040. inferius

10.5K 1K 37
                                    

CAPÍTULO CUARENTA«Inferius»

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO CUARENTA
«Inferius»

La mañana en el Gran Comedor de Hogwarts estaba cargada de una tensión inusual

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.






























La mañana en el Gran Comedor de Hogwarts estaba cargada de una tensión inusual. El profesor Snape, con su habitual semblante severo, se disponía a entregar los horarios a los alumnos de Slytherin. Este año, la tarea era más compleja de lo normal, ya que requería verificar que cada estudiante hubiera alcanzado las calificaciones necesarias en los TIMOs para continuar con los ÉXTASIS elegidos.

Además, se sumaba el cambio en la prefectura. Madelyn y Draco, ahora inmersos en sus deberes como mortífagos, habían cedido sus puestos a Blaise y Pansy, quienes asumirían la responsabilidad de mantener el orden en la casa.

Cuando finalmente los horarios llegaron a sus manos, Madelyn sintió un alivio mezclado con entusiasmo al descubrir que su primera clase sería Defensa Contra las Artes Oscuras. Una sonrisa iluminó su rostro.

—¡Genial! Defensa Contra las Artes Oscuras —exclamó Madelyn con una sonrisa de satisfacción—. Las clases serán mucho más interesantes con Severus al mando.

—Tienes toda la razón, amore mio. —respondió Theodore, compartiendo su entusiasmo.

—No entiendo por qué Dumbledore tardó tanto en darle ese puesto —comentó Blaise, con un atisbo de curiosidad—. Severus ha deseado este puesto durante años. ¿Por qué se lo concedería hasta ahora?

—Ese viejo solo contrataba profesores ineptos para esa asignatura, y ustedes lo saben. —intervino Theodore, frunciendo el ceño con disgusto.

—No todos, Theo —replicó Madelyn con calma—. Mi padrino Remus fue un excelente profesor, aunque su condición se lo impidió.

—Sí, era un hombre lobo que podría habernos matado en cualquier momento. —soltó Theodore sin pensar, provocando un silencio incómodo. Madelyn abrió los labios, sorprendida e indignada.

—¿Qué acabas de decir, Theodore? —preguntó Madelyn, con el ceño fruncido y la voz cargada de molestia. Theodore, al darse cuenta de la gravedad de sus palabras, se arrepintió al instante.

HOUSE OF BLACKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora