Capitulo 2. Una Voz Silenciosa

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Era peculiar llegar a verlos, realmente. Siempre llamaban la atención, pero era inevitable por la condición de uno y la protección del otro. Era de esperarse qué ninguno quiera soltarse, pero un pacto mutuo los mantendría juntos.

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Era un nuevo día en la escuela Smiling Critters, el maestro Huggy daba su clase rutinaria a sus brillantes alumnos. Dentro del cuál siempre destaca el líder del salón, un perro llamado DogDay, que siempre irradiaba y brillaba como el sol. Mientras, en una área un poco alejada se encontraba un pequeño llamado CatNap con la maestra de Educación Especial Miss Delight.

Al terminar su clase rutinaria, DogDay se retiro a buscar a su lindo Nap. Algunas clases no las veían juntos por la condición de CatNap. Sin embargo, inmediatamente al terminar su respectiva clase, se dirigía a la área  donde estaban los salones de clases especiales y esperaba afuera del aula la salida CatNap, para retirarse y ir a comer juntos, con su grupo de amigos.

La clase de CatNap había terminado, como siempre, la maestra Miss Delight felicito a sus estudiantes por sus progresos y les aviso que al siguiente día se volverían a ver. Como de costumbre, a fuera de su aula lo esperaba un radiante DogDay, con una sonrisa de oreja a oreja. CatNap se despidió de su maestra y salió corriendo a recibir con un pequeño abrazo a DogDay. Quien lo recibió, como siempre, a gusto.

Se dirigieron al patio, con su grupo de amigos a almorzar. El grupo se alegro de ver al gatito y que comieran con ellos. Ya que al principio CatNap no le interesaba comer con alguien más que no fuera DogDay.

Después de saludarse y sentarse a comer todos juntos, DogDay saco la sorpresa qué tenía preparada para CatNap desde hace semanas.

—¡Te traje chocolates amargos Nap!—. Comento, feliz de ver que cumplió su cometido.

CatNap inmediatamente enrollo su cola en la pierna de DogDay y abrió su boca señalando qué lo alimentara. Sinceramente era la única forma que DogDay conocía, para que CatNap aceptara dejarse alimentar y estuviera contento todo el día. Ya que sabía que eran los dulces favoritos de CatNap.

Para el grupo ya era normal ver esas muestras de amor entre ellos, aunque lo atribuyen siempre a la condición de CatNap. Sin embargo, para Poppy y Ollie los mejores amigos por parte de DogDay sabían que era por algo más que solo la condición de CatNap.

La cercanía que mantenían esos dos, realmente no era de una “amistad” cualquiera. DogDay trataba de nunca dejar solo a CatNap, para muchos seria sofocante y un poco asfixiante una relación de amistad de esa manera. Sin embargo, ellos podían darse cuenta lo mucho que disfrutaba y lo contento que CatNap estaba de dicha relación. Era un poco enfermizo como CatNap parecía disfrutar tener a DogDay solo para él y que solo estuviera para él.

Pero, por la condición de CatNap y el echo qué DogDay fue su primer amigo cuando llegó nuevo a esta escuela, y fue en su primer día. Era normal para las personas su apego casi enfermizo.

El día que se conocieron fue realmente vergonzoso y penoso por el echo qué DogDay no tenía conocimiento de la condición de CatNap. Y se la paso hablando y haciendo preguntas sin parar, la curiosidad de conocer a alguien nuevo y interesante a su parecer, no podía con su curiosidad. Sin embargo, al pasar los minutos y no ver comunicación por su parte, creyó que era tímido y callado. Así que pidió disculpas y trató de volver a empezar desde el principio.

—¡Disculpa si te asuste, con mi entusiasmo!. Me llamo DogDay, es un placer conocerte—. Explicó con cierta vergüenza notoria en su voz.

Sin embargo, vio como el gato abrió su boca sin producir o articular alguna palabra y inmediatamente cerró sus labios con fuerza en señal de arrepentimiento. DogDay se limito a verlo, con una gran confusión por el acto. Pero, se quedó sorprendido cuando lo vio voltear  y sacar una pequeña libreta de su mochila, la cual contenia solo un: “Un gusto, me llamó CatNap

Al terminar de leer la hoja de la pequeña libreta, le surgió duda al no saber porque razón había dicho su nombre a través de la libreta. Pero si esperar mucho, CatNap cambió la página y DogDay pudo despejar sus dudas.

“No puedo hablar, tengo una condición especial”.

DogDay, se sintió increíblemente mal por la condición de CatNap, si él no pudiera hablar sinceramente sería una tortura horrible de vivir.

CatNap sintió el repentino cambio de ánimo de DogDay y espero lo peor, ya que en su antigua escuela lo molestan por su condición y fue el motivo del cambio de escuela y casa. Sin embargo, no se espero lo que sucediera.

DogDay saco su libreta con delicadeza y saco un lápiz de su mochila para escribir:

“El placer es mío por conocerte, desde ahora en adelante seré tu ángel guardián”.

CatNap no podía creer que apenas conocia a este perro llamado DogDay y ya se había declarado el mismo su Ángel Guardián. Sin embargo, la sonrisa de felicidad no pudo contenerse. Y realmente sus ojos brillaron por la actitud, de su ahora Ángel Guardián.

Desde ese momento, se convirtieron en una “amistad inseparable”. Siempre estaban juntos, y realmente era imposible verlos separados o peleados. Tenían una conexión especial, sabían lo que quería el otro, con solo mirarse y confiaban ciegamente en el otro.

Poppy y Ollie fueron los primeros amigos de DogDay, cuando cambio de escuela. Sin embargo, aunque hicieran todo lo que estaba a su mano, no iban a poder superar el amor y la amistad que tenían DogDay y CatNap.

Y con el pasar del tiempo sabían que ellos nunca se separarían ya que DogDay le hizo una promesa a CatNap que nunca se iría de su lado y siempre sería su ángel guardián. Y CatNap prometió amarlo hasta el final de sus días.

Fin.





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Disculpen las faltas de ortografía. Es mi primera vez haciendo un FanFic. Traeré pronto más contenido.

𝕻𝖑𝖊𝖓𝖎𝖑𝖚𝖓𝖎𝖔 [One Shorts] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora