Strangers ~ PoohPavel

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Pavel caminó por el pasillo, lo suficientemente rápido para no llegar tarde a la reunión del consejo estudiantil, pero también lo suficientemente lento para que los otros estudiantes sobrenaturales no se asustaran por su exagerada velocidad natural.

Cuando llegó al salón de reuniones abrió la puerta de golpe y las tres personas en el interior se giraron a verle. San, el lindo chico representante del clan de Hadas, se levantó de su sitio rápidamente y caminó hacia el vampiro.

— Buenos días Pavel —balbuceó nervioso—. Te estábamos esperando, solo faltabas tú para comenzar con la reunión.

— Agradezco que me esperaran —tomó asiento en su lugar correspondiente—. Tuve algunos inconvenientes que resolver.

El consejo estudiantil estaba conformado por los 5 futuros líderes de los clanes más importantes de la Institución: San, del clan de Hadas; Jenna, del clan de Sirenas; Type, del clan de Brujos; Yuna, del clan de Dragones y finalmente Pavel, del clan de Vampiros.

Todos se encontraban reunidos en el salón designado para el consejo, sentados alrededor de la mesa circular y en cada uno de sus respectivos asientos.

— La directora Moon me llamó hoy por la mañana —comenzó a hablar San, quien democráticamente había sido elegido como jefe del consejo—. Me ha dado indicios de una gran noticia que probablemente alterará todo el ciclo estudiantil que hemos venido manejando a lo largo de estos años.

— ¿Es algo muy grave? —preguntó Jenna luciendo preocupada—.

— Demasiado diría yo —suspiró el joven hada—. Tendremos una reunión conjunta con todos los alumnos por la tarde, así que debemos informárselos a nuestros respectivos clanes y a las demás especies.

— ¿No nos dirás que fue lo que la directora te mencionó? —preguntó Type sintiéndose evidentemente curioso—.

— Lamentablemente no puedo decirlo aún —suspiró—. Pero hoy por la tarde se enterarán, por el momento esto es todo lo que puedo decir, ahora regresen a sus actividades.

Yuna fue la primera en levantarse y fue seguida por Jenna y Type saliendo de la sala. Pavel se levantó para hacer lo mismo, pero una mano en su muñeca lo detuvo. Se giró hacia San, quien parecía estar muy nervioso.

— ¿Sucede algo? —el vampiro lo miró enarcando una ceja—.

— Yo... —se mordió el labio inferior—. Quería saber si pensaste en lo que te mencioné la otra noche.

Pavel se quedó en silencio tratando de recordar la conversación que ambos habían tenido la noche de hace tres días atrás. Su mente le trajo el recuerdo del joven hada tomándole de las manos y arrodillándose frente a él suplicando porque le de una oportunidad a su amor.

— San, aprecio mucho tus sentimientos —trató de sonreírle—. Pero sabes perfectamente que no estoy buscando relacionarme de manera romántica con nadie. Ni hoy, ni mañana, ni nunca.

— Pero...

— Nos vemos después —se despidió interrumpiéndole—.

El joven vampiro salió del salón y caminó libremente por los largos pasillos de la institución hasta cruzar por los grandes patios que dividían los sectores de cada clan. Finalmente llegó al sector del Clan Vampiro e ingresó a su edificio, saludó a la encargada de la recepción y subió al ascensor hasta llegar a su piso.