2035

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"Hay tinieblas en la vida y hay luces, y tú eres una de las luces, la luz de todas las luces"

02 de enero de 2035


Estaba en su oficina, había presentado la propuesta para su jubilación y el próximo ascenso de su mochuelo, que bueno, de ser su pequeña estrella fugaz quedaba poco, hace un año se había convertido en madre de una preciosa lechuza a la que había llamado Athena, una preciosa estrella centelleante, llena de vida con unos ojos preciosos como los de su propia Vía, pero en un bello color azul, sin duda era la alegría de su abuelo.

La decisión había sido muy difícil, sin embargo, sentía que era el momento había puesto su corazón y su mente en buscar la evolución y la revolución en el anillo, sus ideas habían impulsado el progreso de Orgullo, había conseguido que los imp's de las más bajas categorías accedieran a mejores condiciones de vida e incluso a nuevas oportunidades de empleo, la realeza se había molestado en un principio pero los beneficios pronto se reflejaron en cantidades grandes, realmente GRANDES de dinero.

El progreso que Stolas instauró en el anillo, fue bastante notoria, un sistema de transporte público, un tren rápido y moderno que permitía un mejor flujo y circulación tanto de de productos como de gente, también había modificado el acceso del ascensor para el desplazamiento de todos los demonios y diablillos por el infierno.

Cuando hizo el informe sobre su próxima jubilación, las reuniones para la incorporación de Octavia y para ceder aquellos proyectos a los que se debía dar continuidad. Las cosas tardarían y dudaba poder deslindarse por completo de las tarea asignadas por Lucifer, así como los rituales de poder en luna llena para los poderes incrementados de Satán para sus "negocios" pero sí sería disminuir sus deberes y tener más tiempo libre, disfrutar de su nieta, de su hija y de su jardín y quizá, solo quizá pasar tiempo con Blitzy.

Odiaba cada minuto de la reunión, odiaba cada vez que el imbecil de Andrealphus abría su enorme boca, para decir un comentario estupido y cada vez peor que el anterior, a veces dudaba de que ese demonio realmente tuviera cerebro. Posiblemente no lo tenía.

Estaba nervioso. Estaba ansioso.

Esperaba la llamada de Blitzø, la voz estridente de Andy llenó el salón, incluso superando el estridente sonido del teléfono se vio opacado por la voz nasal del demonio -Venga, Stolas! responde esta podría ser la última llamada que respondes como parte de la realeza activa-

Se sentía tan asqueado de ese comentario, que simplemente quería salir de ese lugar y dejar de oír esa ridícula voz y escuchar al que él consideraba el amor de su vida.  









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¡Hola! Esta no es una carta es pequeño fragmento de la vida de Stolas, mientras no hay alguna carta que recibir de parte de Blitzy. 

Habrá una carta, claro y posiblemente es la carta más importante de la historia. Me gustaría poder decir que la tendré en estas horas, pero no puedo garantizar que lo termine. Les aseguro que en el próximo capítulo algunas de sus principales dudas se van a responder. SEAN PACIENTES.   


Estoy atenta a los errores, pero si ustedes ven alguno, no duden en hacerme saber de manera amable a través de un comentario y lo corregiré tan pronto como me sea posible.

ALL THE LOVE, L.

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