Love And Hate [Kendall Jenner]

6

Kendall___

Rayan me dió su tarjeta y fui a comprar lo esencial, sabía que no duraremos mucho aquí así que solo lo que necesitaba.

Elegí unas prendas para el muy lindas y prolijas.

Volví al hotel donde estamos. El chófer se encargó de bajar las bolsas luego de abrir mi puerta.

Llegamos al piso y justo estaba enfrente a la puerta.

— déjelas aquí gracias — aún no abría la puerta — yo me encargo del resto.

— de nada señorita Khadra — el hombre se retiró y entonces fue cuando abrí la puerta.

— Rayan ya estoy aquí — dije alto — compré muy poco y algo para ti.

— gracias — la voz de Rayan era la que toda mujer le gustaría en un hombre, fuerte y espesa — compraste todo lo que querías.

— si pero más lo que necesitaba — dije mirando las bolsas en el piso — aquí tienes gracias.

— no hay porque, ahora todos tus antojos los debo cubrir yo — me regaló una sonrisa — se que tienes con que es obvio, pero en mi familia se maneja de esa manera.

— entiendo — le tendí la bolsa con su ropa — ve aprobar te lo que traje para ti.

Él tomo la bolsa de mi mano y se la llevó con él al baño. Unos minutos después salió y se veía increíble.

— diste en el punto jenner — él se miraba una y otra vez en el espejo, yo solo sonreía — no te equivocarás con los regalos de aniversario, cumpleaños y navidad.

— oye no soy tan básica para regalarte lo mismo en cada fecha — le di un golpe ligero en el hombro — pero te ves muy guapo.

— gracias, ahora toma una ducha y vamos a comer —  asentí — luego debo ir de compras para más cosas mientras estamos aquí.

.

Rayan___

Vi a Kendall luciendo algo parecido a lo que yo usaba y por petición de ella nos tomamos una foto frente al espejo en el que me veía hace unas horas.

—Posa para mí Rayan — eso me hizo reír y ella aprovecho para sacar la foto — salimos increíble mira.

— la verdad somos muy fotogénicos — miraba la foto en su celular — podrías pasármela, quiero postearla.

— mejor la subo yo y te menciono— asentí.

Tomamos lo necesario y salimos de allí, fuimos a comer a un lindo restaurante. Aquí la gente no era tan molesta como en los Ángeles.

— oye estuve pensando Kenny sobre dónde vamos a vivir al regresar — ella seguía comiendo mientras me miraba — y pues obviamente no será en tu casa, no me lo permitiría, tampoco quiero llevarte a mi casa es un lugar muy privado para mí entonces opte por comprar una casa. Que opinas de esta propuesta.