Capítulo 1.

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Me levanté, y como todas las mañanas, no desayuné. Un día decidí que, ya que no me gustaba desayunar, no lo haría hasta encontrar a alguien que me alegrara las mañanas. Y aún lo mantengo. Sin embargo, durante aquella semana, desayunaba. Porque él estaba a mi lado.

Cogí la maleta, y la abrí. Lo primero que encontré fue su camiseta. La abracé, ya que desprendía su olor, y era muy agradable. La dejé sobre la cama, y saqué un papel que nos regalaron el día de la despedida. En la parte de atrás ponía algo. "Existe un lugar diferente, donde todos los días están llenos de sensaciones nuevas, donde los acentos se funden y se confunden, donde sus habitantes aportan lo mejor, donde la moneda de cambio es una sonrisa y donde las noches están cargadas de canciones y estrellas. Recuerda y revive cada instante que pasaste entre sus murallas aprendiendo, conociendo, conviviendo... Sabes que ya formas parte de este pueblo, y esperamos que él siempre forme parte de ti."

Comencé a llorar. Y empecé a recordar la noche de la acampada, en la que me apoyé en su pecho para mirar las estrellas, juntos, y me quedé dormida mientras acariciaba mi pelo. Le echaba de menos.

I wish you were here.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora