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"Los hombres son todos traicioneros"
Dos meses después...
-—Vamos Sasuke... dame esa sonrisa que me gusta.
Sasuke miró a la cámara y una media sonrisa surgió. El reflector de luz amarilla que estaba a su costado hizo que el modelo tuviera un aura casi angelical.
El flash apareció al mismo momento en que el sr. Uzumaki hizo su galante aparición junto a sus agentes.
Sasuke sonrió y se levantó del sofá en donde estaba casi recostado con una camisa Gucci.
—¡Mi amor!— el modelo rió y corrió hasta donde estaba para abrazarlo.
Muchos le preguntaron a Sasuke (obviamente lo seguían haciendo) sobre qué le había visto al señor Uzumaki porque; sí era guapo a pesar de su edad; pero fácilmente podría ser su padre.
El modelo siempre respondía lo mismo ("Cuando uno se enamora no importa el envase") pero la verdad era que el señor Uzumaki era un facilitador de vida. Gaara lo apodaba como un sexy vividor... para Sasuke era un estilo de vida.
Señor Uzumaki + Trabajo rápido= Estilo de vida asegurado.
El Uzumaki le dio un rápido beso mientras le acomodaba su cabello peliplata.
—¿Cómo la estás pasando? ¿Todo está bien?
—Muy bien cariño—Sasuke sonrió y acarició la mano que estaba acomodando su cabello— Es más... el photobook está listo. Quiero que veas como está quedando.
—Seguramente perfecto. Todo lo que haces es perfecto y lo sabes.
Sasuke rió y le regaló un leve empujoncito.
—Ya. Señor Uzumaki me hará sentir incómodo.
Los asistentes pasaron a segundo nivel cuando el fotógrafo se acercó para desbloquear su computadora y mostrar algunos sets de fotos.
—Queríamos incluir una imágen más divertida, casual. Un poco diferente a lo que habiamos hecho antes así que...—- el joven abrió los archivos y mostró algunas.
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S
asuke se mordió los labios. Definitivamente se amaba.
—¿Y? ¿Qué te parece?— el modelo se giró para verlo. El señor Uzumaki tenía una sonrisa brillante.
—Definitivamente serás la portada de la revista este mes, bebé— respondió el CEO, causando que Sasuke saltara y lo abrazara.
—Soy sexy, admitelo— continuó el modelo, haciendo que el señor Uzumaki sonriera.
