la camilla y se levanta despacio cuando el médico le indica que lo haga, acomodando su camisa y observando atento al médico.

"¿Ha venido solo?" Jungkook aprieta las manos y levanta una ceja ante la pregunta del médico.

"No entiendo por qué no podría" El alfa anciano le mira por encima de los lentes y luego enfoca sus tatuajes como si fuera algo de otro mundo. "¿Hay algún problema, doctor?"

El señor se mueve lado a lado, suspirando como si le fuera difícil hablarle a un omega como un humano normal, Jungkook nota la preferencia en el trato por lo que se va levantando de la camilla, acomodando la camisa dentro de sus pantalones. Frunce las cejas, mirando fijamente al alfa que nota el brillo en sus ojos soberanos y es ahí cuando retrocede, aclarando la garganta antes de hablar.