The lover (el amante) yoonmin

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Park Jimin no es un persona complicada o eso cree de si mismo. Su infancia podría catalogarse normal y lo único memorable que recuerda, es la manera insistente en que las personas de su alrededor siempre le han recordado lo lindo que es, estos elogios se intensificaron en la adolescencia y podría jurar que es lo único que lo hace especial en este mundo.  

A menudo se preguntaba por que la vida era tan complicada, comenzó a creer que la belleza no era un don, que era mas una maldición, si bien le había traído cosas buena,  no compensaba las malas.

Jimin se conformó con llevar una vida tranquila haciendo lo que le apasionaba, dejando los asuntos del mundo de lado; por la mañana asistía a la escuela y por las tardes daba clases de baile en una academia, su vida transcurría con calma y normalidad por lo menos hasta el día que encontró a un loco a punto de suicidarse.

—Si quería suicidarse lo hubieras echo en una parte mas alejada de la ciudad— le dijo al extraño mientras usaba toda su fuerza para tirar de el y ponerlo a salvo— ¿no va a ayudarme? Usted no es muy liviano señor— dijo jimin con cierto hastió en la voz.

El desconocido reacciono de inmediato e hizo un movimiento y en un momento de desequilibrio  callo encima de jimin  los dos cuerpos sintieron el calor del otro y sus miradas se conectaron instantáneamente, tal como si fuera una película romántica de Hollywood el tiempo se detuvo y solo existían ellos dos en el mundo.

Yoongi simplemente quedo con la mente en blanco en cuanto vio a su salvador, podría jurar que era lo mas hermoso que había visto en este mundo, el echo de que momentos antes estuviera apunto de caer de un puente se volvió una nimiedad al igual que el echo de que estuviera encima de un extraño.

Jimin por su parte quedo estático, no se movió ni un centímetro, su mente no procesaba lo que estaba pasando y simplemente se quedo mirando los ojos del extraño, el único pensamiento que pudo generar su cerebro fue una comparación genuina e inocente de aquel hombre con un felino. Uno muy lindo. 

El pelinegro muy a su pesar hizo un esfuerzo y se levanto torpemente, cortando así aquel momento que podría considerarse casi místico,  por otra parte el extraño de pelo plateado imito sus movimientos, todo en un sepulcral silencio como si ninguno supiera que decir.

-Lo.. lo siento- dijo por fin Yoongi, y hay que darle merito por el esfuerzo por que en ese momento sus emociones eran como una montaña rusa si bien antes eran un caos, en este momento podría jurar que era mucho peor, ni el mismo entendía por que rayos su corazón no dejaba de latir de aquella manera. 

-Si, si no se preocupe- En realidad jimin no sabia a que se refería, simplemente su cerebro lo obligo a responder por instinto, por que estaba incluso mas confundido que aquel extraño.

-No es lo que usted esta pensando, yo ... yo simplemente estaba observando la ciudad

-¿Me esta diciendo que para observa la ciudad se subió a un puente?

-Si exactamente

En la mente de Yoongi sonaba mejor esa excusa y por supuesto que no espero lo que paso momentos después, pues su vergüenza fue cortada por una risa incrédula.

-Ok señor no voy a creer eso, pero dadas las circunstancias creo que tengo el derecho a pedir, mas bien exigir una respuesta ¿por que alguien como usted quiere dejar este mundo?

-¿Alguien como yo?

- Si, alguien como usted, solo mírese, ese traje que lleva puesto se ve elegante, estoy seguro que podría pagar un mes de renta con eso 

De todas las reacciones que se pueden esperar de presenciar una escena como la anterior, Yoongi jamás creyó que pudiera haber alguien tan tranquilo con aquella situación, incluso que el extraño comenzara a reír, ni mucho menos que hablara tan naturalmente y menos aun que hiciera esa pregunta.

-No es lo que usted piensa y no era mi intención hacer lo que usted sugiere

El pelinegro nunca resalto por su tacto y amabilidad, en realidad toda su vida fue catalogado como serio y tajante, ahora esas cualidades salieron a relucir, no por decisión propia, simplemente reacciono, y un segundo después comprendió que no era la mejor manera de reaccionar pues el extraño instantáneamente borro esa sonrisa.

-Tampoco es para que se moleste, solo fue una pregunta, si no quiere responder esta bien

-Diculp... - Su mente lo llamaba estúpido y lo recriminaba por aquella reacción, no era su intención ofender a quien fuera aquel extraño por lo que estaba a punto de expresar una disculpa o  eso tenia planeado, si no fuera por el chico de cabello plateado que  después de revisar rápidamente el reloj de su muñeca lo interrumpió con una inesperada reacción. 

-¡Mierda ya es tarde!- dijo Jimin para después mirar al hombre de traje frente a el con una inesperada condescendencia - Señor en esta vida hay muchas cosas por que vivir aun que esta a veces  sea una perra, por favor no lo vuelva a hacer y si es que tiene esos pensamientos busque ayuda, ahora me voy- hizo una breve reverencia y salió corriendo.

Yoongi no supo como reaccionar, quedo totalmente pasmado, esa había sido una noche bastante rara y solo un loco podría reír con la situación. Entonces él se había convertido en un loco por que eso precisamente estaba haciendo, ni el mismo sabia por que.

-No pregunte su nombre- susurro para si mismo, por que si el estaba loco, aquel joven lo estaba aun mas. 

Levanto el portafolio, acomodo su abrigo y continuo con su camino. Era cierto que la vida a veces es complicada y en ciertos momentos de esta quisiéramos desaparecer pero por un momento aquel hombre apesadumbrado olvido todos aquellos sentimientos negativos y sonrió genuinamente, solo esperaba que la cena estuviera bien y que sus pequeños hijos estuvieran despiertos para poder darles un fuerte abrazo. 

Camino unos pasos mas y se detuvo, miro hacia atrás y deseo con todas sus fuerzas volver a ver a aquel extraño que en unos segundos pudo cambiar su mundo, no ignoro ese sentimiento de necesidad pero se obligo a encerrarlo en lo profundo de su ser, no podía volver a caer en lo mismo. 

Esa noche fue como todas llego a casa, abrazo a sus hijos y durmió, pero en su corazón guardo ese encuentro con ese bello chico de cabello plateado, del cual no pregunto el nombre pero fue una luz en su camino y prometió atesorarlo por siempre, lo que en ese momento Yoongi no sabia es que el destino de verdad es un enigma y puede jugar de formas misteriosas, esto lo descubriría mas adelante.