try hard | kv

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La clase es aburrida, pero no es que Jeongguk lo vaya a admitir en voz alta. Ha aprendido a amar la satisfacción de hacer su trabajo y recibir elogios, obtener las mejores calificaciones y simplemente hacer todo lo que puede, porque quiere demostrar su valía. Por otro lado, odia las aulas. Demasiada gente, mucho ruido, y nada interesante.

La clase de inglés es una de esas que desearía haber abandonado, pero Dios sabe que sus padres le iban cortar la cabeza si lo hacía. Sentarse a escuchar conferencias que no le interesaban era un sacrificio que tenía que hacer, y que la mayoría de sus amigos estén en la misma clase es lo único que lo hace mucho más llevadero.

Bueno, a veces.

"Oye, Jeon", le llama Ahn Heeyeon, líder del equipo de animadoras, vicepresidente del consejo y encarnación humana de la perfección. Se deja caer en la silla al lado de Jeongguk, pasa un brazo alrededor de sus hombros y sonríe con picardía. "Escuché que hablaste con Tae antes, ¿no?"

Y aunque sus peculiaridades y tendencias son similares a las de Jeongguk, tienen un (des) interés en común: Kim Taehyung. Ella es buena amiga de él (o, bueno, su novia lo es), por lo que le gusta sacar a relucir sus argumentos para burlarse.

"Lo dices como si se hubieran besado en el medio del campus", dice Seokmin, sentado frente a Jeongguk con los brazos cruzados y apoyado contra la pared, conteniendo la risa ante la mirada que su amigo le daría. "Es realmente sorprendente que no haya sucedido todavía."

"Ugh, ni siquiera metas esa idea en mi cabeza, por favor", pide Jeongguk, haciendo una expresión de disgusto. Heeyeon pone los ojos en blanco, pellizcando su hombro y haciéndolo gritar. "No mientas, no me importa si ustedes dos son enemigos o lo que sea, no puedes negar la belleza de Taehyung", dice, casi regañándolo.

Jeongguk se lame el costado de la mejilla, con las cejas juntas. Es decir, claro, Kim Taehyung es el ser humano más hermoso que existe, sea lo que sea, eso no quitaba su mala actitud. Aunque Jeongguk negaría hasta la tumba que a veces lo mira fijamente durante las discusiones y ni siquiera escucha los insultos. Sucedió una o dos veces (o más de diez, pero él nunca lo admitiría).

"Es cierto." Minghao (otro amigo de Jeongguk, una abominación a la que le gusta burlarse de él sin cesar) está de acuerdo con Heeyeon, con una expresión pensativa en su rostro. "Es uno de esos tipos a los que simplemente le echas un vistazo y dices: 'guau, me encantaría sacarle los sesos', ¿sabes?"

Incluso si Jeongguk hace una expresión mortificada por hablar de esto tan a la ligera, Heeyeon simplemente asiente con la cabeza. "Dios sabe que eso es cierto", dice de todo corazón. "Ojalá me lo hubiera follado al menos una vez antes de convertirme en exclusiva."

Jeongguk farfulla, se gira para mirarla con una mirada desconcertada y hace que su brazo se deslice de sus hombros. "¿Tú qué?" Dice, las formalidades tiradas por la ventana, porque hasta donde él sabe, ella es tan gay como los siete colores de la bandera.

Heeyeon frunce el ceño con confusión, más por el movimiento repentino que por la pregunta real. "Cómo me escuchaste. Ojalá lo hubiera metido en la cama al menos una vez, podría haberlo inclinado y follado con el arnés más grande que tengo, probablemente se vería muy lindo con una gran polla. O al menos eso es lo que he oído que le gusta", dice encogiéndose de hombros, indiferente hasta la médula. Ella procede a suspirar con deseo. "Hyojin Unnie nunca me deja tomar el control, hubiera sido un buen cambio."

"Estas compartiendo demasiado tu vida sexual otra vez, Noona", le recuerda Seoknim con fingido disgusto, pero le divierte más la reacción de Jeongguk a sus palabras, un sonrojo desde la punta de las orejas hasta la parte superior de los pómulos. Un contraste con su cabello negro azabache.

Eso es lo que le gusta, le resuena. Jeongguk traga saliva, sin querer permitirse el pensamiento porque también escuchó rumores al respecto. No es como si pudiera evitarlos, ¿vale? Algunos dicen que Taehyung es en realidad un jodido sumiso en el dormitorio (lo que fue una sorpresa para Jeongguk porque tiene una personalidad dominante, pero no es como si alguna vez hubiera imaginado a Taehyung como un sumiso, de ninguna manera) y algunos lo llaman un 'príncipe de la almohada'.

Príncipe de la almohada. Porque se agarra y llora sobre las almohadas mientras lo arrojan a la cama. También es poco realista (y definitivamente no excitante) de la imagen que Jeongguk tiene de Taehyung. Lo que significa que el último rumor sobre él, el de que Kim Taehyung es en realidad un bebé, probablemente tampoco sea cierto.

Jeongguk se muerde el labio mientras piensa en ello, el parloteo de sus amigos se queda mudo en sus oídos. Sí a Taehyung realmente le gustan las pollas grandes como dicen, realmente sería una bofetada en la cara (y no en el sentido sexual, por supuesto que no) para él que Jeongguk tuviera justo lo que desea. Aunque no es información útil cuando no puede usarla en su contra.

"Hola, ¿tierra a Jeon?" Minghao finalmente llama y Jeongguk sale de sus pensamientos, mirando a todos con una mirada de confusión. Seokmin inclina la cabeza, encontrando extraño que se haya distraído de esa manera. "Simplemente dijimos que deberías echar un polvo y ni siquiera pestañeaste", señala.

Jeongguk se toma un minuto para procesar esas palabras, ante lo cual exteriormente gime. "Vamos, el semestre acaba de comenzar, no tengo tiempo para perder", dice, esperando que abandonen este tema. Se ha mencionado antes, demasiadas veces.

"Gguk, todo el mundo está empezando a pensar que vives con ese maldito uniforme. Es como si no tuvieras otra ropa, porque no te molestas en socializar fuera de la escuela y no asistes a una sola fiesta", señala Minghao y Jeongguk se estremece porque eso es cierto (no puede negarlo, incluso), pero no es que sienta que se lo está perdiendo.

Siempre está en la escuela o en los dormitorios y él tiene mucho trabajo que hacer. Las fiestas no son su escenario, como dijo Taehyung. "No importa lo que piensen, estoy ocupado", dice Jeongguk, ganándose un suspiro colectivo de exasperación por parte de sus amigos.

Ni siquiera es que esté ocupado o que no le guste el sexo (hay ciertas ocasiones en las que simplemente necesita sexo, oh, Dios mío), sino que prefería no tomarse la molestia de encontrar a alguien que no sólo esté bien con su tamaño, pero que tampoco difunda ni una palabra al respecto en el campus. Es por eso que solo se juntaba con una o dos personas de la universidad; el resto sucedía en baños sórdidos de bares al azar.

"¿Yejun no te coqueteó recientemente?" Pregunta de repente Heeyeon, recordando cierto evento frente al edificio de artes.

Jeongguk vuelve a tocar su mejilla con la lengua y luego asiente sin vacilación. "Sí, claramente está, un... interesado en mí", murmura, avergonzado por las palabras que usó.

Minghao piensa en eso y comparte una mirada de Seokmin. "Quiero decir, todos sabemos que el tipo es un gran chismoso y todo eso, pero escuché que es una maravilla en la cama. Se lo toma muy bien cuando está debajo", finalmente dice, un estímulo que Jeongguk no esperaba ni necesitaba.

Chisme. Como si necesitara uno de esos, piensa Jeongguk. "Como dije, estoy ocupado", les recuerda además. "No tengo muchas ganas de nada de eso en este momento."

Seokmin pone los ojos en blanco, justo cuando suena la campana de la escuela. "En serio, Gguk, la única tensión que tienes es la de tus discusiones con Taehyung. Y él nunca se acalora durante ellos porque, a diferencia de ti, tiene algo de acción para calmarse", dice, un minuto antes de que su profesor entre al salón de clases.

Jeongguk se muerde la lengua, negándose a responder eso. ¿Solo tengo tensión con Kim? Sí, claro, piensa distraídamente.