Gorgeous Boy ~ Felipe Otaño ~

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Al día siguiente el día estuvo aburrido aunque un día antes tu padre había invitado a los chicos a un asado como despedida y agradecimiento por haber dado todo por esta película que era obvio que daría frutos, o eso esperaban, te habías metido a la pileta antes de que oscureciera tus padres habían salido con Mary y los niños, tú querías un rato de paz asi que te quedaste, escuchaste el timbre sonar así que pensaste que eran ellos, saliste de la piscina y fuiste directo a abrir la puerta al abrirla no había nadie eso se te había hecho raro.

- Sorpresa .- gritaste por tal susto que te habían dado todos

- hubieras visto tu cara .- dijo Juani y tu lo golpeaste en el hombro

- que pelotudos que son todos.- dijiste y los hiciste pasar

- y Carlitos? .- pregunto Enzo mientras te veía de arriba a abajo, Felipe se puso al frente tuyo tapandote

- Oh, salió con mi hermana, mi madre y mis sobrinos, estoy sola .- dijiste agarrando una toalla que estaba colgada en una silla y te la enrrollaste por tu cuerpo 

- Nos dejas meternos a la pileta? .- pregunto Francisco y tu asentiste

- el último es fan de Yao Cabrera .- dijo Juani

- Quien mierda será ese .- te quitaste la toalla y corriste para lanzarte antes que los demás te alcanzarán

Y si el último fue Enzo que se demoro en quitarse la playera y zapatos, todos rieron al verlo tirarse último.

- Y como a que hora llega Carlitos? .- pregunto Esteban

- No lo sé la verdad pero de seguro llega en un momento .- respondiste

- Y vos porque te quedaste? .- pregunto Felipe

- Quería un poco de paz para relajarme  la universidad me va a tragar viva .- los chicos rieron

- Hubiera sido mejor si decidias ser modelo, te hubiera quedado bien, tenes un buen cuerpo y eres bonita de seguro te aceptaban.-  dijo Enzo

- La cosa es que soy baja de estatura además que me gusta el derecho solo que últimamente a sido un poco pesado pero ya pasara, no creo cambiar derecho por otra cosa eso es lo que me apasiona desde peque .- dijiste y este asintió

- Aunque no te vendría mal algo aparte de eso .- dijo Blas, él era modelo así que sabía lo que decía

- No niego que por un momento no haya pensado en el modelaje pero siento que no soy muy fotogenica y no tengo esa esencia que tienen los demás modelos.- explicaste

- Aja, dile eso a las 500 fotos que tiene Pipe de ti en su galería en la que apareces como una diosa y nisiquiera estas posando .- todos rieron ante el comentario de Juani

- Posta? Tenes fotos mías? .- preguntaste

- Como no iba a tener fotos tuya si eres tan hermosa y en cualquier momento te vez hermosa .- este te dio un beso corto en los labios y tu sonreíste abrazándolo

- Bueno no lo sé tendría que entrar a clases de modelaje porque ni caminar se, parezco coja caminando .- todos rieron

Siguieron hablando, bromeando y jugando hasta que escucharan la puerta abrirse, era tú padre y los demás.

Los chicos salieron a saludarlo aunque estaban mojados, tú solo saludaste a lo lejos y saliste para ayudar a Santiago a meterse a la piscina, este estaba en la piscina chiquita jugando con sus juguetes.

- revancha? .- pregunto Matias con rivalidad en los ojos

- Porque no, igual te ganaré.- aseguraste y Felioe te ayudo a subirte a sus hombros

Ambos pelearon como si su vida dependiera de eso y al final si ganaron, Felipe se tiro para atrás tirandolos a ambos, tú trataste algo de agua pero no era fuera de lo normal,cuando saliste del agua lo golpeaste en el hombro y ambos se besaron.

- Definitivamente son la mejor dupla .- Dijo Esteban

- Crecen tan rápido.- Juani se seco una lagrima falsa

- Demasiado rápido.- imito su acción Francisco

El día se paso rápido tu padre les invito cena al día siguiente todos se irían ya que ya habían terminado las grabaciones algo muy melancólico, se veía que los chicos realmente se habían vuelto como una familia.

- Hago este brindis por la sociedad de la nieve y por todo lo que lograra esta gran película.- Dijo tu padre y todos brindaron para tomar un sorbo de vino.

La noche se pasó rápido entre juegos y demás cosas pero lo más importante fue el tiempo que habías pasado junto con Felioe ese chico te tenía locamente enamorada y no solo tú ,él también lo estaba de ti, ambos se miraban de una forma única, sabias que querías tu vida con él y que esta vez no te habías equivocado.

Los chicos tuvieron que irse pero Felipe se quedó ya que quería tener su última noche contigo no quería desaprovechar ningún momento contigo.

Tu te pusiste la pijama en el baño mientras que él en tu habitacion, lavaste tus dientes antes de salir este traía un short y estaba sin playera( una lagrima resbaló por tu pierna JAJAJA).

- Porque siempre te vez hermosa .- dijo agarrandote de la cintura

- No lo sé, tal vez viene de la familia .- bromeaste y este río

- Solamente lo eres, que agradecido estoy de conocer a la chica más hermosa y poder decir que es mi novia.- te dio un beso corto

- Y yo también las chicas me envidiaran cuando sepan que mi novio es Felipe Otaño el que interpreto a mi padre y tal vez el chico más deseado por las fans .- le devolviste el beso corto y se besaron nuevamente pero este beso era más largo, él bajaba sus manos por tu cintura hasta tu cadera casi llegando a tus glúteos, mienttas tu entrelazadas tus brazos en su cuello.

Este te apegaba más a él, te acosto encima de él sin dejar de besarte, ese beso había sido uno de los más largos que habían tenido, este tenía dulzura y deseo, no era agresivo cosa que te gustaba, este agarro uno de tus glúteos y lo apretó cusndo se separaron del beso por aire.

- que idiota que sos .- lo golpeaste en el hombro y te acostaste encima de él dejando tu cara en su pecho

- No puedes negar que no te gustó .- tu solo rodaste los ojos y te mantuviese callada mientras ambos se miraban

- No lo negare pero tampoco diré que me gustó.- dijiste haciendote la indignada pero por dentro estabas muriendo por como había ido la cosa.

La noche no había llegado a más que besos, al final ambos durmieron abrazados, no querían estar sin el otro pero tenían que separarse ya que él tenía que estar con su familia y tu con la tuya, eso los entristecia a ambos, pero sabían que no podían desconfiar del otro ni que sería la última vez que se verían.