𝘣𝘭𝘶𝘦 － 𝘸𝑎𝑙𝑘𝑒𝑟 𝘴𝑐𝑜𝑏𝑒𝑙𝑙

8.

Faltaban menos de dos semanas para que el verano terminara por lo que la joven junto a sus amigas, planeó una salida. Nada excéntrico, simplemente irían de compras a el centro comercial y verían una película.

La castaña buscaba desesperadamente un collar que su padre le había regalado en su cumpleaños número 12, era una perla pequeña en forma de dulce.

"Ally, ¿no has visto mi collar, el de forma de dulce?"

"No, cielo." le dijo la mujer retocándose el labial. "Puedo prestarte uno si quieres."

"No, gracias... buscaba ese en especial." murmuró y regresó a su habitación.

Se miró al espejo, el vestido que le había regalado Ally recién llegó, le sentaba de maravilla. Su largo cabello estaba suelto y tenía un moño blanco en la parte de atrás.

Al salir de la casa, observó el auto de su padre, aparcado unas cuadras atrás. Frunció el ceño y su padre salió del vehículo, la miró y saludó con la mano, gesto que ella no devolvió.

Esa noche de la obra, al regresar de trabajo, no se molestó en preguntarle acerca de esta. Simplemente le dio las buenas noches y subió a su habitación.

La joven subió al auto y Ally condujo hasta el centro comercial. El camino estuvo en silencio hasta que vislumbraron a las otras dos chicas esperándola en la entrada. Se despidió de Ally y bajó del auto con media sonrisa.

Recorrieron varias tiendas, probándose vestidos y conjuntos. En la tienda de maquillaje, Diana les compró dos lipgloss a cada una. La rubí simplemente las hacía reír con sus ocurrencias y chistes que a pesar de ser malos, lograban sacarles una risa.

"Te noto extraña." soltó Diana. " No estás tan risueña."

"Estoy bien." dijo dándole un sorbo a su malteada.

"Diana tiene razón, ¿qué te pasa?" suspiró Kiomi.

"Es que, mi papá ha estado muy extraño conmigo, desde que llegamos se ha distanciado y parece no importarle." suspiró.

"Hombre tenía que ser." la rubia rodó sus ojos.

"¿Ya hablaste con él?" preguntó la pelinegra.

"Trate, al parecer para el todo está bien." suspiró, dudó en decirles sobre el collar que el había tomado hacía semanas, no quería que pensaran nada malo de su padre.

"Además, no encontré el collar que él
me regaló hace mucho..." alzó la vista y frunció las cejas.

Una mujer de pronunciados rizos rojos llevaba de la mano a una pequeña de cabello lacio y claro, ambas lucían arregladas y la peculiaridad era que la niña usaba un collar similar al que buscaba en la mañana. Era increíble parecido, por no decir, igual.

La joven se detuvo, lo que hizo que sus amigas la miraran.

"¿Estás bien?" preguntó la pelinegra.

Le tomó un momento reaccionar, simplemente asintió y siguió caminando.

Se preguntó si había sido su imaginación pero al girarse, madre e hija caminaban de la mano.

"Ya va a empezar la película, ¡vamos!" la arrastraron de la mano hasta la sala del cine.

La película duró aproximadamente dos horas que disfrutaron, riendo se y criticando aspectos de edición y actuación.

"Un día voy a estar ahí." sonrió la rubia mientras salían de la sala.

Ambas chicas le sonrieron y caminaron hasta la salida, se despidieron y la joven caminó sola hasta su casa, acortando por el parque.

Aún había algo de luz, pero las nubes se amontonaron sobre el sol, haciendo lucir el ambiente un poco más solitario.

Había viento y apresuró su caminata.

Y entonces lo observó.

Sentado en la banca del parque,usaba una playera azul marino y tenía los auriculares puestos mientras movía suavemente sus pies.

Dudo en acercarse, se veía bastante cómodo.

El joven miró en su dirección y le saludó con la mano. Lo cual fue una invitación para acercase.

"¿Qué tal?" le sonrió quitándose un auricular.

"Todo bien, ¿qué haces acá? " cuestionó sentándose a su lado.

"Nada, escuchando música y disfrutando de lo último que queda de vacaciones." suspiró y alzó los brazos para ponerlos sobre la parte de atrás de su cabeza. "¿Tú?" la miró.

"Iba hacia mi casa." suspiró. " Ya se siente algo de frío ." dijo frotándose los brazos.

"Lo sé, ambos nos estamos congelando." rió suavemente.  "¿Te gusta 1975?"  sonrió ofreciéndole un audífonos.

'Somebody else' estaba a la mitad, a punto de iniciar con el solo de guitarra.

"Mi parte favorita." susurró y comenzó a imitar la guitarra con sus manos, mientras tarareaba la melodía.

La joven solo lo miraba, no sabía cómo describir la cálida sensación en sus estómago, sintió sus mejillas ruborizarse y sonrió levemente. El la miró por un momento y siguió tarareando hasta que la canción terminó.

"Son geniales." suspiró mientras se retiraba los audífonos, gesto que ella imitó.

"Definitivamente."  le sonrió.

La brisa fresca los golpeó haciendo que ella se abrazara los brazos y se levantara.

"Mejor me voy."

El joven se levantó y asintió.

"Yo también, probablemente llueva."

"Estamos aún en verano."

"Existe la lluvia en verano." rió suavemente. "Por cierto." dijo sacando una pluma y un pedazo de papel.

"Seguro nos veremos en unas semanas pero, solo para estar seguros.
Escribió algo y se lo dio a la joven.

"Esto es muy old fashion." rió al ver el número del rubio en el papel al que su nombre le seguía una carita feliz.

"Es más cool así." sonrió. "Nos vemos." se despidió con la manos y dándose la vuelta, caminó hacia el lado contrario.

Lo miró alejarse y también se marchó, a la mitad del camino, sintió suaves gotas de lluvia acariciar su rostro.

Lluvia de verano...curioso.