[©EL PLAY BOY] <REESCRITO DE NUEVO

Capítulo Uno

Axel

Me desperté con un dolor de cabeza terrible parecía que me iba a morir, al girarme, vi una chica morena  en mi cama con una sabana que cubría aquel cuerpo desnudo, me sentí confundido al principio pero luego me acorde  que estaba en la fiesta de fin de vacaciones de mi amigo.

Estaba bailando con esa misma chica , ella está restregando ese cuerpo delgado sobre mi,tenía una sonrisa de esas coquetas y yo solo quería coger me la.

Flask back

–paramos un poco?... Te invito a una copa –el ambiente estaba muy cargado así que la aproxime a mi cuerpo, sursurando una invitación para tomar algo  ella asintió y nos fuimos donde el barman y pedí dos copas de Licor.

–¿como te llamas? –la pregunté fingiendo interesarme de su nombre siendo que no me interesa.

–Sindy Martínez

–Sindy Martínez eh ... Yo soy Axel Loboch

Hubo tanta charla , volvimos a la pista de baile, bebimos, me beso, y yo que iba hacer corresponder al  beso, convencí de irnos a mi casa para continuar lo mejor, son interrupciones, la casa de mi amigo era una opción, pero no, de seguro ya estaría ocupada por gemidos de adolescentes hormonales como yo.

Mi padre se encuentra fuera por un viaje de negocios, así que solo está mi hermanito de quince años en casa. Nos dirigimos a la habitación, y allí ocurrió lo inevitable: pasé la noche con ella. Es increíble en la cama, pero para mí fue solo un pasatiempo, así que tuve que despertarla para que se marchara.

Ahora

"―Guapa, despierta, es hora de irte―dije mientras salía de entre las sábanas y me ponía los pantalones.

"La chica abrió los ojos confundida y somnolienta.

"―¿Cómo dices?

"―Que ya puedes irte de mi casa―le informé.

"Pero ella protestó:

"―Pero no... ¿No me vas a dar un beso de buenos días? No eres romántico.

"Hizo un puchero que podría haberme parecido lindo si me gustara, pero ese no era el caso. La chica creía que habíamos congeniado y que yo iba a ser amable con ella, pero yo no soy el tipo para esas guarradas románticas. No pude contenerme y me reí de su estupidez.

"Ella preguntó confundida:

"―¿De qué te ríes?

"―Me río de lo ingenua que eres... Mira, te dejaré las cosas claras para que entiendas: eres linda, divertida y muy buena en la cama, pero no lo suficiente como para mantenerme enganchado. Así que no me interesas. Eso es todo; puedes irte."

La chica se quedó en silencio por un momento, sus ojos llenos de una mezcla de sorpresa, tristeza y decepción. Luego, sin decir una palabra, se levantó de la cama y comenzó a vestirse. Su postura era rígida y su mirada perdida en el vacío. Cuando estuvo lista para irse, se volvió hacia mí con una mirada fría y decidida.

―Gracias por dejarme las cosas claras – dijo con voz firme antes de salir de la habitación sin mirar atrás.

Debería dolerme, sí, pero en verdad, me vale un rábano ¿Qué?, soy realista.