Craig estaba ahí, con el cuerpo recostado contra el sucio colchón, aunque parecía despierto. Utilizó débilmente los codos como apoyo para echar un vistazo a la figura que estaba de pie ante a el. Era Tweek, aunque esta vez no sostenía el bate de béisbol.
—¿...Hice algo? —preguntó Craig con inseguridad pintando su voz.
Tweek sonrió suavemente, lo que a Craig le pareció sumamente extraño—. N- No... tú no.
—Estabas discutiendo con una chica sobre mí.
—Ah, ella sólo estaba- hnn, siendo terca, supongo —se rió nerviosamente, caminando dentro del cuarto oscuro y cerrando la puerta detrás de él. Esperaba que Craig no supiera la verdadera razón detrás de la estúpida discusión.
El chico del chullo notó la actitud inusualmente amistosa de Tweek. Lo recordaba como un anormal loco, intimidante y retorcido, pero ahora mismo parecía... extrañamente amigable. Su sonrisa dejaba ver sus dientes amarillentos, quizá por la cantidad de café que consumía a diario, aunque Craig aún no era consciente de su adicción a la cafeína. Sólo pensaba que no se los cepillaba en absoluto, lo que sin duda le repugnaba un poco.
Craig sintió que le dolía el estómago, notando el hambre que tenía después de casi dos días sin comer nada.
—Me muero de hambre. —dijo sin expresión alguna.
Tweek hizo un sonido de burla, levantando una ceja— ¿Q- Qué, quieres que cocine para ti?
Su hombro se agitó ligeramente una vez que terminó la frase. Siempre estaba alterado. Ahí estaba el Tweek que conoció.
—...Me dijiste que no me suicidara, pero siento que voy a morir de hambre de todos modos —explicó Craig, y tenía razón.
—Tch, bueno. —Tweek se rindió, dándose la vuelta para buscar lo que pudiera para dárselo a Craig.—Espera, eh... —Craig le interrumpió a mitad de camino—. Cuando ustedes me secuestraron, tenía una bolsa y estoy seguro de que tiene un poco de comida dentro, ¿puedes... tal vez traérmela?
Observó como el rubio salía de la habitación antes de volver con la bolsa de bocadillos. Cerró la puerta tras de sí una vez más. Se acercó mientras temblaba sutilmente, entregándole la bolsa.
Craig le dio las gracias, viendo cómo Tweek se sentaba a su lado, mirándole con un ojo tiritón. Se comportaba de forma extraña. El chico del chullo decidió ignorarlo. Cogió una caja de cereales, abriéndolas y dándose un festín como una bestia hambrienta, que en parte era la realidad.
Sin embargo, Craig no podía dejar de sentirse incómodo con la mirada penetrante de Tweek. Lo miraba embobado como si fuera un animal enjaulado en un zoológico.
—¿Vas a quedarte mirándome mientras como...? —Craig levantó una ceja, mirando extrañamente al rubio.
—Agh, eres el- mhh, primer chico de m- mi edad que veo desde hace tiempo... —explicó Tweek, negándose a apartar la mirada.
Craig sólo permaneció en silencio, no queriendo hacer la situación más incómoda. Se estaba haciendo difícil respirar, de alguna manera.
Eso fue hasta que Tweek rompió el silencio una vez más—. Mi... mi padre no especifica cuánto tiempo debo estar aquí, exactamente, así que estaré aquí más tiempo del que probablemente debería....
—¿Oh...? —Craig dejó escapar ese sonido, preguntándose si su padre era el hombre que lo llevó a la habitación en la que estaba cautivo.
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NO ME MIRES ASÍ | Tweek x Craig
FanficDurante las duras condiciones de vida de un apocalipsis zombi, Craig es secuestrado por una extraña familia en orden de chantajear a su grupo de sobrevivientes para obtener recursos debido a lo difícil que es conseguirlos. Sin embargo, Craig no espe...