Dominante y dominado

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Tony abre los ojos lentamente, sintiendo una sensacion calurosa y humeda en su miembro viril, le gusta lo que siente. Abre los ojos y solo ve las sabanas moviendose lentamente por debajo; ya sabe quien es el autor de la felacion que recibe: Maya. Tony todavia se sentia un poco agotado de la noche anterior, habia tomado viagra debido a su disfuncion erectil  por que no se le paraba debido a los nervios, pasaron toda la noche haciendo el amor bajo la luz de la luna llena.

Ahora sentia un placer inimaginable, una sensacion que lo hacia echar sus ojos para arriba. Mientras sentia ese placer de otro mundo, Maya introdujo un dedo en su ano. Tony, sorprendido gime de manera excitante y no se resiste, le gustaba ser sumiso. 

El omega sigue a su alfa.

No podia hacer nada del placer tan fuerte que estaba sintiendo, cuando de repente, Maya escupe en su mano y le introduce otro dedo en su ano, ahora son dos. Era la primera vez que le hacian algo por detras, habia perdido su virginidad anal con el amor de su vida. Maya habia dejado de chupar su pene y ahora solo se dedicaba a dedearlo intensamente. Tony estaba tirado de pecho en la cama y tenia los ojos cerrados, mordiendo la almohada para no gritar de placer. De pronto tony deja de sentir los dedos dentro de el y se voltea para ver que ha ocurrido y ve a Maya sacando algo de su buro.

- ¿Que es eso? - pregunta Tony, algo confundido.

- Shhhh, es una sorpresa, cierra los ojos. - le dice Maya susurrando.

Tony se voltea de nuevo hacia la almohada y presiona su cara contra ella, cerrando los ojos y preguntandose que sera esa enigmatica sorpresa. Mientras pensaba eso, siente como un liquido frio se escurre por su ano, lo siente entre los muslos y le da un escalofrio. Escucha un ruido humedo y los dedos de Maya lo penetran, introduciendo ese misterioso liquido dentro de su ser.

- Relajate - le susurra Maya a su oído, con amor.

- Esta frio - le responde

- Descuida, se va a sentir muy bien, pronto - le responde Maya con voz tranquilizante.

Tony siente como algo grande se empieza a introducir en el, azota la cabeza contra la almohada y la muerde para no gritar. Apenas van 2 pulgadas y Tony ya no puede aguantarlo, siente una mezcla de dolor y placer, tan intensa que todos sus sentidos desaparecen y lo unico que existe en el mundo es lo que está ocurriendo dentro de el.

3 pulgadas, Tony siente como se expande su ano y grita de dolor.

4 pulgadas, no creia que pudiera haber algo tan profundo dentro de el.

5 pulgadas, Tony siente que ya no puede entrar mas, le duele intensamente pero en secreto, quiere que entre mas.

6 pulgadas, siente que se va a desmayar, pero el placer que siente oo mantiene consiente.

7 pulgadas, ahora lo unico que queda del dolor que sentia tan intensamente es un recuerdo fantasma, una sensacion.

Lo unico que siente ahora es placer, su cavidad recta ahora estaba acostumbrada a tener algo tan grande y largo dentro de el, lo llenaba y le producia un placer que sentia no debe de ser de este mundo.

Palpitaba, lo sentia, su ano recien quebrantado palpitaba por el daño que habia recibido, y le producia una sensacion todavia mayor de placer.

Mientras Tony se inundaba en su placer, Maya empezo a retractar el juguete, sacandoló lentamente de su ano. Tony sintio como se iba recorriendo por dentro de el, hasta que finalmente salio y sintio un vacio dentro de el, un vacio que ahora deseaba llenar. Y no se quedo con las ganas, pues Maya rapidamente volvio a introducir el juguete dentro de el. Tony se volvio sorprendido, pero incapaz de retener un gemido de placer que escapo de su boca, tan fuerte como un grito. Cuando miro detras de el vio algo que lo confundio, pero a la vez lo excito mas. 

Maya tenia un cinturon amarrado a su pelvis, con el cual acababa de embestir contra las nalgas de Tony, separandolas con el inmenso poder que le concedia el dildo. Tony no pudo hacer nada mas que volver a morder la almohada, ya que lo que estaba sintiendo era demasiado para el.

Una embestida tras otra, Maya realmente estaba destrozando su ano, y Tony no podia hacer nada mas que gemir de tanto que lo disfrutaba.

Cada vez que el juguete entraba, Tony se retorica de placer, hasta que las embestidas y su pene erecto frotandose contra el colchon hizo que Tony no pudiera con mas.

Y entonces, con un gemido tan fuerte que los vecinos pensaban que habia sido un perro, Tony se corrio y mancho las sabanas de blanco, sacudiendose cada vez que salia un chorro de semen, hasta que ya no pudo mas y simplemente se quedo ahi; inmovil, sudando y transpirando.

- M-Maya... - dijo Tony con voz temblorosa - Eso... fue increible, nunca pense que se pudiera sentir un placer asi.

- Oh, todavia no hemos acabado - le respondio, con una voz tan imponente que Tony quizo salir corriendo.


50 corridas de TonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora