HISTORIA ORIGINAL.
Conocerlo me cambió la vida, así como conocerme le cambió la suya. Él no es perfecto, así como nadie en el mundo, pero es único para mí, mi alma y mi corazón lo saben. Él es un tatuaje perpetuo en mi vida, y estoy agradecido por e...
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Tus pesadillas ahora son mis sueños, pequeño niño herido: MissingP.
MATTHIAS.
Estos últimos días me he sentido un poco extraño, mi cuerpo parece un volcán que hará erupción en cualquier momento. Sé lo que es. Estoy caliente, mis hormonas han despertado desde que salgo con Aeron, y es increíble porque antes no me sentía así, estoy enamorado de él, mis sentimientos fueron y son inocentes, pero mi mente y mi cuerpo ya no lo son tanto. Quiero que me bese más qué con solo cariño y ternura. En ocasiones me encuentro fantaseando con que me toma con fuerza, me apega a una pared y me come la boca dejándome casi sin respiración, y eso no tiene nada que ver con que haya leído muchos libros homoeróticos. Solo estoy deseando hacer el amor con mi novio.
Apenas nos llevamos casi un año, no es una diferencia abismal, sé que pronto cumplirá diecisiete, aún así, sigue siendo una diferencia de edad muy corta, así que en serio no entiendo porqué no intenta ir más lejos conmigo, estoy muy listo y dispuesto a ir hasta dónde sea con él. Formo un leve puchero viendo hacia Aeron y sus hermanos. Estaba conmigo hace unos minutos, pero luego se alejo para pasar palabras con su mellizo y Dietrich.
—¿Sucede algo, Matt? —Casi dejo caer mi lata de gaseosa ante la pregunta repentina de mi hermana mayor. Ella luce muy hermosa está noche—. Has estado haciendo pucheros desde hace rato.
—No estaba haciendo pucheros —digo y bebo un trago largo de gaseosa.
Los pucheros son algo inconsciente, no puedo controlarlos, y desde hace unos días no paro de hacerlos.
—Sí tu lo dices.
—¿Dónde está Erix?
—Seguramente está con Hell —dice y luego sonríe negando—, sinceramente jamás imaginé eso, o qué tú y yo saliéramos con los mellizos McFloyd.
—Espera, ¿sales con Astorel? —Mi hermana sonríe y es impresionante como sus mejillas toman un suave color rosado—. Vaya, pensé que sentías cosas por Dietrich.
—No, siempre fue Astorel él que me gustó, solo no fui valiente y la cague al fijarme en Dietrich.
—Eh, okay, entonces —Me aproximo a su oído y susurro la pregunta—, ¿ya lo hicieron?
Esther ahora mismo podría ser confundida por un tomate con patas. Es nuevo verla así de avergonzada y tímida por un chico, lo que me deja en claro que no está yendo sin seriedad en está relación. No como con Dietrich. Nunca entendí del todo porqué se fijó en él desde el principio. Aunque claro, siento que con Esther nos estamos conociendo nuevamente.
—Dios, Matt, cómo puedes preguntar eso, es lo mismo que yo te pregunté si ya lo hiciste con Aeron.
