-Mientras Yui seguía en compañía de su amigo Takeru, Haru por otra parte estaba en un tren de camino a casa de sus padres, lo cual ciertamente lo traía muy intranquilo-
Haru: ¿Que estará haciendo ahora?.
Haru: Espero que no intente cocinar.
Haru: ¿Le habré dejado comida suficiente?
-Mientras el tren avanzaba por el paisaje, Haru se encontraba en un vagón casi vacío, mirando por la ventana. Los campos verdes y las pequeñas casas pasaban como un borrón, pero su mente estaba en otro lugar. Estaba pensando en su familia, en las palabras duras y los rostros fríos. Se preguntaba por qué lo habían llamado ahora, después de años-
Haru: ¿Porque ahora?...(piensa)
Haru: ¿Que podrá ser?...(dice agobiado por sus propios pensamientos)
-Finalmente, el tren se detuvo en una pequeña estación. Haru bajó y tomó un taxi hasta la casa de sus padres. Al llegar, la casa parecía más pequeña de lo que recordaba, pero igual de imponente. Tomó una respiración profunda y tocó el timbre-
-Su madre abrió la puerta, parecía más vieja y cansada. Sin decir una palabra, lo invitó a entrar. Su padre estaba sentado en el salón, mirando por la ventana. Al ver a Haru, se levantó y se acercó a él-
Papá: Haruto, ¿como estás?. (Dice extendiendo la mano hacia Haru)
Haru: Estoy bien...¿y ustedes?... (Dice estrechando la mano de su padre)
-Haru se sentó en el sofá de cuero viejo y gastado, su madre le sirvió una taza de té caliente-
Madre: Haruto, hace mucho tiempo que no te vemos (dijo con una sonrisa que lucía forzada)
Haru: Sí, ha pasado un tiempo. (Respondió mirando a su alrededor)
-La casa no había cambiado mucho, pero Haru se sentía diferente, como si fuera un extraño en un lugar que una vez fue su hogar-
Padre: ¿Cómo te ha ido, Haruto? Escuchamos que trabajas para un hombre muy rico. (Dijo tratando de sonar casual)
Haru: Si, trabajo para un dueño de empresas, es un trabajo duro, pero me las arreglo. (respondió sospechando de las intenciones de sus padres)
-Después de un rato, su padre finalmente llegó al punto-
Padre: Haruto, necesitamos tu ayuda. (Dijo apartando la mirada)
-Haru se quedó en silencio por un momento, luego preguntó-
Haru: ¿Qué tipo de ayuda?
Madre: Bueno, hemos estado pasando por algunos problemas financieros... (Dijo con su voz un poco temblorosa)
Haru: ¿Y esperan que yo los ayude? (Preguntó con voz tranquila pero firme)
Padre: Sí, Haru. Necesitamos dinero. (Admitió su padre finalmente)
-Haru se quedó en silencio, procesando la información. Sabía que tenía una decisión difícil que tomar-
-Haru miró a sus padres, su rostro era una máscara de calma-
Haru: No. (Dijo simplemente)
-Sus padres parecían sorprendidos-
Madre: ¿Qué?. (Preguntó con su voz apenas un susurro)
Haru: No les daré dinero. (Repitió con su voz firme)
Haru: He trabajado duro para ganar cada centavo que tengo. No se lo daré a las personas que me abandonaron cuando más los necesitaba.
-Su padre parecía a punto de protestar, pero Haru lo interrumpió-
Haru:¿Recuerdan cuando era niño (preguntó con su voz llena de amargura)
Haru: ¿Recuerdan cómo me trataban?, ¿Cómo me hacían sentir como si fuera menos que nada? ¿Cómo me dejaron a mi suerte cuando apenas era un adulto?.
-Hubo un silencio incómodo en la habitación. Sus padres no podían mirarlo a los ojos-
Haru: Me he esforzado mucho para superar mi pasado y construir una vida para mí, Y no voy a dejar que ustedes arruinen eso. No les debo nada.
-Con eso, Haru se levantó y se dirigió hacia la puerta-
-Justo cuando Haru estaba a punto de salir por la puerta, su padre se levantó bruscamente y lo agarró del brazo-
-Haru se volvió para enfrentarlo, liberando su brazo de la mano de su padre-
Haru: No les debo nada. (Respondió mirando a su padre directamente a los ojos)
Haru: Ustedes fueron los que me abandonaron. Ustedes fueron los que me hicieron sentir como si no valiera nada. Y ahora, ¿esperan que simplemente les dé mi dinero duramente ganado?.
Haru: No, no voy a hacer eso. (Dijo con voz firme)
-Su padre parecía realmente furioso al ver qué Haru no planeaba darles dinero-
Padre: ¡Eres un ingrato! ¡Después de todo lo que hicimos por ti!. (exclamó con rabia en su voz)
Haru: ¿Todo lo que hicieron por mí? ¿Me refieres a cómo me trataron como una carga? ¿Cómo me hicieron trabajar desde que era un niño? ¿Cómo me abandonaron cuando más los necesitaba?. (replicó con su voz aumentando de volumen)
-La discusión se intensificó, las palabras duras volaban por la habitación. Pero a pesar de la ira de su padre, Haru se mantuvo firme. No iba a ser manipulado. No iba a dejar que su pasado dictara su futuro-
-Finalmente, después de una larga y tensa discusión, Haru se dio la vuelta y salió de la casa, dejando a sus padres atrás. A pesar de la confrontación, se sentía liberado. Había enfrentado a su pasado y había salido victorioso. Después de todo, había superado tantas cosas por sí mismo, ¿qué podría ser peor que eso?-
ESTÁS LEYENDO
En Bandeja de Plata
Romanceaquí se cuenta la historia de Yui una chica de 19 años, hija de un dueño de empresas multimillonarias a nivel nacional, el cual le dio la oportunidad de vivir por su cuenta, y Yui completamente cegada por la emoción aceptó sin dudar ni un segundo, p...