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Al llegar a casa Taehyung se pasó la mayor parte del tiempo pensando, un novio no debería ser algo malo, Yoongi no parecía una mala persona para decirle algo malo, lo mejor sería preguntarle a su noona

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Al llegar a casa Taehyung se pasó la mayor parte del tiempo pensando, un novio no debería ser algo malo, Yoongi no parecía una mala persona para decirle algo malo, lo mejor sería preguntarle a su noona. Así que después de que la familia se sentara a comer, Taehyung se acercó a Jieun sigilosamente mientras ella lavaba los platos sucios.

-Noona.- Jieun pegó un brinquito enfrente del lavaplatos.

-Tae, me asustaste.- Jieun sostenía fuertemente su pecho.

-Yo... Quería preguntarte sobre algo.- El pequeño se rascaba la nariz un poco avergonzado.

-¿Qué sucede Tae?.- Su hermana esperaba algo relacionado a la plática que habían tenido el día anterior.

-Noona, ¿qué es un novio?.- Taehyung fruncia un poco su ceño por la inquietud que lo embargaba.

-¡Ah!.- Jieun por un segundo se quedó sin palabras.- ¿Un novio?.

-Sí, un novio, hoy, un compañero lo mencionó y yo no sé que es eso.- Taehyung se cruzó de brazos.

Jieun tenía un extraño presentimeinto sobre esto, pero al fin y al cabo, un novio no era algo malo, así que decírselo a su hermanito no habría de hacerle daño.

-Verás Tae.- Se agachó a su altura para verlo de frente.- Un novio es la persona que quieres, la que te hace feliz, con quien quieres estar, los dos juntos, por el tiempo en el que ese sentimiento esté presente en tu corazón, la persona que te gusta, porque es lindo para ti, la que hace que sientas maripositas en tu pancita.- Jieun aprovechó eso para hacerle cosquillas a Taehyung.

-Noona, para, para.- El pequeño reía con ganas.

Jieun se detuvo, un poco más seria observando a su hermano menor.

-Tae, cuando dos personas se gustan y se ama, alguien que no deseas perder, tienen que llegar a ser novios, es un tipo de promesa en la que van a prometer que pase lo que pase se tendrán el uno al otro, apoyándose y protegiéndose, el amor es el sentimiento más puro que existe y encontrarlo es difícil, pero eres todavía tan pequeño Tae, no tienes que preocuparte por eso, cuando llegué el momento, esa persona aparecerá y se quedará para siempre.-

-Noona, ¿El amor de novios es como el que yo te tengo?.-

Jieun rió, enternecida.

-Es muy parecido, el amor es amor, pero el amor que se le tiene a un novio es un amor especial, un amor que solo le entregarás a esa persona, algo que sientes aquí.- La joven Jieun señaló el lugar en su pecho donde su corazón palpitaba, después ella acomodó el atolondrado cabello de Taehyung.

Taehyung a sus tres años podía llegar a comprender un poco lo que era un novio, el amor era algo que él entendía, amaba a su dulce hermana, a su gruñón hermano, a su tío, la persona que lo había adoptado y aún así amaba a su tía que era estricta con él, le gustaba el color rojo y le gustaban los coches, un novio era alguien que te hacía feliz y con quieres estar siempre, alguien que te gusta, pero entendía que el amor de un novio era otro tipo de amor, especial, como lo había llamado su hermana, con el tiempo esperaba encontrar a esa persona a la que pudiera entregarle ese amor.

-Gracias noona.- Taehyung sonreía feliz.


Al día siguiente Taehyung fue al Kinder bastante feliz, había aprendido algo nuevo y mágico, un novio, después de pensarlo mucho se dió cuenta que él quería tener un novio, pero lo esperaría pacientemente.

Sin embargo ahora tenía una tarea importante, debía darle los dulces que su hermana le había dado a Jungkook para que pudieran ser amigos, la hora del receso sería un buen momento.

Cuando llegó al salón observó a Jungkook en su lugar acomodando en su pupitre sus lápices de colores, le pareció bastante tierno la forma en la que trataba que todos los lápices quedarán a la misma altura.

Se acercó a él para saludarlo dejando que su hermano Namjoon se adelantará al pupitre que compartían.

-Hola Kookie.- Taehyung recargó sus manos en la orilla de la pequeña mesa de madera blanca, descansando su cabeza en ellas, sonriendo plenamente a Jungkook.

El pequeño Jeon observó a Taehyung, inconscientemente un hermoso sonrojo se apoderó de la punta de sus orejas y ligeramente sonrió al niño que se encontraba enfrente de él.

Taehyung alarmado se paró.

-Kookie, Kookie, tu sonrisa es hermosa, me gusta, como me gustan tus ojos.- Taehyung comprendió algo, Jungkook le gustaba, como sus carros o el color rojo.

- Taehyung comprendió algo, Jungkook le gustaba, como sus carros o el color rojo

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Un dulce por un novio •KookTae•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora