Capitulo 121

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Entrecerró los ojos hacia el jardín sin vida. En el macizo de flores, la nieve que había caído con poca frecuencia durante varios días se había congelado y brillaba como un diamante, y las ramas secas temblaban lastimosamente con el susurro del viento.

Rápidamente cruzó el desolado paisaje con Yoongi. Al pasar por un jardín vacío y por una puerta, escuchó el sonido agudo del golpe de la espada, el sonido de los cascos de los caballos y el fuerte cántico.

"Tendremos que esperar un poco".
Yoongi, parado en la entrada del centro de entrenamiento, murmuró, chasqueando su lengua.

Jimin extendió la cabeza y miró hacia abajo.

Dentro del enorme campo de entrenamiento de la sala del estadio, cientos de caballeros se sentaron en sus caballos y se pararon uno frente al otro en ocho largas filas. Todos iban vestidos con una armadura de metal de cuerpo entero y tenían una lanza más larga que la altura de las manos.

Jimin contuvo el aliento sin darse cuenta de que era el escenario de la tensión. Cuando el caballero que estaba en medio de ellos levantó la bandera roja en alto, los caballeros gritaron y corrieron uno hacia el otro.

Jimin gritó y se tapó los ojos con ambas manos. Los fuertes sonidos de los golpes de metal, los gritos de los caballos y los estruendosos gritos resonaron durante mucho tiempo. Fue un entrenamiento tan feroz que una leve vibración atravesó el piso de piedra subyacente.

"Es violento hoy".
Yoongi susurró suavemente.

Finalmente, cuando el área circundante se volvió silenciosa, Jimin abrió lentamente los ojos. Los caballeros, de nuevo en fila, bajaron de sus caballos uno a uno y se estaban quitando los cascos.

Yoongi tiró de su brazo.

"Ahora bajemos. No creo que haya mucha gente".

Este mismo bajó las escaleras, avergonzado. Uno de los caballeros que estaba organizando las lanzas y los cascos pareció sospechoso
cuando los vio.

"Mago Yoongi, ¿qué estás haciendo aquí en el campo de entrenamiento?

"Estoy aquí para ver si alguien se lastimó durante el entrenamiento".

"¿Que pasa con eso? ¿No me dijiste que no te llamara a menos que fuera una herida paralizante?
Hebaron, que se quitó el casco y lo tiró al azar al suelo, diciendo esto en voz alta y con sarcasmo. Su rostro parecía más aspero de lo habitual, tal vez porque todavía estaba acalorado. Bajo la vívida presión del caballero, Jimin se coló detrás del mago. Sin embargo, este lo apartó implacablemente al frente de los caballeros.

"Por supuesto, no me ofrecería voluntario para hacer eso. El doncel Jeon te tratará.

Solo entonces los caballeros abrieron mucho los ojos, dándose cuenta de que era el espiso del señor el que estaba parado detrás de él con una túnica.

Jimin dió una sonrisa incómoda a sus ojos temblorosos. Recientemente, pensó que casi lo habia superado, pero las yemas de sus dedos temblaban por la tensión mientras se paraba frente a hombres grandes y armados. Le tiró de la manga a Rob, la escondió rápidamente y le cortó la boca con dificultad.

"No soy lo suficientemente bueno, pero no puedo tratar de curarte tus heridas."

Los caballeros intercambiaron miradas con rostros avergonzados ante el murmullo. Después de un largo e incómodo silencio, Elliot Caron, que estaba al frente, salió.

"Gracias Mi Señor, pero podemos tratar las heridas simples por nuestra cuenta. No tienes que preocuparte".

Un caballero conocido se negó con tanta firmeza. Cuando no pudo responder, Yoongi intervino.

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