4. Ido desde el principio.

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Hark!: Listen/Pay attention. Escucha/Presta atención.

La luz de la luna se filtraba pobremente entre las nubes de tormenta y las hojas de los árboles que no paraban de moverse de un lado a otro gracias al viento. La lluvia estaba cayendo como si la estuvieran tirando con un balde o "a cántaros" como se suele decir. La caída de las gotas era constante y no parecía tener intenciones de terminar pronto. En el aire se podía encontrar el típico aroma de tierra mojada, un aroma fresco, relajante para algunos. Los árboles se balanceaban de un lado a otro, impulsados por el viento. Parecía que en cualquier minuto uno que otro caería. Esto se podía deducir por el crujido de los troncos.

El bosque estaba oscuro, húmedo y frío.

Chimuelo, incapacitado de volar (Gracias a no tener a su jinete en la montura) se dispuso a correr los árboles buscándolo. Habían caído desde muy alto. Se habían separado en terreno ajeno, extraño. El dragón estaba buscando frenéticamente a su jinete. Se detuvo en seco al llegar a lo que sería "El final del bosque." No era tal cosa, pero se podía pensar que si gracias a que no había ni un solo árbol. Todo lo que quedaba eran tocones, la raíz aún en el suelo.

Chimuelo alzó su cabeza solo para encontrar luz en la distancia. Pequeños puntos de luz ¡Había cabañas! Pero sus formas no eran parecidas en lo más mínimo a las cabañas que el dragón ya había visto antes. Quienes sean que estén viviendo ahí... No son vikingos, pero seguramente, son humanos.

En su curiosidad, Chimuelo decidió caminar sigilosamente entre los tocones de madera. Se ocultó detrás de los troncos tirados, apilados para (seguramente) ser usados en futuras construcciones. Vio a Hombres, que solo pudo reconocer como tal por su voz, quienes estaban vestidos de formas extrañas. Usando sombreros raros, que nunca había visto a ningún hombre usar. Entrecerró sus ojos, intentando determinar si eran amigos o enemigos. Tres hombres (Que el dragón logró identificar como cazadores) se acercaron a los otros dos que estaban vestidos de forma extraña.

Chimuelo retrocedió, necesitaba encontrar a Hipo. Al moverse emitió leves sonidos. Húmedos. Patas contra el barro.

"¿Escuchaste eso?" "Bah, de seguro se escaparon los cerdos otra vez." "Fue detrás de la leña, vamos a ver."

Al oír eso, Chimuelo empezó a correr. Al no poder volar, solo podía aferrarse a lo que tenía. Sus cuatro patas.

El grupo de dos hombres vestidos extraño y los tres cazadores fueron inmediatamente detrás de la leña para encontrarse con un dragón intentando escapar. Al reconocer que era "Una furia nocturna." Empezaron a perseguirlo. Los cazadores, bien preparados como siempre. Inmediatamente lo envolvieron entre al menos tres redes. Una lanzada por cada uno. El dragón estaba forcejeando. Intentando escapar frenéticamente sin éxito alguno.

- ¡Hark! Tiene una montura. – Mencionó uno de los hombres extraños.

- ¡Buena observación Gale! Debe ser el dragón de ese jinete... – Respondió un cazador al hombre mientras amarraba bien las redes así Chimuelo no escapaba.

- ¡Ah, claro! Ese sujeto que intentó atacarnos... ¿Cómo fue que nos llamó? – Preguntó el otro extraño, del cual no se sabía el nombre todavía.

- Eh... Matthew ¿Verdad? Si, ese tipo los llamó "Nyaff." – El cazador dijo desenvainando su espada.

Chimuelo iba a lanzar un disparo de plasma, pero los otros dos cazadores enseguida le pusieron una especie de bozal que resistió el impacto. La preparación previa lo era todo. Habían sido contratados por estos hombres de origen desconocido para cuidar el "campamento" de amenazas con escamas. No podían darse el lujo de andar por ahí desprotegidos.

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