Ya había pasado un año desde que Dazai abandonó la Port Mafia y Chuuya definitivamente no pensó encontrarse con él en un Night club, sobre todo no siendo la atracción principal.
Algunos miembros de la agencia estaban algo cansados, después de todo no estaban muy acostumbrados a solo usar armas.
—Tenemos suerte que la mayoría haya ido detrás de Dazai-san y que Nakahara-san se encargara de ellos.
—Él no fue el único, Dazai elimino a más de la mitad de todos los que lo rodeaban. No imaginaba que fuera tan...tan...—a Kunikida le costaba decirlo por el simple hecho de que no podía imaginar a Dazai siendo tan bueno en algo, lo creía demasiado perezoso para siquiera interesarse en algo y practicarlo.
Fue Atsushi quien termino la oración. —¿Tan bueno con las armas?
—Sí, eso.
—Bueno, fue parte de la Port Mafia antes de trabajar en la agencia, así que no me sorprende que sepa utilizar armas, pero lo que sí es sorprendente es el buen manejo que tiene. Dazai no ha estado utilizando armas para ninguna misión de campo recientemente, incluso dudo que lo haya usado alguna vez con nosotros. Aún así logro incapacitar a más de la mitad sin malgastar ninguna bala. —Yosano pudo observar al castaño solo por unos momentos y fue toda una sorpresa verlo. Dazai no perdía el equilibrio incluso en tacones.
—Dazai-san es impresionante, lástima que no pude verlo—se lamentó Atsushi.
—El demonio prodigio—el susurro de Kyouka llamo la atención de los otros cuatro miembros de la ADA, habían escuchado también mencionar ese título a varios a su alrededor, unos con miedo y otros con confusión. —No creí que Dazai-san fuera el demonio prodigio.
—¿Por qué lo dices Kyouka-chan? —pregunto Yosano.
—Bueno. No puedo asociar a Dazai-san con él. Además, el demonio prodigio desapareció un día y no se lo volvió a ver. Se convirtió en una leyenda luego de eso y ese título sirvió para infundir miedo y respeto dentro de la mafia y de todo bajo mundo. Incluso aquellos que no lo conocían llegaban a temerle por las historias oscuras que circulaban alrededor de ese título.
—¿Historias? ¿Qué...que clase de historias? —preguntó el albino un poco temeroso
—Se sabe que era el encargado de interrogar a los prisioneros más renuentes y tercos que se negaban a dar información. Sus métodos de tortura eran tan eficientes que no hubo nadie a quien no pudo sacarle la información que quería. Además de...
—Gracias Kyoka-chan, pero no creo que pueda seguir escuchando eso—para empezar al igual que su compañera Atsushi no podía relacionar a esa persona con su mentor. Parecían ser dos personas completamente distintas. —¿Y cuánto de todo eso es realmente cierto?
—No estoy segura, siempre creí que era una exageración. Pero tampoco me atreví a preguntarle a Chuuya-san, él era el único que lo conocía más profundamente ya que fue su compañero.
—Todo es cierto.
La voz de Rampo llamo la atención de los demás, todos conscientes de lo que implicaba lo dicho por el detective principal de la ADA.
—Pero eso no importa, Dazai es parte de la agencia ahora—Rampo sonrió haciendo que los demás miembros también sonrían
Todos estuvieron de acuerdo, el pasado de Dazai no era importante si después de todo él decidió cambiar para bien.
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