Una noche En Manhattan

Capitulo 22

❤️¿Apreciarle?❤️

Era una palabra muy suave cuando lo que sentía era mucho más fuerte, profundo, duradero... y aterrador.

Jamás se le habría ocurrido emplear la palabra «amor» en relación con Mile PhakPhum, pero, en ese momento, era la única palabra que expresaba lo que sentía por él. No era un amor de amigos, aunque ya lo consideraba más un amigo que un enemigo. Era un amor devorador que

había brotado durante los últimos días, o quizá antes.
La primera vez que hicieron el amor había provocado un cambio en su actitud hacia él, y no solo por lo apasionado que había sido. La unión de sus cuerpos había

desencadenado una unión de sus mentes, de sus intereses, de sus talentos e, incluso, de sus desencantos por algunos aspectos de sus infancias. El había sentido una afinidad emocional con él que no había sentido con

nadie.

¿Era ridículo que esperara que Mile sintiera lo mismo y que quisiera seguir con su aventura e, incluso, llamarlo relación en vez de aventura?

¿Cómo había podido engañarse a sí mismo y convencerse de que no quería vivir con alguien? No estaba hecho para estar solo y que le gustara.

Anhelaba un amor profundo y duradero, un amor que le ayudara a sobrellevar los reveses de la vida, un amor que fuera una alianza de verdad, un compromiso entre dos iguales para construir una vida feliz y productiva.

Una vida familiar donde los hijos adoptados serían bien recibidos y queridos, donde les estimularían y animarían para que fueran lo que quisieran ser. Se había

negado esos anhelos hasta que había conocido a Mile, pero ya no podía pasarlos por alto tan fácilmente.

Mile le tomó la mano por encima de la mesa. La vela se reflejaba en sus ojos oscuros negro azabache y proyectaba sombras en su rostro, parecía un personaje

de una película en blanco y negro. ¿Cómo había podido llegar a creer que no se enamoraría de él? ¿Cómo había podido llegar a creer que sería inmune a su atractiva presencia, a sus admirables virtudes, a su relación
sexual devastadora?, Era todo lo que buscaba en una pareja para toda la vida y no había creído que lo encontraría. No le bastaba con tenerlo como

amante pasajero. ¿Cómo había podido llegar a creer que una aventura llegaría a sofocar todo lo que despertaba en el?

Mire nuestras manos unidas. Era un contacto que ya conocía, pero que seguía siendo electrizante. Levantó la mirada para mirarlo a los ojos y vio

que lo miraba con una intensidad profunda.

-Quiero preguntarte una cosa -comentó mile con la voz ronca.

Nattawin tragó saliva disimuladamente y el corazón le dio un vuelco.

-¿Qué...? Pregunto curioso Nattawin.

Se hizo el silencio y él le miró la cara como si estuviera

memorizando todos sus rasgos. Empezó a acariciarle el pulgar con su pulgar y el sintió un escalofrío por toda la espalda. Acabó mirándolo otra vez a los ojos con una mirada enigmáticamente sombría.

-¿Qué te parece ser mi... pareja?

Nattawin parpadeó como si una luz la hubiese deslumbrado. Se le paró el corazón, se le encogió el estómago y, entonces, el pulso se le aceleró a toda

velocidad.

-¿Tu...tu ... pareja? -repitió Nattawin titubeando.

¿Estaba pidiéndole que se casara con él? No podía ser, sería mucho más directo y claro. ¿Debía preguntárselo? No. El corazón le latía con tanta fuerza que le retumbaba en los oídos y se le salía del pecho.

-No... No lo entiendo... seguía titubeando.

-Bueno, mi socio-él sonrió-. No quiero que trabajes para mí, quiero que trabajes conmigo, a mi lado. Estos días se ha demostrado que trabajamos muy bien juntos, que nos equilibramos, y sé que formaríamos un magnífico equipo creativo.