Cap.6{Días de pascuas}

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De un grito atroz su sueño desapareció, sudando miró a su alrededor asustado, estaba recostado en una camilla de lo que pudo suponer era el hospital.

Se levantó con peso en su brazo el cual se encontraba con la escayola desde su codo hasta media palma de su mano; Su hermana Lori entro rápidamente en la habitación sorprendida al ver a su hermano conciente, se acercó para abrazarle —Tonto, ¿por qué harías algo tan estúpido?— dando una cachetada ligera volvió a abrazarle con algunas pequeñas lágrimas en las comisuras de sus labios.

Estaba visiblemente confundido —Si, lo siento, hablando de eso podrías decirme ¿Que fue lo que se supone que hice?— limpiando su nariz y los restos de sus lágrimas miro confundida de igual manera su hermana —Caiste sobre mi cofre idiota, ¿Que intentabas hacer?— dijo dando pequeños golpecitos en la cabeza realmente molesta —Yo...— la puerta del dormitorio volvió a abrirse dejando entrar a la madre que también corrió a los brazos de su hijo en cuanto le vió despierto.

Después de algunos minutos el médico entro para hablar de los cuidados que tendría desde ahora —Bien, hijo, debes alejarte de los tejados al menos hasta recuperarte ¿Entendido?— bromeó, el peliblanco asintió riendo aunque realmente sentia que no estaba del todo cuerdo —Por cierto, ¿Tienen animales en casa?— la madre señalo al gato, el perro y a la tortuga de la familia —Cleff, Charles, y brinquitos tercero— Lori preguntó acerca de los demás animales de su hermana menor pero su madre explico que ya tenía un empleo en el santuario de reptiles en el zoológico de Royal Woods —Y ¿Qué tal conejos?— Lori y Rita se miraron confundidas negando con la cabeza, Lincoln sintió su cuerpo congelarse, estaba visiblemente asustado —Puede ser solo una coincidencia, las garrapatas de algunos venados, algunas pulgas en roedores y tal vez hasta tu gato puede contener en su pelaje una cepa de bacterias comúnmente llamadas Tularemia, o la "fiebre de conejos" como se le conoce, es la infección que está intentando apoderarse de tu brazo; Es provocado por una bacteria que abunda precisamente en conejos— 

Fue un silencio bastante largo e incómodo, sobre todo por aquel nerviosismo que mostraba el peliblanco
—Pero como dije, puede ser solo una coincidencia, así que te recomendaría alejarte de ellos, puedes contagiarlos, hemos tratado tu infección pero es realmente rápida por lo cual no debes dejar que avance más, por tu brazo no te preocupes, serán solo unas semanas, no fue gran cosa más que una ligera fractura externa del hueso, suele pasarle a los futbolistas muy seguido en sus piernas por sus propios músculos, lo que si puedo mencionar es que ese brazo no se lastimo por la caída—  disgustada Lori interrumpió —Cuando caiste en mi auto fue de espaldas abrazando ésto— de su bolsa sacó el peluche de bun-bun atemorizando al joven de manera instantánea —¿Lincoln?...— todos miraban confundidos al joven que seguía aterrorizado.

Bueno, yo... Tal vez ¿me resbale en el ático?— dijo apartando la mirada del muñeco con la misma mirada de terror —¿Fue pregunta?... preguntó el médico bastante preocupado mirando con algo de miedo a las dos mujeres
¿Pueden dejar la sala un momento?— acataron mirándose entre ellas y después al peliblanco que también estaba preocupado.

Cerrando la puerta y alejándose se acercó al peliblanco, hablo serenamente y en voz baja —Bien, nadie puede escucharnos hijo, puedes confiar en mi ¿Necesitas ayuda?— con verdadera preocupación miró al joven que de igual manera estaba preocupado —¿De que está hablando?— se acercó a la camilla de dónde tomo una tabla de anotaciones y diagnosticos de dónde sacó algunas fotografías —Tu brazo estaba seriamente lacerado en la piel, sobre todo tenía marcas de azotes fuertes con otra mano, mirá aquí— señalo la silueta donde se veía perfectamente —Muchos jóvenes se sienten avergonzados de admitirlo, pero es mejor sentirse avergonzado que ser abusado por tus propios familiares, puedo llamar en este momento a servicios sociales, ellos te pueden ayudar, no tienes por qué seguir soportando maltratos hijo—  algo indignado pero entendiendo al médico se explicó —Oiga lo entiendo, se lo que puede parecer, pero no es para nada lo que usted piensa, además llevo años fuera de casa de mis padres por la universidad, de hecho, solo vine por vacaciones, le agradezco la ayuda pero ellos jamás harían algo así— viendo la cara de negación del médico saco de su billetera la identificación de su universidad —Si, Lori puede llegar a ser ruda, y ni hablar de Lynn, pero créame doctor, son las hermanas más amorosas que pueda encontrar— dijo riéndose, pero el doctor seguía sin sonreír
Suponiendo que estoy equivocado ¿Quien te hizo eso muchacho?— sin palabras, el peliblanco miro al suelo, no sabía que responder ¿La verdad? —Fue... una amiga...— el doctor por fin veía algo de sinceridad en el muchacho.

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⏰ Última actualización: Apr 09 ⏰

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"Soy yo, tú mejor amiga ¡Bun-Bun!"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora