Famosa - Sasusaku

4: Fácil como un domingo por la mañana

Papeleo.

Tanto puto papeleo.

Suspirando, Sasuke se pellizca el puente de la nariz y se cuestiona por qué pensó que convertirse en capitán era una buena idea (porque sus padres y su hermano sentaron las bases para él y no va a dejar que sus aspiraciones para él se echen a perder) antes de seguir ordenando el montón de casos y documentos que tiene encima de la mesa (de forma organizada porque no es un bárbaro como algunos que dejan los papeles desparramados y alegan que es desorganización organizada).

"Nunca hablan de la abundancia de papeleo en las películas y series de televisión". Levanta la vista y ve a Sakura de pie en el umbral de su puerta, con una pequeña sonrisa comprensiva en la cara, y de repente siente que puede respirar de nuevo. "Tu escritorio tiene peor aspecto que el mío".

Deja el bolígrafo en el escritorio y se echa hacia atrás en la silla, observándola con mirada de halcón mientras pasa junto a las sillas dispuestas frente a su escritorio y se apoya en el borde más cercano a él. Se siente impregnado de su aroma (manzanas frescas y crujientes, vainilla cálida y algo propio de Sakura) y tiene que juntar las manos para no estirarlas y tocarla. En los últimos dos meses, se han visto de pasada o cuando él necesitaba resultados de ella y han continuado con su extraño juego de tira y afloja y de quién se romperá primero cada vez que estén cerca el uno del otro (o cuando ella utilice su número de teléfono, que últimamente ha sido escaso y él sabe que ella está casi tan agobiada como él).

"Nunca oí al toxicólogo anterior quejarse de su carga de trabajo". Se siente satisfecho cuando ella enrojece y entrecierra los ojos. Se enfada tan fácilmente.

"Shizune se queja, créeme. Tsunade-shishou asigna mucho papeleo. Cosas sobre las que siento que no tengo autoridad, pero que están sentadas en mi escritorio en las montañas y necesitan ser revisadas... augh, estoy bastante segura de que tengo contratos para varios de los médicos y sabes que estaría más asustada si no me ocupara de algunas de estas mierdas con Chiyo o ayudara a Gaara con algunos de sus papeleos..." Se pone rígido ante la mención del nombre de Gaara y sólo escucha a medias mientras ella sigue divagando.

Eso es algo que aún tiene que averiguar. Sabe que ella conoce a Naruto por su amistad con Gaara y que conoce a Shikamaru por la hermana de Gaara y... su mandíbula se aprieta. Todo se remonta a Gaara y no está seguro si es puramente amistad o algo más. Se pregunta si sería tan... curioso si se tratara de cualquier otra persona, pero su relación con el capitán de la policía de Suna siempre ha sido tenue en el mejor de los casos. 

"-De todas formas lo siento. No pretendía salirme por la tangente. Estoy agradecido por mi trabajo y porque Tsunade se haya tomado su tiempo para orientarme en el aspecto médico y empresarial, pero no deja de ser frustrante." Unos ojos verde esmeralda lo estudian. "Uchiha-san... ¿Cuánto has dormido últimamente?".

Maldita sea, ¿tan mal aspecto tiene (las duchas del sótano no tienen la mejor presión de agua)? Tal vez una hora. Probablemente tanto como la noche anterior y está seguro de que va a pasar otra noche en su despacho, intentando dormir en su no tan cómodo sofá (que sólo es ligeramente más cómodo que las camas de la comisaría).

Ella toma su silencio como una respuesta y continúa: "Tengo un té hecho con hierbas y flores que te ayudará a dormir mejor. Lo hice originalmente para ayudar con el insomnio de Gaara después de que dejara de tomar los medicamentos recetados", le ofrece una cálida sonrisa y se burla ligeramente, "Si puede ayudar al peor insomne del mundo, estoy segura de que puede darte algún tipo de alivio. Aunque sólo sea por unas horas".

Gaara. Trata de no enojarte y joderlo-. 

"No." 

Los ojos esmeralda le parpadean y una ceja rosa claro se levanta. "¿No? Uchiha-san... Hablo en serio. Te ayudará a dormir mejor". La preocupación que se filtra en su voz se irradia sobre él y su pecho se aprieta y trata de racionalizar por qué no debería aceptar su oferta porque maldita sea-.