¡Fuera de aquí!

41 3 2
                                    

Selena, se podría decir, tenía el corazón en la mano 

Su preocupación era inmensa y trataba de mantenerse tranquila rezándole a todos los santos que conocía  

-¿Cómo está? - preguntó rápidamente al ver que Arash salía de la habitación 

Lo había llamado tras darse cuenta de que no podía manejar la situación ella sola y Arash le había pedido retirarse 

-Está bien, necesita algo de tiempo, pero más tarde puede verlo. Por ahora lo mejor es que usted descanse sabiendo que está bien 

Esto la alivió, pero aún así no descansó 

Al contrario, decidió ocuparse un poco del trabajo de Ignis con ayuda de Rowan, quien le explicaba lo que debía de hacer 

• 

***
Por la noche 

Selena tenía una bata de dormir blanca, estaba fuera de la habitación donde Ignis había estado desde su desmayo anterior 

Al entrar, su sorpresa fue enorme: 

Ignis no parecía el mismo que había visto más temprano 

Sus ojos no tenían brillo, eran oscuros y fríos 

Se veían penetrantes 

Tragó en seco antes de hablarle 

-Ignis, ¿Te sientes bien? 

-... 

No hubo respuesta 

-Ignis... ¿Estás bien? Me asustas un poco... - se acercó lentamente hasta que estuvo justo detrás de él -Respóndeme - su tono era más firme, como una orden (grave error) 

Levantó su mano para ponerla en su hombro, pero él sujetó su muñeca con fuerza antes de que lo tocara 

De hecho, demasiada fuerza 

-¿Quién te crees que eres para darme órdenes?

-Suéltame, nunca te di una orden - el hecho de que lo tuteara lo enfureció más y la soltó 

 -Largo, no te quiero ver 

-No me iré, te has vuelto completamente loco 

-Vete antes de que llame a un guardia - la amenazó, pero ella no se dejó intimidar 

-¿Y qué le dirás? ¿Que saque a TU ESPOSA EMBARAZADA? No seas ridículo 

-Dije que te vayas 

-Esta también es mi habitación, no me iré 

Hubo un momento de silencio, por lo que Selena trató de acercarse a la cama 

Ignis la jaló del brazo con fuerza, haciendo que casi perdiera el equilibrio 

-¡Fuera de aquí, he dicho! - le gritó 

Selena tembló un poco, nunca le habían gritado de esa forma 

Y al tratarse de Ignis... 

Le asustaba mucho 

-... - ella no respondió 

-Fuera, vete. 

La respiración de Selena se aceleró rápidamente, no sabía qué hacer y su cabeza comenzaba a dar vueltas 

Entonces una criada entró a la habitación: 

-Majestades, con su permiso. Lord Celestine Evan requiere hablar con los dos 

-Voy... Voy a recibirlo... - Selena se trató de mover hacia la puerta como pudo, era complicado así que la criada la ayudó 

Afuera otros sirvientes estaban, esto porque el grito de Ignis  los había alertado de que algo pasaba 

-¡Hermana! ¿Qué pasó? - Celestine de inmediato se acercó a Selena y la abrazó para tratar de calmarla aunque fuera un poco 

Estaba al borde del llanto, temblaba y no parecía estar en condiciones de pensar en nada 

'Pagará caro si esto es su culpa, no me importa que sea el emperador o cualquier cosa. Inclusive si es el mismísimo Dios del cielo' - se juró a sí mismo apretando su puño para así calmar su ira y sangre que hervía a la par que corría por sus venas 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 08 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

RecuérdameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora