cap 4

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Afife: victoria - la observé

Victoria: señorita Afife - hice reverencia

Afife: acompañame - se movió, la seguí

Victoria: a donde vamos?

Afife: me ayudarás a preparar la terraza de los aposentos de su majestad - entramos a los aposentos, observé la habitación, era enorme, está se movió, fui atrás suyo, llegando al balcón, habían Agas ordenando también - coloca esos cojines en el suelo - me moví, haciendo lo que pidió, al terminar la mire - no deben demorarse en llegar - observe la vista desde el balcón, era hermosa

Victoria; este lugar es hermoso

Afife; son los aposentos del sultán - se hizo a mi lado - deben de ser maravillosos, sultana Hürrem - se volteó, la mire, hice lo mismo, hicimos reverencia, los Agas se marcharon, me moví, empezando a marcharme, cuando.

Hürrem; detente - me quedé quieta - mírame - levanté la mirada - eres tú no es así? Victoria?

Afife; así es sultana, ella fue la criada que envió a su majestad el príncipe Cihangir

Hürrem; tenías razón señorita Afife - la miro y después a mí - eres hermosa

Victoria; le agradezco

Hürrem; Cihangir- sonrió, mire, apareció junto con otros hombres, los príncipes imaginé, hice reverencia

Afife; victoria - la mire, asentí, hice reverencia, moviéndome, salí de allí.

Más tarde estaba en el jardín, observando las rosas, algunas estaban marchitas, así que intentaba regenerar las con bueno mis dotes, era lo único que podia hacer con ellos, ya que no podia usarlos, me detuve cuando sentí que alguien se acercaba, observé, era el principe Cihangir con el principe... Bayazeto, hice reverencia

Bayazeto: no sabía que les daban espacios de descanso - lo mire

Victoria: ah...bueno...es que..yo..

Bayazeto: bromeó, no te preocupes - miro al principe Cihangir y después a mí - hablan de tí últimamente, eres la chica de curiosos ojos

Cihangir: yo creo...que son hermosos...son tan bellos como la luna - lo mire, este me observo, entonces bajo la mirada

Victoria: es muy dulce príncipe

Bayazeto: sí, lo es - lo miro

Victoria: quizá, sea mejor que me vaya - hice reverencia, me moví

Cihangir: ah... Señorita victoria - me detuve, lo observé - podría..venir a mis aposentos más tarde, me gustaría hablar con usted

Victoria: por supuesto - volví a hacer reverencia y me marche.

En la tarde marche a los aposentos del príncipe Cihangir, al llegar no había nadie, así que nuevamente me puse de curiosa a ver sus libros, me encantaba leer, era una pena que no tuviera si quiera uno

Cihangir; te gusta leer? - me volteé,  lo observé, hice reverencia

Victoria: príncipe, no lo escuché entrar

Cihangir: no pasa nada - se acercó - la vez pasada leías algo de la guerra entre Francia y Inglaterra, te gusta ese tipo de libro?

Victoria: diría que soy curiosa sobre las historias del pasado, pero me gusta más el misterio y las de magia - sonrio - no me diga, no cree en la magia - negó

Cihangir; es difícil de creer

Victoria: que no haya presenciado algún caso de hechicería no significa que no exista

Cihangir: bueno, respeto culturas y religiones, hay personas que creen en eso, pero yo no

Victoria: es respetable, para que me necesitaba príncipe

Cihangir: me gustaría agradecerte por haber mentido por mi

Victoria: no fue nada

Cihangir: para mí si lo fue, si deseas puedes tomar un libro en agradecimiento - observé el estante 

Victoria; enserio? - lo mire, asintió, sonreí, comencé a ver los libros - este - lo tome, hizo un gesto - que?

Cihangir; bueno, no tiene buen final - observé el libro

Victoria: no importa, lo leeré, así que no me diga nada más

Cihangir; está bien - sonrió levemente

Victoria; será momento de que me vaya

Cihangir: ah..puedes..venir cuando quieras...por si..quieres leer..algo más

Victoria; agradezco la invitación - hice reverencia, moviéndome

Cihangir: de hecho...podrías quedarte un poco más - lo mire - es que..no conozco a alguien más que le guste tanto la literatura como a mí... - mire a la puerta y después a el

Victoria; claro - sonrió, se sentó en el suelo, me senté a su lado

Cihangir: la vez pasada..no tuvimos el mejor reencuentro

Victoria; no

Cihangir: lamento eso

Victoria: ah, está bien, no pasa nada - miro a otro lado, era tan tímido como yo, sin duda es un problema, tome aire

Cihangir: de donde..eres - me miró

Victoria: soy de Inglaterra

Cihangir; tienes familia allí? - me quede inmóvil un momento, recordando todo

Victoria: no..- mire al suelo

Cihangir: lo lamento...no debí preguntar...estás bien?

Víctoria; sí..- lo mire - es solo...mi madre falleció hace poco...era..la única familia que me quedaba..

Cihangir; mi sentido pésame..como falleció?

Victoria; fue asesinada por el gobernador de allí, tenía un odio especial a mi madre solo por ser vendedora...

Cihangir: que hombre tan despreciable, debería de pagar por lo que hizo

Victoria; eso espero, que algún día pagué por haber dejado sola a una hija..- mis ojos se cristalizaron - discúlpeme - limpie la lagrima que acababa de caer por mi mejilla

Cihangir: no, no te disculpes..está bien llorar, algunas veces..nos hace sentir mejor..puedes..recostarte en mi hombro y llorar...no me molesta...- la verdad, iba a decirle que no, pero mi pecho dolía demasiado, era una herida que no cerraba aún, así que no pude evitar romperme, me recosté en su hombro sin poder parar de llorar.

Cuando lo logré, me acomode, el se levantó, sirviendo agua y dándome la, lo mire, tome el vaso, bebiendo un poco

Cihangir; pediré la cena, comer algo caliente te ayudará - se movió, yendo a la puerta, me sentía una niña pequeña, no sabía que decirle.

Después de unos minutos llegaron unas criadas con la bandeja, la dejaron en el suelo, Cihangir se sentó a mi lado

Cihangir: se ve delicioso - tomo una cuchara, colocando en ella algo de arroz - vamos, te hará bien - la acercó a mí boca, lo mire, abrí mi boca, comiendo, lágrimas cayeron por mis mejillas, las limpie

Victoria; gracias...por ser tan amable conmigo....- mire al suelo

Cihangir; no fue nada, ahora come, no dejes que se enfríe - asentí, tome una de las cucharas

XContinuaráX


Mi salvación {Cihangir y tu}  ( el sultán )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora