"Cuando estoy contigo no le tengo miedo a nada"
Una historia en la que Hyunjin le enseña a Jeongin a ser él mismo
Una historia en la que Hyunjin le enseña a Jeongin a ser valiente
Una historia en la que Hyunjin le enseña a Jeongin el significado de...
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Eran alrededor de las 10:30 de la noche cuando Jeongin había llegado al departamento de Hyunjin para hablar de "algunas cosas"
- ¿De qué quieres hablar? - preguntó Jeongin intrigado - por algo me escribiste a estas horas de la noche
- De muchas cosas, supongo - contestó Hyunjin dudoso - o tal vez de una cosa que contiene subtemas
- ¿"Subtemas"? - Jeongin rió levemente - Está bien, soy todo oídos - dijo para sentarse en el sofá junto a Hyunjin
- ¿Recuerdas lo que me llevaba inquietando desde hace un tiempo? - preguntó Hyunjin, a lo que Jeongin asintió - Ya resolví mi duda, o tal vez en parte
- ¿A qué te refieres? - preguntó Jeongin confundido
- Lo que me traía estresado era lo raro que se me hacía la repentina llegada de Minho - empezó a explicar
- ¿El esposo de Jisung? - preguntó Jeongin
- Ese mismo - afirmó - siempre se me hizo raro el hecho de que se apareció solo cuando murió Jisung. Hoy fui a casa de Jungsu a preguntarle, ya que yo sabía que él sabía algo, y estaba en lo correcto. El punto es, que luego de un tiempo estallamos en una pelea—
- ¿Se pusieron a pelear? Te dije que te controlaras con Jungsu - lo regañó
- Lo se, lo se, simplemente estaba, bastante molesto - Hyunjin dio un suspiro antes de continuar - Minho llegó justo a tiempo, conversamos un poco, y me siento un poco aliviado
- Pues cuéntame, yo también sentí rara su repentina llegada - expresó Jeongin
- ¡Lo sabía! ¡No estaba loco! - exclamó Hyunjin en consuelo - Básicamente Jisung y él se prometieron llevar el secreto de su "situación" a la tumba, y técnicamente, Jisung hizo eso, así que él no abrirá su boca. Lo que sí hizo fue mostrarme un diario de Jisung, en él, Jisung le escribió una carta a Minho un día antes de lo sucedido, así que por lo menos ya se que no había nada raro ahí
- Por lo menos - exclamó Jeongin, también en consuelo
- Y tú, ¿nada de que hablar? - preguntó Hyunjin de lo más normal
Oh no, Jeongin empezaba a sentir náuseas, ¿acaso ya era el momento?
- Jeongin, te ves pálido, ¿estás bien? - Hyunjin empezó a preocuparse, nunca había visto a Jeongin en tal estado - ¿Te traigo una cubeta?
- ¡NO! - gritó Jeongin, era hora de que perdiera la cobardía y por fin dijera todo lo que tuviera que decir
Hyunjin se confundió aún más cuando vio que Jeongin se levantó dramáticamente del sofá y se paró enfrente de él
- ¿Por qué rayos parece que estás apunto de citar a William Shakespeare? - preguntó Hyunjin confundido, pero intrigado
- Hwang Hyunjin - lo llamó - Tal vez parezca que voy a vomitar, pero lo único que vomitaré son mis palabras más sinceras para ti
