"Porque se nos dio, quizás siempre fue y el cuerpo lo pide, si nadie nos frenó, los dos 'tamos free y el cora' decide".
En uno de sus viajes para ir a cantar a una disco sureña durante el verano, se encuentra post-presentación con aquel chico moreno...
"Porque se nos dio, quizás siempre fue y el cuerpo lo pide, si nadie nos frenó, los dos 'tamos free y el cora decide..."
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- "Nunca má' confío en ti, Afita", dijo en voz baja el Nicko, acomodando bien su cabeza en la almohada, pero tomando una postura aún no del todo acostada.
- "¿Y por qué?", dijo Alfa con voz agotada.
- "Me dijiste que me ibai a darme un tobesi al llegar acá, y me he portao' un siete, no, un die con usté', ¿siono'?", comenzó a mencionar Nicko mientras se incorporaba para acercarse al muchacho moreno y así abrazarlo, acomodando su cabeza en el cuello de éste para volver a oler aquel aroma que había sido de su agrado mientras iban camino al hotel, apegando su cuerpo al suyo y pasando su brazo derecho por encima el cuerpo del otro, lo que hizo que Alfa lograra sentir la parte inferior del Nicko en sus glúteos cubiertos aún con su bóxer, "estaré aún algo curao' o drogao'...pero no se me iba a olvidarme esa promesa"
Aquella atmósfera de intimidad que se había estado desarrollando lentamente desde que ambos artistas llegaron a la habitación del hotel, pasando por los comentarios poco sutiles del chico de tez clara, se había sentado hasta ese nivel de cercanía en el que ambos se hallaban, con sus corazones bombeando fuertemente en sus respectivos pechos una vez que Steven se giró para mirarse fijamente a los ojos.
- "Si usé hasta el Listerine ese que teniai en e-", había seguido reclamando Nicko, pero al ver nuevamente el rostro del Alfa a centímetros del suyo, y con un estado de consciencia mayor gracias a la ducha que éste le había dado, sintió cómo su cuerpo reaccionaba ahora a la cercanía de ese otro ente de piel más oscura, colocando sus mejillas ligeramente más rojas y con una erección más que evidente entremedio de sus piernas.
- "Oe' que insistente el Nicko...", interrumpió Steven manteniendo el mismo tono de voz de agotamiento, pero que iba acompañado con una ligera sonrisa que le hizo entender que la tonalidad con la que estaba emitiendo aquel juicio era de broma, "...pero ya, si te había igual promet-"
Sin poder finalizar su frase, el aludido acercó sin perder el tiempo su rostro al del otro muchacho con quien estaba compartiendo pieza y, apoyando su mano derecha en la mejilla del Alfa, posó con suavidad sus labios con los de él, el cual, sintiendo que el corazón en cualquier minuto saldría de su cuerpo, tomó también protagonismo, guiando su brazo hacia el cuerpo del Nicko y apretándolo contra el suyo, generando así un sensual choque de sus entrepiernas aún cubiertas por la ropa íntima que llevaban aún puesta.
Al momento de sentir la lengua del menor ingresar a su cavidad oral para así juguetear con la suya e iniciar una pelea por la dominancia del beso, Nicko brevemente recordó su reacción al sentir, por esa única vez, los labios de Steven posándose de forma fugaz en los suyos tras haberlo llevado a su casa hacía ya tiempo atrás, y al ahora sentir cómo esas cálidas manos recorrían su espalda y cintura, no podía dejar de mentirse a sí mismo: llevaba mucho tiempo esperando este momento, y no iba a desperdiciar ni un segundo.
