📍- 03 de septiembre- Hogwarts
Segundo día de castigo, yupi. Me faltaban dos días contando este para salir de eso, el ambiente en esa sala era raro, sobretodo por el, el chico del tren.
Cuando iba a entrar a la enfermeria el estaba sentado en la camilla mirando el techo con una sonrisa.
-Madame misteriosa me vino a ver de nuevo? O es para agradecerle a este lindo caballero por la fruta?
Rote los ojos con una pequeña sonrisa, deje mi abrigo y mi bolso en mi silla pero fui directo a sentarme junto a él.
- ¿Qué te pasó Berkshire? ¿Por qué estas aquí?
Vi como alzó las cejas y su sonrisa se hizo más grande
- Parece que si hice bien en mandarte esa canasta, ¡no me llamaste "chico del tren"!
Solte una pequeña risa y mire para otro lado.
- y para responder a tu pregunta, me caí del techo y tengo el brazo torcido ¿y tú? ¿Por qué vienes aquí todos los días?
- Snape me cas- espera ¿¡Del techo?!
Abrí mis ojos como platos porque el lo dijo con tanta tranquilidad que pareciera nada, frunci el ceño confundida esperando una respuesta más clara que eso, pero solo recibí una risa por parte de el.
- Dios deberías haber visto tu cara.
Le di un pequeño golpe en el brazo y luego me levante, o bueno intente. El volvió a tomar mi mano dejándome sentada de nuevo en la silla.
- ¿Como te castigaron? Otra vez por una flor?
Solte una risa y asentí, ¿tan predecible era? Las flores me llevan siempre a los castigos o expluciones, así que era mejor alejarme de ellas por un tiempo
- Bueno mádame misteriosa, tienes que aguantarme por un dia más y buen-.
Lo frene, sabia mi nombre y seguí llamándome así, lo lo juzgo yo lo llamaba chico del tren ayer, estábamos a mano después de todo.
- Podes decirme Kenzie.
Abrió los ojos con sorpresa y escondio su cara con la sabana, era una situación extraña y algo tierna ante mis ojos, cada vez me recordaba más a alguien, pero no sabia a quien o a quienes. Tendría que pasar por la oficina de la psicóloga después para saber o aclarar mis ideas sobre el.
- No quiero decirte Kenzie,es uno de los apodos más básicos para tu nombre, prefiero decirte...
Seguía escondido ahí, me levante de la silla y fui a servirme un café y a buscar mis audífonos para empezar a trabajar, pero cuando oí su voz me quede tiesa.
- Prefiero decirte Mackie.
Los recuerdos empezaban a salir y pasear por mi mente mientras tenía la taza en la mano y mi mirada perdida en el café, era un apodo poco común pero muy dicho en mi familia para decirme a mi.
- ¿Todo bien Mackie?
Me acerque a él y apoye mis manos en sus hombros mirándolo sería y sin una sonrisa aparente. Pero al tenerlo cerca sonreí un poco.
- Amo ese apodo, pero no me vuelvas a llamar así, ese apodo es exclusivo para mi familia y nisiquiera dejo que alguien mas me diga asi y no dejare que lo hagan.
Sonrió sarcástico antes de pasar una de sus manos por mi pelo.
- No voy a dejar de llamarte así, Mackie.
Le di un pequeño golpe en la mano para alejarla de mi pelo, lo cual hizo que el riera más y su sonrisa se hiciera más grande, lo vi mirando todo mi rostro desde mi cabello hasta mis labios.
- tu maquillaje es más suave que cuando nos conocimos, ahora solo tienes colores café, no negro.
Le solte los hombros y volví a mi trabajo, sin antes lanzarle mi durazno a el para que el pudiera desayunar.
( . . . )
No paso nada interesante en esas tres horas de castigo, nada interesante con el al menos, porque a mi se me perdió mi anillo de serpiente, el anillo que me había regalado mi tío Regulus, no me di cuenta hasta que estaba saliendo de ahí y me miré la mano, aunque no le di mucha importancia ya que solo iba saliendo de ese lugar, ahora solo me faltaba un día para terminar mi castigo y ser libre de nuevo [Aunque no sea por mucho]
Camine directo a la oficina de la psicóloga y entre sin tocar la puerta y me senté en el sofá que estaba ahí y miré a la mujer frente a mi, Belle, mi madrastra.
- Mackie? Que te he dicho de entrar sin tocar? Puedo estar atendiendo a alguien o no se algo parecido.
Ella estaba sirviéndose te y me preparo un café para mi, por eso quería tanto a esa chica.
- ¿Tu maquillaje ahora es más suave? Que te hizo cambiar?
No respondí eso, solo me tape la cara con las manos, ya dos personas que me decían eso, solo me maquille diferente, es todo.
- ¿Qué es el amor?
Ella sonrió y me dio el café, me volte a mirarla esperando una respuesta, ella era la única que podía saberlo, por el echo de ser psicóloga mínimo tendría una respuesta a como se interpreta el amor.
- ¿Me buscas a mi para que te de consejos?
Asentí y volví a taparme la cara con una al almohada.
- El amor o cariño se suele dividir en 5 etapas, negación, aceptación, enamoramiento, amor, y amor de verdad.
Me vi más confundida, eso no respondía a mi pregunta, pero si me llamo la atención lo de la etapa de negacion, eso era un punto importante considerando que yo niego con mi alma enamorarme alguna vez en mi vida, solo me gusta mi soledad.
- Deberías pensar mejor como te sientes para saber si es amor o no.
De verdad que era sabia ella por eso, aúnque sea indirectamente ella siempre resolvía mis problemas y aclaraba mis ideas.
La abraze, se sintió raro ya que nunca abrazo a nadie por mi propia voluntad, pero sentí el impulso de hacerlo.
- No se quien te este cambiando pero amo de verdad lo que esta haciendo contigo, Mackie.
Sonreí y salí de ahí. El no estaba haciendo nada conmigo, solo fui un poco más cariñosa que de costumbre y ahora resulta que el "amor" me esta cambiando.
Supongo que me va a llevar más tiempo descubrir que es lo que me pasa con el, porque amor estoy segura que no es.
