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» Por Luna, Jeongin de verdad lamento tanto lo que pasó. Si hubiera sabido que todo saldría así no te habría dicho nada.

Habían pasado dos días desde que empezó su suspensión, después del viernes podía volver sin ningún problema al colegio, aunque aún tenía que limpiar los baños.

Dió un largo suspiro y respondió a Lia por el chat grupal que tenía con todos sus amigos:

» Lia, te juro que si vuelves a pedirme una disculpa voy a molestarme contigo de verdad.

»   :(.

No escribió nada más de vuelta, en su lugar tomó su libro de matemáticas y se dispuso a hacer la tarea que habían dejado ese día.

Comenzaba a frustrarse por no entender mucho de lo que venía ahí, pero no había otra cosa que tuviera que hacer así que tenía todo el día para resolver los ejercicios.

Estaba un poco irritado ya de por si porque no había momento en que sus padres no lo molestaran sobre su pelea con Hyunjin.

Tenía mucho en la cabeza.

Si antes ya estaba confundido respecto sobre si le agradaba el alfa o no, ahora mucho más.

No podía avanzar con su tarea con tantos sentimientos reprimidos.

Quería salir y gritar, gritarle a sus padres por preferir mil veces a sus amigos antes que a él, quería gritar por la insistencia de todo mundo en forzarlo a tener una buena relación con Hyunjin y quería gritar porque muy en el fondo sí quería conocer mejor al rubio.

Podía mentirse tanto como quisiera diciéndole a todos que detestaba con el alma al alfa, pero sabía que aquel día en el parque lo que quería era acercarse y ser su amigo, que había algo en Hyunjin desde niños que le llamaba la atención y que el rechazo de aquella vez había herido su pequeño corazón y que lo único que se le ocurrió para dejar las cosas parejas fue morderlo, sólo porque él también se sentía herido.

Al menos así no pudo ser ignorado.

Era incluso más molesto cuando los Bang estaban de visita y el hecho de que había tenido que bajar a pedir disculpas por segunda vez avivaba el sentimiento.

Estaba a punto de rendirse y simplemente hacer cualquier cosa para desperdiciar su tiempo hasta que escuchó a alguien tocar su puerta.

Se extrañó pero aún así fue a abrirle a nada más y nada menos que el alfa que atormentaba su mente junto a su tío Chan.

— Hola, Jeongin. Sé que seguramente te sientes cansado con todo esto, no pienso molestarte más pero Hyunjin pensó que la mejor forma de disculparse contigo es ayudarte con las tutorías... Si tú quieres, claro. – dice al alfa más grande.

Su mirada se dirigió al joven alfa, quien se mostraba cohibido de estar frente a él. Su rostro mostró una pequeña mueca parecida a una sonrisa y aunque quiso negarse, no quería tener que pedir tutorías en el colegio después del escándalo que había hecho.

— Pues... La verdad sí me hace falta algo de ayuda... – admitió apenado el bajito.

— Genial, cuando quieras empezar puedes decirle a Jinnie, sé que estará dispuesto a ayudarte. –

— ¿Es posible que sea ahora? No puedo avanzar con mis ejercicios de matemáticas. – pregunta por lo bajo sintiendo su rostro calentarse.

Sabía que el apoyo que le ofrecían no era malintencionado pero no podía evitar sentirse humillado por no poder alcanzar por su cuenta las metas que él mismo se había propuesto cumplir.

" no hate "Donde viven las historias. Descúbrelo ahora