¡Yo soy más pervertido!

||Chapter two||

Capítulo dos: You are not my Christian Grey. 

(Había editado el otro capítulo, se volvió a poner igual los símbolos, ni puta idea, so... disfruten el capítulo)

(Otra cosa, ¡Ya tenemos booktrailer! Pueden verlo en multimedia)

Mi celular empezó  sonar con el nuevo Ringtone de ''What do you mean'' de Justin Bieber para iPhone, lo saqué de mi bolsillo y vi en el identificador de llamadas... es mamá.

— ¿Si? —dije mientras me lo colocaba en el oído.

— Blue, vino visita a la casa y te quiere ver.

— ¿Quién es mamá? —pronuncié de mala gana.

— Tú solo ven mi amor, te va a encantar. 

Y colgué.

Espero que me encante.

Loren

Definitivamente esto no le va a gustar a Blue.

— ¿Y que tal Krystal, hermano? —dijo Ryan muy contento al ver a su amigo.

— Pues, me engañó y... —suspiró— me sentía muy solo y decidí mudarme acá.

Me quedé en la cocina mientras ellos hablaban, hasta que lo escuché preguntar por Blue.

— ¿Y tu hermana?, estoy ansioso por verla...—dijo mientras jugaba con sus manos.

— Está con sus mejores amigos, patinando —contesté mientras sacaba el pastel del horno.

— Ah, con Nash... —habló bajo.

—Pero ahora vien... 

La puerta se abrió repentinamente, dejando ver a una Azul muy mojada en el hombro de Nash, un Hayes cargando los patines de Azul amarrados en el pantalón y las patinetas de él y su hermano.

— ¡Hola mamá!, ¡hola Ryan!, ¡hola Trevooooooor! —dijo gritando y corriendo a las escaleras, se detuvo un momento y luego las siguió subiendo.

Azul

— ¡Quitame los patines rápido! —dije asustada.

Hayes procedió a hacer lo suyo. Me quitó los patines rápido al saber que si el cojinete se moja, se pueden arruinar. Nash corrió a conseguir las patinetas, al rato que las llevaba en las manos se las dio a Hayes, Nash me tomó de la cintura y me llevó en su hombro. Muy normal de él.

Llegamos a la puerta de mi casa Nash me bajó al llegar a la alfombra y corrí hacia las escaleras para irme a cambiar a mi habitación.

  — ¡Hola mamá!, ¡hola Ryan!, ¡hola Trevoooooooooooor! —dije gritando, paré por un momento.. ¿Robinson? luego pienso eso.

Abrí la puerta de mi habitación y jalé la toalla de al lado, me la coloqué en el cabello y le puse seguro a la puerta para deshacerme de mi ropa frente al espejo.

— Uh, lonjita*... —dije mientras me apretaba el estómago— tendré que patinar un poco más, oh si.

Al abrir mi gaveta salió una araña como del tamaño del universo.

Nah mentira era una miniatura, pero yo les tengo miedo así que toda arañita es del tamaño del universo.

— ¡Por la concha de la...! —aventé una revista que hizo que la arañota culera muriera aplastada.

Quité la revista y ahí estaba la araña, muerta. Tomé mi celular de la cama y le tomé una foto.

— Genial...