Capítulo 3: Recuerdos

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Poco se encontraba curando las heridas de sus dos amigos en la habitación compartida que tenían, su parte superior estaba desnuda, exhibiendo marcas frescas de latigazos que expresaba dolor y crueldad. Es un castigo por no haber cumplido su misión, aparentemente solo recordaban haber entrado al bar y despertar en las calles, pero, el "esqueleto" estaba inquieto, el bucle del vampiro en su mente lo inquietaba.

— No debimos hacerte caso Colt. — inculpaba Shelly, se miraba las manos con sangre en ellas, cerró los puños al terminar de hablar

— Bueno, fue una ¡Ay! una- buena noche, no la quiero repetir. — era un desafío no gemir de dolor con el frío y el ardor del desinfectante cubriendo sus heridas abiertas — Poco, estuviste muuuuy callado, generalmente eres parlanchín. —

Poco dejó de hundirse en sus pensamientos.

— No soy parlanchín, oye, que mañas de avergonzar a tus amigos con sus defectos. — respondió, ahora con un toque más brusco a la herida de su amigo

— ¡AAaU!

— Nosotros creemos que es una virtud, digo, no cualquiera habla sin miedo. — Shelly acarició el craneo del bajo, Poco se limitó a poner la misma cara entremezcla de tristeza y seriedad que tenía hace momentos, sin antes, mirar fijamente los ojos de la morada por unos segundos.

Shelly entendio todo, lo sujetó del mentón firmemente y lo obligó a mirarla de nuevo.

— ¿Que mierda te esta pasando? — se quejó entre dientes, sus ojos se achinaron por completo y su agarre se hizo más fuerte, más que una intimidación, es ayuda, puesto a que el vaquero necesita sentir presión cuando se trata de expresarse sinceramente, este suspiró, sin dejar de mirar a la mujer. Colt solo observaba al par con la escena normalizada

— Antes de que nos enborracharamos, escuche una conversación, ¡No quiero que piensen que soy metiche! pero en resumen, la persona busca venganza. — la bandida arqueó una ceja, confusa, dejó de lastimar al vaquero

—¿Y a nosotros que? ¡Poco! ¡Pensé que te habían hecho algo allí! ¡O que el castigo que nos dieron fue más fuerte en ti!

— ¡No! ¡No termina ahí! La jefa quiere nuevos miembros, ya sabes, para ampliar nuestras estrategias, sería beneficioso incluirlo, ¡Dijo que era un buen sepultero y que quería venganza a un bando enemigo! ¡Podriamos ganar! — Poco respiraba agitado, Colt y Shelly compartieron miradas por leves segundos

— ¿Y si el enemigo somos nosotros? ¿Que te asegura que este diciendo la verdad? ¡Nos atraparán, o peor aún, moriremos! — respondió Shelly

— Lo podríamos investigar, necesitamos gente, Shelly, ya nos va ganando el Bazar de Tara con su tecnología. — Colt se unió al debate, la mujer quedó callada, el ambiente se silenció y los tres se estaban viendo, Colt sin expresión alguna, Shelly con el ceño fruncido y Poco descontento con las pupilas fijas en el suelo

Un gato caminando a dos patas se haría presente, interviniendo en el momento incomodo del trío de amigos, rápidamente se lanzó a los brazos de su ama, lamiéndole la cara como si de una paleta se tratase.

Shelly dejó que su gato se acurrucara en ella. — Esto ya a sucedido antes, desconfíe y resultó que la persona que iba a estar trabajando con nosotros era un traidor, pero, ustedes tienen razón en que debemos tener más personas a nuestro favor. — la pata de Kit acarició la mejilla de la bandida — Bueno, todos estamos de acuerdo en conseguir nuevos miembros, hay que atraer a ese sepultero.

— Me ruge todo. — dijo Kit masajeando su vientre

— Si, te daré de comer, panzón.

La humana y el felino salieron del cuarto,  Colt de sus bolsillos sacó un trapo y se la entregó a Poco.

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⏰ Última actualización: Feb 10 ⏰

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Una Melodía Sangrienta | Mortis x PocoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora