014.

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❛ 014. Annabeth, la domadora de perros ❜

Estaban en las sombras del bulevar Valencia, mirando el rótulo de letras doradas sobre mármol negro:

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Estaban en las sombras del bulevar Valencia, mirando el rótulo de letras doradas sobre mármol negro:

«ESTUDIOS DE GRABACIÓN EL OTRO BARRIO» . Debajo, en las puertas de cristal, se leía: « ABOGADOS NO, VAGABUNDOS NO, VIVOS NO» .

Era casi medianoche, pero el recibidor estaba bien iluminado y lleno de gente. Tras el mostrador de seguridad había un guardia con gafas de sol, porra y aspecto de tío duro.

Percy se volvió hacia sus amigos.

—Muy bien. ¿Recuerdan el plan?

—¿El plan? —Grover tragó saliva—. Sí. Me encanta el plan.

—¿Qué pasa si el plan no funciona? —preguntó Annabeth.

— ¿O si funciona pero lo mismo nos matan?

—No piensen en negativo. —dijo Percy mientras le daba un apretón a la muñeca de Olympe.

—Vale —dijo—. Vamos a meternos en la tierra de los muertos y no tengo que pensar en negativo.

Olympe vio como Percy sacaba las perlas del bolsillo, así que puso una leve mueca de lastima, no le estaban dando muchas esperanzas. Si algo iba mal, no parecían de mucha ayuda.

Annabeth le puso una mano en el hombro.

—Lo siento, Percy, los nervios me traicionan. Pero tienes razón, lo conseguiremos. Todo saldrá bien. —Y le dio un codazo a Grover y un pisotón a Olympe.

—¡Oh, claro que sí! —dijo él, asintiendo con la cabeza—. Hemos llegado hasta aquí. Encontraremos el rayo maestro y salvaremos a tu madre. Ningún
problema.

— Esto... lo haremos bien, todo va a salir bien. Tranquilo, Jackson, lo que dijimos fue por puros nervios.

Percy los miró y se sintió agradecido. Sólo unos minutos antes, por poco habían muerto en unas lujosas camas de agua, y ahora intentaban hacerse los valientes por él, para infundirle ánimos.

Metió las perlas en el bolsillo.

—Vamos a repartir un poco de leña subterránea.

Entraron en la recepción de EOB.

Una música suave de ascensor salía de altavoces ocultos. La moqueta y las paredes eran gris acero. En las esquinas había cactos como manos esqueléticas. El mobiliario era de cuero negro, y todos los asientos estaban ocupados. Había gente sentada en los sofás, de pie, mirando por las ventanas o esperando el ascensor. Nadie se movía, ni hablaba ni hacía nada.
Olympe oía algo, no sabía que era pero lo oía, parecía un leve e imperceptible murmullo pero no lograba entender.

𝐋𝐎𝐕𝐄𝐑 ━━ percy jackson (books)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora