Capítulo 12.

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Suspiró y sonrió cuando le llegaron las escenas de anoche a la cabeza, en su vida pensó que ese hombre fuera tan impulsivo. Él había estado con muchas mujeres a lo largo de su vida, pero nunca con un hombre, era nuevo en esto pero lo de anoche fue tan excitante e hilarante.

Soltó una leve risa cuando Charlie después de todo había salido corriendo como siempre, ese hombre. Honestamente el no era tan malo ¿o sí?

Él quería follarse a ese hombre y dispararle todo su semen dentro hasta que sienta que pueda quedar embarazado, me las pagará por haberse ido corriendo como siempre. Escucho el timbre de la entrada y la puerta fue abierta con un fuerte estruendo, gruñó cuando supo quién era.

"Emmett si rompiste la puerta haré que la repares con los dientes", amenazó por lo bajo sabiendo que el contrario lo escucharía.

El mencionado giro la cabeza hacia la puerta para ver si estaba en buen estado, ese hombre daba mucho miedo enojado y lo menos que quería era tener el enojo del otro hombre dirigido hacia él. Jasper que estaba a su lado le dio un manotazo y camino a paso rápido a donde se había escuchado la voz de su tío, Emmett tomo la delantera y se acercó a la habitación del hombre y la abrió con fuerza.

"Sí, entra como si fuera tu casa engendro", gruñó por lo bajo cuando Emmett entro con una gran sonrisa, esa sonrisa, quería borrársela de la cara.

"¿Qué te causo tanta felicidad?", preguntó con indiferencia cuando los dos chicos tomaron asiento en las cómodas sillas que había en su habitación.

"¿Follaron?", exclamó Emmett al hombre que estaba frente a él.

Everett miró exasperado, al contrario, claro que el venía a eso, era toda una vieja chismosa o como lamentaba haberlo dejar entrar a su vida, ese imbécil no tenía ni un poco de tacto para decir las cosas.

"Sin tacto", murmuró hacia el otro.

"¿Eso es un sí?", quiso saber Emmett.

Ninguno de los hombres necesitaba saber que estaba amenazado por su esposa o esa mujer malévola lo amenazo para que viniera a preguntar por lo acontecido anoche con Everett y Charlie aunque su esposa no tenía que saber que él ya venia a preguntar, no se sentía culpable le dejaba toda culpa a Edward por mirar a Bella como un psicópata desde su ventana.

"Emmett no es apropiado preguntarle eso al tío Eve", lo regañó su hermano.

"Si estás aquí en este momento es porque también quieres saber", espetó Everett a su sobrino mientras le daba una mirada acusadora o y el contrario tuvo el descaro de mirar hacia otro lado intentando disimular.

Soltó una carcajada, no quería contarles nada, pero quería saber que pensaban sobre la situación que tenía con Charlie, hombre complicado ese.

Estuvieron conversando por varias horas hasta que tuvo un leve presentimiento, se levanto de repente y miro a los dos hombres frente a él.

"¿Según tengo entendido no pueden entrar al otro territorio no?", preguntó hacia los dos contrarios ya sabiendo la respuesta, pero espero.

"No, pero podemos acercarnos un poco al límite, ¿Por qué?", quisieron saber los otros dos pero no recibieron respuesta.

"Síganme", ordenó Everett.

Everett se había vestido con una de las mejores ropas que tenía, algo le decía que la necesitaba paraesta ocasión. Los tres hombres salieron por la puerta trasera de la cocina y pasaron la gran piscina mientras se adentraban al bosque a pasos rápidos. Emmett y Jasper se miraron confundidos por lo que el otro hombre haría, se detuvieron cuando llegaron al limite del bosque que daba a la reserva. A sabiendas Everett les dijo que esperaran así que el siguió pasando el límite ya que el no estaba en el tratado de los vampiros y lobos.

Con ambas manos en los bolsillos delantero de su pantalón camino con elegancia por la calle cuando salió del bosque, varios autos pasaban por su lado con indiferencia. Camino hasta que escucho la playa a lo lejos, su vista enfoco una pequeña multitud de lo que parecía ser adolescentes hormonales que no vestían más que un pequeño short. Con la cabeza en alto se dirigió hacia ellos, él sabía que lo que habían sentido acercándose a ellos  y se pusieron en guardia pero uno de ellos abrió los ojos con sorpresas.

"¿Señor Kim?"

Everett se iba a detener cuando escucho la voz de Sam, pero siguió caminando hasta que se detuvo delante del grupo.

"Sam, es bueno verte", admitió hacia el mencionado viendo como el grupo de adolescente que apestaban a testosterona miraban de un lado hacía otro.

"¿Qué hace aquí?", quiso saber el contrario.

Antes que pudiera formular alguna palabra distinguió como se acercaban otras personas hacia ellos, pudo observar a una chica con una gran cicatriz en su cara, pero lo que más le llamo la atención fue la presencia del hombre que era llevado por la chica en una silla de ruedas, sonrió con suficiencia así que este era el presentimiento, este hombre estaba planeando algo.

Aunque quiso saber por qué sentía que esto era igual que las películas, cuando sucedía alguna estupidez siempre se encontraban en camadas como ahora, si ese viejo bastardo estaba planeando en contra de él o sus amigos lo dejaría lisiado de la cabeza también, si su difunta madre pudiera escuchar esas palabras saliendo de su boca estaría regañado de por vida.

"¿Sam conoces a este hombre?", exigió el viejo cuando estuvo cerca de ellos.

El mencionado iba a responder cuando fue interrumpido por la voz dura de Everett.

"Eso no es de su incumbencia", respondió voz ronca.

Los demás miraron boquiabierto al hombre, era la primera vez que alguien le respondía de esa manera al señor Black.

Billy Black tenso los hombros cuando escucho la respuesta de aquel hombre, quien era ese y por que tenia el descaro de responderle así, ¿acaso no sabía quién era él?

"Acaso no sabe quie..."

"Me importa muy poco saber quien es usted", lo interrumpió con voz dura.

Billy Black miro boquiabierto como aquel hombre lo interrumpió y hablaba con la joven Emily como si le importaba muy poco su presencia, frunció el ceño cuando vio la mirada adorada que le daba el joven Sam al desconocido. Sonrió formulando algún plan, el usaría eso y haría que Sam se metiera en los pantalones del hombre, estaba seguro que la joven Emily aceptaría después de todo el buscaba lo mejor para la tribu.

Sin saber lo que el otro hombre estaba pensando, Everett hablo con todos alrededor, estas eran unas buenas personas, pero sentía que estaban presionados por el hombre de la silla de ruedas.

𝐊𝐫𝐲𝐩𝐭𝐨𝐧𝐢𝐚𝐧 𝐀𝐧𝐝 𝐕𝐚𝐦𝐩𝐢𝐫𝐞𝐬 - 𝗖𝗵𝗮𝗿𝗹𝗶𝗲 𝗦𝘄𝗮𝗻®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora