Salí de el baño mientras tarareaba una melodía cualquiera. Camine hasta donde dormía Maddy y la moví un poco.
-Mmm-se removió en la cama
--Chica, tienes que levantarte
-Mmm, déjame mamá-dijo tapándose la cabeza con la almohada y acomodándose más
-Si no te levantas voy a ponerte una araña en la cabeza-amenaze como último recurso
-¡Araña! ¿¡Donde!?-grito levantándose de golpe. Si, le tenía miedo a las arañas-¿Donde esta ese mounstro?-pregunto mirando toda la habitación
-¿Que monstruo? Aquí no hay ninguna araña solo una chica muy dormilona. Llegaremos tarde-una sonrrisa divertida surcó mis labios, esto me daba mucha gracia
Abrió los ojos como platos. Miro la hora en el reloj de su mesita de noche y salió de la cama para ir directo a su clóset y luego al baño.
-¿¡Porque no me despertaste antes!? ¡No se si pueda estar presentable en tan poco tiempo!-grito desde el otro lado de el baño
-¡Ya verás que sí!-grite de vuelta-Voy a salir un momento para comprar nos algo de desayunar-avise cerrando la puerta a mis espaldas
Fui a la cafetería que estaba cerca de aquí, recurríamos bastante a ella. Entre en el establecimiento dejando que el aire frío del aire acondicionado me pegará e el rostro.
-Hola, Thomas-salude al chico de la caja-Agachate que estoy pequeña
-Hasta para saludar eres mandona-dijo inclinándose sobre la barra y así poder yo darle un beso en la mejilla
-Para nada-dije-Dame dos capuchinos
-Esta bien, pero dime Tom. Odio mi nombre-se quejo con una mueca en su rostro y se revolvió un poco su cabello negro comenzando con la orden
-Me lo pensaré
Unos brazos rodearon mi cintura de forma protectora y me acercaron a el cuerpo de el chico. Esa colonia varonil junto con el olor de el jabón, era Drean. El olor me lo decía todo.
Forme en mi rostro una de mis sonrisas y me giré para darle un pequeño beso en los labios y volver a como estaba antes.
-Mejor que sean cuatro capuchinos-pidió
-Y quiero y once de los desayunos que siempre pido para llevar
-En camino
Tomé la mano de Drean y lo arrastre conmigo hacia una de las mesas. Se sentó frente a mi mientras nos mirábamos de arriba a abajo.
Ay, Madison.
Vestiamos casi igual. Ambos llevábamos camisas blancas con rayas negras, chaquetas mescliya encima, pantalones igualmente de mescliya pero blanca y por último los zapatillas blancas.
-¿Madison te aconsejo ponerte eso?
-Si-conteste-Y apuesto que a ti te paso igual con Miles ¿no?-sonreí igualmente
-Mjm-asintió con la cabeza-Su novia se lo pidió y como perro faldero le obedeció
-¡Oye! No hables así de mi mejor amigo-regañe
-Eso no quita que sea verdad
-Aqui tienen-dijo Tom dejando los capuchinos y bolsas de papal en la mesa-Adios, Alice. Que tengas unas lindas vacaciones
-Adios-canturreó tomando algunas bolsas y dos capuchinos
Salimos en caminó a mi edificio, uno al lado de el otro. Al mirar de reojo pude ver una cadena de plata medianamente gruesa colgando de el cuello de Drean, no pude ver dige alguno, pero no le quedaba mal.

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Perfecta Coincidencia[En Edición]
Dla nastolatkówLibro #1 de la trilogía Perfecto. Alice Cooper es tímida, pero extrañamente popular. Siempre lleva un libro bajo el brazo, vive detrás de su cámara y sueña con escribir historias que enamoren. Drean Hodland, en cambio, es el chico invisible del saló...