1.-𝐄𝐥 𝐞𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐨

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Época feudal de los imperios y maldiciones que abundaban por las tierras del Japón antiguo, bestias come humanos, sacerdotes y sacerdotisas encargadas de proteger la paz junto a los zorros de la diosa inari de nueve colas.



Nakahara Chuya, un zorro anaranjado con un pequeño tengu de aprendiz en las montañas, era para el su hermano menor y su más preciada posesión en décadas de soledad. Hoy, están en un pequeño pueblillo con unas linternas iluminando su camino, la nieve recubría todos lados a los que fueran, era invierno y las bajas temperaturas acechaban junto a varios depredadores

El niño que siempre estaba a su lado era ni más ni menos que Akutagawa Ryuunnosuke, un pequeño tengu echado por su clan que llegó a manos de Chuya pidiendo aprender a ser tan fuerte como el y defenderse de quienes lo maltrataron.

Chuuya, era un zorro de cuatro colas de inari, era espectacular ver a un zorro guardian en esas épocas, cada que visitaban algún poblado Akutagawa aprendía algo nuevo de Chuya, viendo lo amable que era con las personas, con los humanos... Y también con los animales, después de un largo viaje siempre regresaban a su templo en las mañanas que ahora, recubiertas de blanca nieve y frío hasta morir. Seguían siendo hermosas, Chuya siempre llegaba a preparar algo calientito para la comida y la cena por las bajas temperaturas, como Ryunnosuke vivía con el ya desde hace un buen tiempo, le había tomado cariño dejando de ser tan estricto con el paso del tiempo..

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Cuatro lunas más tarde fueron a caminar por las montañas, alejando se más del templo que era su hogar, Chuya noto una presencia diferente, y algo parecida a la de el, con su olfato detecto otro templo de inari cerca del lugar, tomando este una forma humana como si fuera lo normal, y aparte lo hacía por curiosidad a ver qué había dentro de allí.

Visitando más el lugar, vio a un zorro que lo veía con sorpresa, cabellos castaños y orejas con colas blancas, su yukata era azul fuerte.

- "Queridos visitantes, ¿qué los trae por aquí?

Pregunta tratando de ocultar sus nervios al ver a Chuya

- "Solo veníamos a visitar. Es interesante que este templo este tan lejos de las personas, de la civilización."

- "Querido humano, aunque el templo este lejos, los humanos como tú siempre encuentran la manera de llegar"

- "Interesante. Realmente. Nunca había visto a un zorro de nueve colas como tú"

- >Osamu echo a reír un poco< es que yo si soy único, usted no huele a qué es de por aquí"

- "No, de echo vengo desde lejos con mi pequeño aprendiz"


Se pusieron a charlar por un buen rato.. Dazai noto un extraño olor en Chuya, el mismo que el de un zorro de nueve colas, no se podía ocultar el olor del incienso que se ocupaba en los templos de inari, era un olor a romero o incluso a lavanda y menta, pero era inconfundible.

Aún así, no dijo nada

- "Me gustaría.. ir con ustedes dos a su viaje, al parecer es muy tranquilo"

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