El misterioso pozo de carne: Parte 1

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Pre-parte 1: El juicio

Cuando Mark entró por la puerta del juzgado, siente que para nada saldará a su favor.

—Esto es un despropósito, llevar a una empresa multimillonaria a juicio, quien tuvo la idea - dice Mark, dirigiéndose a su abogado.

— Sé que no tenemos cuasi nada que ganar, pero puede que podamos dejar a la empresa... digamos que "coja" - responde haciendo un gesto con los ojos de mirar a lo lejos.

—¿A quién intenta vigilar?—pregunta Mark por la acción que hizo.

—¿Ves al juez?— Señalándolo con discreción.

—Si— Afirma Mark.

— Él siempre está presente en todos los juicios involucrados con esa empresa - dice explicándoselo a Mark.

—Continúa— propone Mark.

—No te parece raro, mismo juez, misma empresa. Creo que tienen algo demasiado gordo, para dejarlo ir por unas demandas legales— Acabo explicando el abogado.

—Insinúas que Anodine compra a los jueces para propio beneficio — dice sorprendido Mark.

—Es solo una suposición, no hay pruebas— responde el abogado entrecortado por los martillazos del juez.

—Mantén la calma— Se dice a sí mismo Mark.

Parte 1: La llegada

3 Días antes del juicio, Mark estaba al caer de la "reserva" natural más grande de Texas. Él se había alojado en Odessa, una población bastante grande y donde los alojamientos no estaban a precios desproporcionadamente altos, no como en el pueblo turístico de Gumpinton que estaba justo al lado del parque nacional.

—Hoy es sábado a las diez en punto, no hay indicadores de posibles

precipitaciones, un maravilloso día soleado. Ahora un pequeño espacio para nuestra patrocinadora, Coca-Cola Heartt...— Enuncia la radio del coche antes de haber interferencias.

—¿Qué nada puede ir bien?— Dice Mark mientras golpeaba a la radio en un intento para desahogarse.

—Sé que esto puede ser estresante, y más siendo tú— Johnson dice intentando reconfortar a su compañero.

—Lo sé, lo sé, tú ya sabes lo que me pasa con este sitio— Le cuenta molesto —Lo hago por necesidad—

—Y por eso estoy yo aquí, tranquilo estamos los dos en esto— Dice Johnson intentando reconfortar a Mark, sin éxito.

—Bueno, ya estamos llegando— Dice Mark intentando encontrar un aparcamiento — Es sábado y esto está lleno de todas formas-

—Sigue buscando— Menciona Johnson entre una risa casi impredecible— Déjame a mí conducir, normalmente tengo más suerte.

—Muy bien, a ver si es verdad— Contesta Mark.

—Tan solo mira esto— Dice entrando a una zona restringida —Y, ya está— Afirma mientras aparca.

— ¿Qué se supone que estás haciendo? — Pregunta Mark, mientras mira nervioso a los lados. —Esto es solo para empleados —

— Y que se supone que somos nosotros. ¿Turistas? — Dice Johnson entre carcajadas.

—Tienes razón, tienes razón...— Afirma Mark, con una voz cuasi inaudible.

Capítulo 2: Donde está la luz.

Después se bajaron del coche, entraron a uno de los muchos elevadores de servicio que había para empleados y se sumergieron al interior del parque.

—Ten, te lo descuidaste en casa. — Dice Johnson mientras le daba su identificación del trabajo.

De repente hubo un fuerte apagón que dejo a Mark y a Johnson atrapados en el ascensor por unos instantes, antes de que volviera la luz repentinamente.

—Supongo que es parte de la bienvenida. ¿No? — Expresa Johnson tomándoselo a broma.

—Espero que tu suerte nos ayude. — Cuenta sarcásticamente Mark.

—Pues lo encontré el sitio antes que tú. — Dice burlonamente Johnson.

—Que sí, que sí. — Opina Mark de forma irónica, justo antes de que se abrieran las puertas del ascensor.

Después de ese corto imprevisto fueron hacia sus casilleros y se equiparon con sus vestimentas adecuadas.

—¿Hola? ¿Hay alguien en este canal de radio? — Pregunta Jacob por el walkie-talkie.

—Sí, sí que hay gente, estamos en los casilleros de la zona de empleados. — Afirma Johnson.

—¿A, sois los nuevos? Se supone que me han asignado con vosotros para el mantenimiento de este pozo. — Les cuenta — Ahora voy hacia allá. —

Johnson procedió a apagar el walkie-talkie.

—¿Quién se supone que es esta persona? ¿Algún tipo de acompañante? — Pregunta Mark.

—Creo que sí, es como una persona más veterana en este trabajo, temas de orientación y esas cosas. — Asegura mirando un panfleto informativo — Sí, por lo que supongo y el tipo de grupo que somos, él será una especie de ingeniero. —

La puerta que se situaba a su lado izquierdo se abrió y rebelo cara de su nuevo acompañante, vestido con una especie de traje blanco de plástico.

—Buenas, yo soy Jacob, un placer. — Dice ofreciendo un apretón de manos a Mark.

—Y cuál es tu cometido aquí. ¿Si se puede preguntar?- Dice Mark, devolviéndole el saludo.

—Si yo, se supone que abro vías de pasto entre tejidos, y poca cosa más. —Ahora ofreciendo el apretón de manos a Johnson.

—Bueno, ya haces algo — Dice Johnson también devolviendo el saludo.

—Sí, tienes razón — Afirma Jacob —Bueno, a lo que hemos venido. Supongo que cuando estabais por aquí hubo un apagón repentino, ¿no? —Pregunto.

—Sí, justo cuando estábamos bajando por el ascensor. — Le cuenta, Mark.

—Pues eso ha estado pasando toda esta mañana, y justo ahora me han avisado de que hubo una avería en un sistema eléctrico secundario. — Explica Jacob — Pues eso, debemos ir, mirar que paso y arreglarlo.

—Ok, perfecto. — Opino Mark.

—Pues empecemos. ¿Tenéis todo el material? — Pregunta Jacob.

Mark y Johnson asintieron

— Vale, manos a la obra. — Dice Jacob mientras se saca una cuerda de una especie de mochila — Poneos esto en el enganche que tenéis en el chaleco, se supone que es por seguridad. —

Empezaron a caminar, cuantos más pasillos de color rojizo cruzaban, más perdidos se sentían tan solo tenían un pequeño camino de farolillos que iluminaba el camino, asta que eventualmente encontraron la avería.

—Pues aquí está. ¿Un cable roto?, ¿nada más? — Menciona extrañado Johnson.

—Sí, normalmente son averías de esta clase — Explica Jacob mientras saco cinta americana de su mochila — Tan fácil como poner un poco de esto en cualquiera de los dos extremos y pegarlos ya se arregla, y si pasa otra vez, se hará cargo otro.

Mientras, Johnson y Jacob estaban intentando arreglar el fallo, hubo un gran temblor que provocó contracciones en el organismo abriendo agujeros en el suelo, Mark apoyado en una pared cayó a uno de los agujeros.

— ¡AAAAAAH! ¡Chicos ayudarme, por favor! — Grita Mark al ver que está colgando por una fina cuerda.

—¡Tranquilo te tengo! Jacob usa una de tus superherramientas ¿¡No!? — Grita sarcásticamente Johnson a causa del pánico creado por esa situación.

—Aquí tengo una... — Dice sin poder acabar la frase, ya que otro temblor ocurre y se los lleva a todos hacia abajo.

El misterioso pozo de carne.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora