One-shots Magllo

022

Julieta amaba salir. Comprar, pasear, correr, ir con amigos.. Con tal de salir no le importaba donde, solo amaba no quedarse en un solo lugar.

Ese día había decidido ir a casa de su novio, Magma, ya que no tenía nada que hacer y estaba aburrida.

Pasaron un rato agradable, incluso cocinaron juntos y Magma le regaló una flor de papel que le hizo.

Al final terminó con el cielo empezando a oscurecer, y Magma se ofreció a llevarla a su casa, pero ella se negó, ya que se encontraría con una amiga que saldría de la escuela en el camino.

—Es cerca cariño— dijo Julieta.

—De todas formas, te puedo acompañar, ya casi es de noche— respondió Magma.

—Estaré bien Magma, además sabes que a Yuno no le agradas tanto, al menos no todavía. No ta preocupes.

Magma la miró con una mirada preocupada —Esta bien, supongo, avísame cuando llegues a tu casa.

Julieta le dio un corto beso, luego tomó su mochila y se despidió con la mano.

—Nos vemos mañana.

...

Magma tomo su megáfono e inhaló para tomar valor.

—Felicito a todas las mujeres que tienen el valor de venir. Hoy, yo vengo a pedir justicia por mi novia, Julieta, que desapareció hace exactamente un mes. Hasta hoy no la hemos podido localizar, ella nunca llegó al punto donde quedó de ver con su mejor amiga— se detuvo un momento para tomar aire y tratar de no llorar —Su único delito fue salir de su casa, y el mío fue no acompañarla, que lamento hasta hoy. De verdad, nadie merece esto.

Bajo su megáfono y varias chicas empezaron a gritar para pedir justicia, mientras Magma era consolado por Yuno.

—¿Quieres que nos vallamos? Te ves muy triste— preguntó Yuno.

—No, yo.. quiero seguir marchando— dijo, tomando las cosas que había llevado y siguió la manifestación.

Después de un poco más de recorrido hasta el atardecer, se detuvo en un puesto de aguas frecas para descansar.

Al tener ya su agua se dirigió a un parque y se sentó bajo un árbol, observando a varias mujeres descansar al igual que él.

Estuvo un momento más antes de volver a donde estaba la marcha, pero al pasar por un lote baldío se percató de una mochila con una flor. Se acercó y descubrió algo preocupante; era la misma flor que el había hecho, y la misma mochila de Julieta.

¿Qué te pasó? No estás aquí, ni cerca.. ¿A donde has ido, cariño?

Algo cortito para recordar que cosas como desapariciones pasan al menos diez veces al día, algo que no sólo merece un día para protestar.

418 palabras

Chauuuuu💜