•Sinopsis•

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Dylan, el típico niño creído que se cree superior a todos y es totalmente arrogante y por así decirlo misterioso.

Nos conocimos cuando tenia 17 y fui a una cena de familia en casa de Jenny que organizaron por mi cumpleaños. por más que insistí en no ir y en qué no hacía falta Jenny no me dejo otra alternativa y al final me encontré haciendo una sonrisa forzada a la madre de ella cuando al cabo de unos segundos de tocar la puerta abrió con una sonrisa de oreja a oreja.

—Hola Bexley cariño feliz cumpleaños.—exclamó la señora Clau más conocida como la reina y dueña de las compañías de modelaje más poderosas de todo el país "la señora Claudia Marker". La típica señora que parece ruda y un poco mala a la vez que cuando la conoces es un amor.

—Hola Claudia, muchas gracias. No, no, no hace falta!!. Bastante ya habéis echo al preparar una cena—exclamó al ver que tiende la mano hacia mi con una caja envuelta en papel de regalo rojo con puntos blancos y un gran moño de decoración

—No querida lo aceptas es tú gran día y te mereces esto y mucho más. Pasen Roger esta en el salón y Dylan en su cuarto las están esperando.

No me quedo otra que aceptar el regalo y meterlo adentro de mi bolsa. Al dirigirme hacia el interior de la casa con Jenny que entrelazó su mano con la mía para que no me perdiera ya que era la primera vez de muchas que visite su casa porque aunque nos conocemos desde que teníamos cinco años nunca llegue a visitar su casa porque siempre jugábamos o íbamos a la mía ya que nunca le gusto que fuera a ver a sus padres o más bien "que sus padres me fueran a espantar". Eso nunca pasó claro, ellos siempre me trataron como una hija más.

Al ver que Jenny estaba nerviosa y tenía sus uñas aferradas con fuerza a su cintura la mire en busca de una explicación cosa q no hizo y me tocó hablar de primeras a mi.

—Oye Jenn, ¿estás bien?.

—Si claro como no estarlo.— la miré con una ceja encarnada y ella suspiró lentamente y volvió a mirarme.
—No la verdad no estoy bien estoy súper nerviosa Bex y no por ti si no por el echo de que vallas a conocer el idiota de mi hermano.

—Tú tranquila sé lidiar con gilipollas.—trate de bromear para calmar el ambiente cosa que resulto de inmediato y ella empezó a reírse a carcajadas.

—Eres la mejor. Pero enserio si te dice cualquier gilipollez no dudes en darle una patada en los huevos.

—Lo tendré en cuenta.

Al llegar al salón al cabo de unos minutos caminando por los pasillos con Jenny lo primero que pude notar es a un señor alto «haber también considero a casi todas las personas altas teniendo en cuenta que parezco un minion» con el pelo negro peinado hacia atrás perfectamente con un traje combinado perfecto para la ocasión y unos ojos de color avellana hermosos y una mandíbula marcada, no pude evitar preguntarme si el hermano de Jenny será igual que el. Después desvíe la mirada de él para fijarme en el salón y ver cómo era justo lo que me había imaginado; paredes de color gris y todo en colores neutros muy claros, cuadros con fotos de ellos y decoración muy básica pero pero linda.

Al ver que Jenny quita la mano de la mía para ir a abrazar a su padre me apresuro a imitarla y saludarlo con un gesto que él me devuelve con una sonrisa.

—Feliz cumpleaños Bexy!!—exclamo con la misma sonrisa amable y profesional de siempre, me pregunto si le sale natural o simplemente la finge.

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