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El camino de regreso al refugio fue silencioso, Taehyung nunca había experimentado un silencio tan incómodo en su vida, ni siquiera en su trabajo,  podía sentir las miradas sobre su espalda, caminaba tenso y demasiado incómodo

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El camino de regreso al refugio fue silencioso, Taehyung nunca había experimentado un silencio tan incómodo en su vida, ni siquiera en su trabajo,  podía sentir las miradas sobre su espalda, caminaba tenso y demasiado incómodo. 

Jungkook estaba realmente confundido, ¿Cómo es que Tae sabía tanto? y ¿Por qué no le había dicho nada?, ¿Acaso no tenía la confianza para decirle esas cosas tan importantes?, esas y muchas más preguntas se acumulaban en su mente, solo esperaba que al llegar al refugio le contara todo, sin mentiras.

Yoongi y Hoseok se vieron entre si algo confundidos, era obvio que el castaño estaba ocultando algo, aunque la tensión entre él y el azabache era obvia, Yoongi no podía entender cómo es que el azabache tenía "algo" con el rubio.

—Estamos por llegar —Dijo Namjoon al ver la marca que había dejado en uno de los arboles, pues a pesar de la prisa por encontrar al pelinegro necesitaba una señal para volver al refugio, como militar, no se le podía escapar ningún detalle, ni siquiera uno tan importante y necesario como ese.

Unos minutos después, la luz anaranjada de la fogata llegó a sus ojos, esta no era muy visible al estar rodeada de árboles y arbustos como forma de camuflar un poco la luz, Jungkook fue el primero en cruzar  para llegar al refugio, detrás de él Namjoon, Hoseok y Yoongi quedando Taehyung como último.

Suspiró cansado y abrumado por las emociones experimentadas ese día, dándose ánimos así mismo, cruzo el arbusto, sabía lo que vería una vez que pasara el otro lado así que intentó prepararse mentalmente pero nunca estaría preparado para ver lo que cada vez lastimaba más a su corazón.

Mientras tanto, Jungkook y Jimin se abrazaban con cariño, sintiéndose cálidos en los brazos del otro, Jimin beso la mejilla de Jungkook para separarse del abrazo, ambos con una sonrisa, Taehyung solo miraba a lo lejos con el corazón lastimado, de alguna manera sabía que lo vivido con Jungkook solo lo había mal interpretado, estaba claro que el azabache nunca sintió y nunca sentiría algo por él, y no lo culpaba, realmente no lo hacía,  porque Jimin era realmente bonito, además era un doncel que había llegado a ser militar, tenía una gran personalidad, era amable y tenía una sonrisa linda, mientras él solo era un simple Médico forense, con una personalidad tímida y reservada, no era muy lindo y su sonrisa era rara, así que entendía porque nunca lo elegían.

Sin ganas de deprimirse más de lo que ya se sentía, se dio media vuelta y fue hacia el lugar en el que dormiría, el frío colándose en sus huesos, sería la primera vez que dormiría solo, que dormiría sin Jungkook, pues estaba seguro que este dormiría con Jimin entre sus brazos, como él alguna vez lo hizo...

Sin ganas de deprimirse más de lo que ya se sentía, se dio media vuelta y fue hacia el lugar en el que dormiría, el frío colándose en sus huesos, sería la primera vez que dormiría solo, que dormiría sin Jungkook, pues estaba seguro que este dormir...

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—Es tarde, llevaré a Gi-Chul a dormir —Dijo Namjoon levantándose del tronco en el que estaba sentado, los chicos asintieron dando las buenas noches viendo como el castaño se iba al lugar dónde dormiría con su pequeño hijo.

Yoongi y Hoseok se despidieron de igual manera, dejando a la pareja solos, Jungkook buscó con la mirada a Taehyung, se había ido sin despedirse, su pecho volvió a apretarse por tercera vez en la noche, sintiendo la culpabilidad de no haberle dado las buenas noches a su lindo pelinegro, sin imaginar lo destrozado que Taehyung se había estado sintiendo las últimas horas.

—Creo que es hora de dormir —La voz delicada de Jimin lo sacó de sus pensamientos, lo miro asintiendo, regalándole una de esas sonrisitas de conejo que solo le había dado a una persona, hasta ese momento.

—Vamos —Tomo la mano del rubio dirigiéndose hacia las mantas en las que dormirían, ambos chicos se acostaron uno a lado del otro, compartiendo algo de calidez entre sus cuerpos en esa noche tan fría, Jimin abrazó a Jungkook recargando su cabeza sobre el pecho del pelinegro, mientras Jungkook se debatía internamente si abrazarlo por la cintura, pues en su interior, su corazón le decía que no era correcto hacerlo, decidió escucharlo y puso su mano sobre el brazo del rubio, el olor de Jimin llego a su olfato y lo comparó, lo comparó con aquel olor que había estado oliendo por varias noches, por aquel olor que lo hacía sentir seguro, como si todo fuera correcto, como si estuviera en casa, aquel olor perteneciente a la persona que dormía del otro lado de la fogata, con quien había compartido noches cálidas y conversaciones profundas y muy seguramente moría de frio, pues aunque nadie lo supiera, ni siquiera el mismo Jungkook, este sabía todo sobre Taehyung.

—Descansa Kookie —Dijo Jimin dejándose llevar por los brazos de Morfeo.

Jungkook miro el cielo oscuro, siendo iluminado por las estrellas y la gran luna, armando un paisaje hermoso, digno de admirar "Mi parte favorita del día es cuando oscurece, siempre me ha gustado la noche, los atardeceres son lindos, pero no hay como la calma de ver la luna, tan hermosa, llena de luz, sin ningún ruido, la tranquilidad se puede respirar, tal vez soy raro", el recuerdo de aquella noche se coló en su mente, la mirada y la sonrisa de Taehyung es algo que jamás olvidaría, sonrió ante el recuerdo, como algo valioso guardado en su corazón, es una de las tantas noches que había pasado con el pelinegro que nunca podría olvidar, esperaba que aquella sonrisa hermosa, que sin saberlo tanto amaba, nunca desapareciera.

Lástima que Jungkook no supiera en ese momento que el seria el causante de que esas sonrisas y esas miradas de amor desaparecieran cada día, con cada acción lastimando el frágil corazón de aquel pelinegro ilusionado con algo que estaba en su mente.

Esa noche fue la más fría para el corazón de Taehyung y la última noche cálida para el corazón de Jungkook, ninguno sabía lo que el futuro o el destino tenía para ellos, pero estaba claro que tenían un largo camino por recorrer para poder alcanzar su verdadera felicidad, y no solo ellos... 

Lo voy a decir, quiero llorar, me dolió mucho este capítulo y me dolerán los que vienen, me tarde mil años ¿verdad?, lo lamento ya saben como es la escuela

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Lo voy a decir, quiero llorar, me dolió mucho este capítulo y me dolerán los que vienen, me tarde mil años ¿verdad?, lo lamento ya saben como es la escuela.

Quería reflejar que no importa la edad que tengamos, todos tenemos inseguridades, incluso el mismo Jimin, no odien a nadie, todos son un amor, ya lo verán.

Espero que les haya gustado el capítulo, estaré revisando las faltas de ortografía, por cierto, cambie mi nombre de usuario, los cambios siempre son buenos.

Sin más, no olviden su estrellita, me ayudan mucho, nos vemos pronto, cuídense mucho y cúbranse bien, ya empieza a hacer frío. 

𝐀𝐧𝐭𝐢𝐫𝐫𝐞𝐬𝐮𝐫𝐫𝐞𝐜𝐜𝐢ó𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora