KILLUA ZOLDYCK:Salía desde el agujero realizado en la pared y apoye mi mano en esta y quede algo cabizbajo para luego relamer mis labios, tenía sangre en ellos
Al subir mi cabeza sentí un zumbido insoportable, vi a Kurapika luchar contra aquel mismo tipo y un poco más allá pude ver a Goran,tenía entre sus manos una guadaña roja... ¿Era sangre?
Al girarme vi a Gon,estaba muy concentrado en lo que pasaba a su alrededor,ambos cruzamos nuestras miradas pero antes de poder decir algo sentí un presión tremenda en el aire, como si una bomba hubiese estallado,el viento casi me mandaba a volar. Mi cazadora casi fue llevada por la ráfaga
De inmediato mire hacia la fuente de aquel poder... las gigantescas puertas del gremio habían sido abiertas por una energía sobrenatural, vi aquel viejo, el maestro del gremio, Netero. Ni siquiera tubo que mover un dedo para abrir las puertas. Caminaba despacio,con sus manos detrás de la espalda. Su Nen se desbordaba, todos habían dejado de luchar y tan solo miraban el poder que emanaba de ese vejete. Era una maldita fiera
Había silencio pero el ruido de algo caer al suelo llamo mi atención,estaba muy cerca de mi por lo que era fácil de oír
Una cabeza
La cabeza de aquella mujer rubia rodaba en el suelo. Parece que murió sin dolor, ni siquiera se dio cuenta al morir que le habían arrancado la cabeza. Su cuerpo también callo desplomado al suelo. El dueño de esta obra era Goran,aún poseía la guadaña entre sus manos pero no por mucho tiempo, esta se disolvió y se metió en su cuerpo por medio de una cortada en su brazo
Al parecer todos los cazarecompensas no son como Gon
El hombre vestido de negro y de peinado extraño se paro en frente de Netero, había que tener los huevos gordos para hacer eso
—¿Eres el maestro del gremio?— Pregunto,se le veía muy aburrido
Antes de que Netero respondiera un grito desgarrador se interpuso
—¡Pakuu!— Grito el rubio con el que anteriormente yo había peleado. Corrió hacia la mujer mientras tenía su mano en su abdomen ya que sino perdería sangre por la herida. Callo de rodillas ante el cuerpo sin vida de su compañera
—¡Kuroro! ¡Mataron a Paku!— Grito entre lágrimas
Así que el tipo raro se llamaba Kuroro
Mire al sujeto para ver su reacción. Y valla, no lo espere, el estaba completamente afectado, con sus ojos abiertos miraba a la chica sin decir nada
—Re- ¡Retirense!— ordenó fuertemente,su voz retumbó en las paredes
Junto a la mujer sin vida y el rubio apareció un hombre con Yukata y una katana,tenía un pelo negro y largo el cual estaba atado como una coleta
El rubio cargo el cuerpo y el pelinegro sostuvo la cabeza, ambos desaparecieron como si fuese por arte de magia. Kuroro tampoco estaba. Ni ningún otro integrante de ese grupo
—¿¡A donde creen que van!? ¿¡POR QUE HUYEN!? ¿¡TANTO LES DUELE PERDER A UNO O DOS DE LOS SUYOS!? ¿¡QUE HAY DE MI!? ¿¡QUE HAY DE LOS KURTA!?— Kurapika reclamaba, no sabia a donde mirar mientras los hacía por lo que miraba y daba vueltas a todos lados. Sus cadenas sonaban por cada gesto que este hacia. Terminó callendo de rodillas al suelo
—¡Zafar!,¡Lina!,¡Kai! ¡Sigan a esos hijos de puta!— dicto en voz demandante un moreno a un grupo de cazadores con un aspecto algo peculiar, parecían amazonas
—No vallan a ningún lado— se interpuso Netero al instante
—Pero maestro...— intento reclamar aquel hombre pero al ver la mirada del viejo callo de repente
—He dicho que se queden aquí. Sería malo que algunos de nuestros mejores hombres salgan del gremio. Necesitamos a todos. ¿¡Hay bajas!?
—No por lo que veo señor. No hay olor a muerte, excepto por aquella chica rubia— olfateaba Gon. Me llegan a sorprender las habilidades de Gon, su sentido del olfato es completamente diferente al de una persona normal. Por lo que me he podido dar cuenta el percibe un olor diferente en cada persona y esto le ayuda a rastrear, rastrea desde distancias remotas, es todo un animal
—Me alegra escuchar eso. Si hay heridos no pierdan el tiempo y vallan con Leorio. Y los demás ayuden a tapar los agujeros de las paredes— el viejo pensaba con la mente fría. Su semblante había cambiado ya no se veía tan enojado en comparación cuando cruzó por la puerta. Su Nen me daba miedo
—Killua ¿Estas bien?— me pregunto el pelinegro agachandoce a mi altura y colocando sus brazos en mis hombros
—S-si— dije dudosamente para luego asentir con firmeza. El beso mi frente y luego me despeino con su mano
—¿Tu estas bien?— pregunte mirándolo de arriba a abajo
El sonrio de oreja a oreja entrecerrando sus ojos y me abrazo —Si, estoy muy bien
—¡Maestro! ¡Permitame seguirlos!— gritaba Kurapika ya estando de pie
Netero miró a Kurapika posando su mano en su barba —El hecho de que me niegue... acaso ¿Serviría de algo?
El rubio trago en seco y frunció sus ojos,sus manos temblaban pero estoy completamente seguro de que eso no era por miedo,impotencia,ira,rencor. Se como se siente,no sabe que hacer
Realmente no creo que la mejor opción sea seguirlos, no tiene un plan, ¿Los seguirá y cuando los encuentre que hará? ¿Atacara? Eso sería suicidio no importa lo fuerte que sea
Pensándolo bien... ¿Kurapika mato a uno de sus miembros?. ¿Cuando lo hizo?. Según el no había dado con ellos durante todo el tiempo que estuvo en Karanes...
Quede pensando un tiempo y después abrí los ojos como platos. ¡Claro!. Reí al saber que el rubio habia mentido. Recordé el día que Kurapika nego haberlos visto, su semblante cambió antes de dar su respuesta, eso fue algo que había notado pero no le tomé importancia, no tenía razones para dudar de él en ese momento
—¿Killua, de que te ries?— Pregunto Gon al verme sonreír, yo cambie mi expresión a una más seria y negue con la cabeza
—No pasa nada
El Kurta golpeó la pared con fuerza y bufo como un toro para después alejarse de todos e ir a la planta de arriba
Entonces... ¿Que hay que hacer ahora? ¿Debemos reconstruir este lugar como dios manda?
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Ya No Seras Un Esclavo >>Gonkillu<<
Teen FictionKillua, un chico que de muy temprana edad fue vendido como esclavo por sus mismos padres, cuando cumplió 12 años fue llevado a un coliseo donde se convertiría su infierno, asesinar o ser asesinado, esta fue la doctrina con la creció desde muy joven...