Predestinados (Terminada)

-34- Blanco

-Deidara-

No pude dormir en toda la noche, tan pronto deje de llorar corri al baño y me dedique a limpiar mi cuerpo una y otra vez hasta el cansancio

Cuando me di cuenta el sol ya comenzaba a salir, tome al pequeño en brazos y después de alimentarlo, prepare un poco mas de te para mi, lo bebi con asco, y aun con temor me prepare mentalmente para ver a Tobirama una vez mas

Espiaba por una ranura en mi puerta y cuando alfin lo ví salir de su alcoba, sali a toda prisa para alcanzarle,

el en cuanto me vio sonrió, me detube en seco y lo mire con temor

Deidara- Permítame.... ir con ustedes... porfavor

Sasuke salio tras el, pero nisiquiera me miro, iva perdido en sus pensamientos

Tobirama- ¿Soportaras ver la ejecución de tus padres?

Comencé a llorar

Deidara- por favor ...

Miro a Sasuke, pero el nisiquiera lo miro, comenzó a caminar rumbo a las escalera, nuevamente dirigió su mirada a mi

Tobirama- Si intentas interferir, lo lamentaras

Solo asenti, baje la mirada, y camine tras ellos,

Sali del castillo, por primera vez desde que llegamos aqui, en la entrada ya nos esperaba un carruaje, no pude evitar llevar mi mirada a la escolta de alfas que ya se preparaban para salir,

ahí estaban mis padres, ambos con sogas al cuello atados a la montura de los caballos, Iván descalzos y ambos se encontraban muy golpeados, en un caballo detrás de ellos, estaba también el padre de Sasuke el nisiquiera miraba hacia aquí, igual que sasuke

Mama me miro y comenzó a llorar, después papá la acompaño, no pude evitar las lágrimas, quería correr hacia ellos, pero recibí un fuerte empujón que me tumbo de rodillas al suelo

Tobirama- ¡Entra ahora!

Apreté al pequeño en mi pecho y con lágrimas en los ojos subí al carruaje, Sasuke ya estaba ahí, Tobirama hablaba con uno de esos alfas,

Deidara- Sasuke... Tu puedes detenerlo

El nisiquiera me miro, casi era como si yo no existiera

Deidara- ¿Sasuke?... Por dios... ¿Encerio lo permitirías?

Lentamente miro mis ojos

Sasuke- ¡Cállate! O lo lamentaras como Mikoto lo hizo

Fue hasta entonces que note su extraña ausencia

Deidara- ¿Mikoto?... ¿Dónde está ella?

Sonrió y una lágrima cayo por su mejilla, rápidamente la limpio y miro por la ventana

Sasuke- la asesine... intento... traicionarme...

Me estremecí y más lágrimas cayeron por mi rostro... Mire por la ventana también y vi a mis padres comenzando a ser arrastrados rumbo a la salida,

casi de inmediato subió Tobirama y comenzamos a seguirles

-Sasuke-

La multitud de persona se amontonaba alrededor de los uzumaki, se empujaban y gritaban toda clase de cosas, los alfas de Tobirama no tenían más opción que golpear a los más atrevidos para abrirse paso

En dos horas recorrimos un sendero que normalmente no nos llevaría más de quince minutos, el calor aquí dentro es insoportable, y más el llanto de ese bebé, no veía la hora de salir de aqui...

Llegamos a la plaza, tuvimos que ser escoltados por los guardias, en medio de la multitud para llegar al centro,

Había dos tronos que Tobirama mando a colocar con antelación, tomo mi mano y me guio para sentarme en uno, y el tomo asiento en otro más,  uno de los guardias tomo a deidara por el brazo y lo inco a un lado de Tobirama,

El no hacia mas que mantener la mirada en el suelo, eso hasta que Minato, kushina y Fugaku, fuero arrastrados, al frente de nosotros, los obligaron a incarse y quitaron las sogas de sus cuellos

Tobirama parecía muy divertido con todo esto, yo me mantenia abrumado con la situación, solo quería terminar cuanto antes y volver al castillo, pero de pronto un muy sutil aroma me golpeo

Sándalo y cedro... Me obligo a reincorporarme en mi aciento y buscarlo con la mirada, entre la multitud no podía verlo pero sabia que estaba ahí...

Mire a deidara, el tambien me miro y nego suavemente con la cabeza preocupado,

Sabia lo que buscaba el también lo identificó...
Después de todo es un omega y su hermano gemelo

Nuevamente lo busque con la mirada sin éxito, pero su aroma se hacia un poco mas fuerte con cada minuto qué pasaba, se está acercando....

, es mi predestinado y mi cuerpo no tardo en reaccionar, el dolor de cabeza que parecía permanente en mi, desapareció, mi corazon comenzo a latir con fuerza y tube que sostenerme a la silla para no levantarme y correr a su lado...

Inconcientemente comencé a soltar feromonas, Tobirama no tardo en notarlo

Tobirama- Hey... ¿Que haces?

Mire a deidara, sus ojos se abrieron aún mas y nego enfáticamente, nuevamente fijé mi atención en Tobirama, y aún cuando las palabras parecían atorarse en mi garganta logré hablar

Sasuke- El... El está aquí...

Sonrió y susurro a mi odio

Tobirama- ¿Dónde?

Respire agitado y lo mire

Sasuke- no se... Pero lo siento... Se que está aquí...

Sonrió

Tobirama- Hagámoslo salir entonces...

Tomo mis mejillas y beso mis labios, un sentimiento de furia y dolor abordo mi pecho,

Naruto- ¡LIBERALOS AHORA MISMO!

Absolutamente todo fijaron su mirada en el, Minato y kushina, parecían muy preocupados, deidara comenzó a llorar, y yo tenía unas inmensas ganas de levantarme e ir a su lado, me llamaba, me necesitaba...

Pero entonces los recuerdos abordaron mi mente...

Todo lo que pase..., todo el tiempo que estube esperándole... y el nunca hizo nada por mi...

Frunci el ceño y respire profundo intentando controlar mis instintos

Tobirama se coloco de pie y se carcajeo

Tobirama- ¡Entrégate y are que tu muerte sea rápida!

Los guardias de Tobirama, lo tenía rodeado, pero el no se inmutó

Naruto- ¡Libera a mis padres... A mi Omega y a mi hermano... Aunque yo no puedo ofrecerte lo mismo... ¡Sufrirás! ¡y pagarás Todo lo que as echo!

Tobirama se carcajeo con ganas

Tobirama- ¡Capturenlo!

Los guardias de Tobirama se lanzaron espadas en mano hacia Naruto, mi pecho dolió y aunque no era lo que queria, un sentimiento de preocupación me invadió

Mordí mi labio ansioso, pero pronto mis nervios se convirtieron en asombro y me levanté de mi asiento de un salto

Un enorme y hermoso lobo blanco de más de dos metros apareció dónde antes estaba Naruto,

Sus ojos eran rojos y en menos de dos minutos los guardias de Tobirama a su alrededor estaban destrozados y aquel bello pelaje blanco ahora goteaba empapado en sangre color rojo brillante