- Liguria Italy -

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30 de noviembre,
Liguria Italia📍.

Noa Bianchi.

— Pasajeros, favor colocarse los cinturones de seguridad, aterrizaremos en dos minutos. —habló la azafata por el altavoz.

Habían pasado tres horas y media desde que me subí al avión, ya eran las 10:30A.M. el vuelo había sido tranquilo, me llevaron a primera clase donde casi no había ni una persona, solo éramos una pareja de ancianos, una señora con dos niñas y yo.

Me abroche el cinturón y me acomode bien en el asiento esperando a aterrizar.

De seguro mamá y papá estaban por salir de la casa, escuché que su vuelo era a las once. Ni siquiera me despedí de ellos, y ni siquiera vi a Melanie.

— ¿Disculpe? —me habló una voz suave y voltee a ver, era una de las niñas que estaba con la señora, tenía el cabello castaño y ojos color miel, era muy bonita.

— ¿Si pequeña? —pregunté deseando saber que había pasado.

— ¿Me puedo sentar con usted hacia la ventana? —preguntó y yo le sonreí, era una niña muy tierna.

— Claro que si, solo ven antes de que te caigas por el aterrizaje. —hablé mientras la ayudaba a sentarse alado mío y le colocaba el cinturón.

— Muchas gracias señorita...

— Noa. —dije al notar que no sabia mi nombre.

— Gracias señorita Noa, es muy hermosa. —dijo rápidamente lo último y yo reí.

— Tu también eres muy bonita...

— Sophie. —habló al ver que yo tampoco sabía su nombre.

— Lindo nombre.

— El tuyo también es muy bonito. —dijo ella con una sonrisa tierna.

— Te lo agradezco. —le sonreí mientras dirigía mi vista hacia el frente.

— ¿Cuantos años tienes? —pregunto curiosa.

— Tengo catorce años, ¿y tu? —pregunte curiosa.

— Nueve. —habló y yo asenti. — ¿No eres muy joven para viajar sola? —pregunto confundida.

— Cuando eres alguien como yo, te acostumbras a hacer las cosas solas. —dije con una mueca.

Si eres como yo, entenderás a que estar sola te ayuda a sobrevivir.

¿Y tus padres? —pregunto esta vez mirándome.

— Están en un viaje de negocios. —respondí elevando mis hombros.

— Ah, entiendo. —dijo con una sonrisa un poco triste.

— ¿Tus padres también trabajan mucho? —pregunte esperando una respuesta.

— Papá si, mamá se queda a cuidarnos. —respondió y yo asenti. — Pero es muy raro. —dijo y la volví a mirar.

LOVE ON WHEELS. - Charles Leclerc and Max Verstappen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora