꒰ ⊹ 𝙷𝚊𝚜𝚝𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚕 𝙼𝚞𝚗𝚍𝚘 𝚜𝚎 𝙳𝚎𝚛𝚛𝚞𝚖𝚋𝚎 ⊹ ꒱ ˖ ࣪ . ᰍʰʸᵘⁿⁱⁿ

☄️Where We Go☄️

━━━━(☄️)RIDERS - glued to you.

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La oscuridad de la madrugada acompañaba a Jeongin, había llegado hace unos minutos al lugar donde quedaron en encontrarse. Decidió sentarce en una de las mesas que permanecían fuera del local, el cual tenía sus puertas de par en par pero claramente nadie vendría a pedir su orden.

El chico no podía creer que luego de tanto tiempo volvería a ver a Hyunjin, mucho menos en esas circunstancias. Se encontraba muy nervioso, tanto que su pierna se movía de arriba a bajo en contra de su voluntad.

Su pulso se aceleró aún mas cuando escuchó el ruido de una motocicleta estacionando y a lo lejos pudo divisarlo acercándose. El chico pelinegro  caminó hacia la mesa donde estaba sentado el castaño que tanto conocía.

Jeongin se levantó de la silla donde estaba sentado y cuando ya habían quedando frente a frente, enrolló con fuerza sus brazos alrededor de Hyunjin.

— Te extrañé— murmuró con su cara pegada a su pecho.

El perfume del pelinegro llego al menor, inundando rápidamente sus fosas nasales haciendo que se sintiera aún más a gusto, cualquiera podría decir que no era el aroma más encantador e incluso podrían llegar a pensar que es muy común, pero para él era el mismísimo paraíso.

El mayor sonrío y apretó aún más al chico contra él, también lo había extrañado, demasiado.

—Supongo que dadas las circunstancias tenemos que ser completamente honestos, no? —preguntó y luego de un rato el chico contra su pecho asintió —Yo también te extrañé —concluyó.

Se mantuvieron abrazados, aunque sólo había pasado un año de la última ves que hablaron el sentimiento de añoranza hacia creer que había pasado una larga y lenta eternidad.

Luego de un rato se separaron, se dedicaron una sonrisa y se sentaron para conversar mejor.

—No pensé que fueras a llamar —confesó.

I.N lo miró por unos segundos.

—Ni yo — respondió para soltar un suspiró.

—Pero me alegró que lo hayas hecho —dijo de todo corazón.

Sus miradas se cruzaron y era increíble pero ahí estaba, la misma chispa de siempre, la misma intensidad, el mismo fuego. Era increíble como después de tanto tiempo, sus sentimientos seguían intactos. Como despues de tanto tiempo con tan sólo una mirada sus cuerpos siguiese reaccionando de esa manera.

— ¿Cómo has estado? —preguntó el castaño aún mirandolo.

La pregunta se quedó dando vueltas por la mente del pelinegro: "¿Cómo a estado?", ahora que se lo preguntaba, ni el mismo sabía.

—Bien, yendo de un lado a otro —trató de decir algo — ¿Y tú, cómo has estado?¿Qué tal tu madre?

El chico apartó la mirada en cuanto fue mencionada su madre.

—Ella se fue con Rafael —trató de hablar sin que se le quebrara la voz, el pelinegro al darse cuenta comenzó a acariciar su mano en forma de consuelo —. Ni siquiera dejó una nota o algo para despedirse, sólo se fue —bajó la cabeza al sentir como una lágrima se deslizaba por su mejilla.

Hyunjin se levantó para arrodillarse frente al chico.

—Estoy aquí innie —limpió sus lágrimas para luego acariciar su rostro —. Siempre he estado para ti.